El Ayuntamiento de Pedre?a amenaza con llevar a Ballesteros ante los tribunales

El ayuntamiento de Marina de Cudeyo, al cual pertenece Pedre?a, interpondr¨¢ la correspondiente querella ante los tribunales ordinarios contra Severiano Ballesteros, si ¨¦ste no paraliza la construcci¨®n de una p¨ªscina en la finca donde se ubica su chal¨¦. Recientemente, la autoridad municipal trat¨® de detener la obra por no contar el famoso golfista con la precisa licencia. La corporaci¨®n considera, adem¨¢s que Ballesteros ha invadido, con el muro de hormig¨®n que circunda parte del recinto, un camino comunal.Las fricciones entre el ayuntamiento y Severiano, seg¨²n se recoge en la prensa regional, tienen su origen en una solicitud denegada al millonario jugador para construir una piscina, una pista de tenis y algunas otras instalaciones. Ballesteros edific¨® hace escasos a?os un llamativo chal¨¦, modelo ingl¨¦s, junto al campo del Club de Golf de Pedre?a y abandon¨®, con su familia, la casa de labranza que siempre habitaron. Desde su vivienda el jugador llegaba en contados minutos a los links donde, siendo a¨²n chiquillo, se entrenaba al anochecer y a hurtadillas.

La denegaci¨®n del ayuntamiento se fundament¨® en que la parcela adquirida por Severiano era suelo rural, lo que significaba que s¨®lo pod¨ªan realizarse sobre ella edificaciones destinadas a la agricultura y ganader¨ªa. La corporaci¨®n comunic¨® a Ballesteros la conveniencia de esperar algunos meses hasta que quedara aprobado el nuevo plan general de urbanismo para el municipio, en el cual su finca se ver¨ªa recalificada como suelo urbano. Pese a todo, el golfista ni respondi¨® ni esper¨® a la concesi¨®n de la pretendida licencia.

El jugador acaba de intervenir, la semana pasada, en el torneo de la P.G.A. (Asociaci¨®n de Jugadores Profesionales de Estados Unidos), ¨²ltima etapa de la Gran Chelem del golf mundial, donde no tuvo una brillante actuaci¨®n, al quedar a bastantes golpes del vencedor, el norteamericano Ray Floyd, l¨ªder desde el primer d¨ªa. Ballesteros, tras ser tercero en el Masters, en abril, no volvi¨® a brillar en los tres restantes grandes torneos de la temporada: el Open de Estados Unidos, el Brit¨¢nico y el citado de la P.G.A.