Enfrentamientos f¨ªsicos entre partidarios de HB y del PNV

Viene de la primera p¨¢ginaEl enfrentamiento f¨ªsico, que ten¨ªa lugar en el punto de encuentro de los grupos de manifestantes de HB y del PNV, amenaz¨® con generalizarse en vanas ocasiones. La polic¨ªa, presente en distintos puntos de la ciudad, incluso a escasos metros donde se suced¨ªan las violentas escenas, no intervino en ning¨²n momento. Los choques se prolongaron durante m¨¢s de una hora, si bien los manifestantes de, la coalici¨®n-abertzale y los simpatizantes del PNV llegaron a las manos s¨®lo muy espor¨¢dicamente.

Finalizada la Salve, los enfrentamientos cobraron nueva virulencia. Mientras simpatizantes peneuvistas aplaud¨ªan al paso del lendakari y de su comitiva, los de HB lanzaban grav¨ªsimos insultos, gritaban "Gora ETA Militarra" y arrojaban numerosas monedas e incluso zapatos y zapatillas. El lendakari tuvo que agachar la cabeza en alg¨²n momento para evitar la lluvia de objetos que ca¨ªan sobre su comitiva. Poco despu¨¦s manifestaba: "Al margen de cualquier infantilismo iconoclasta ingrato, acudir a este acto tan popular como es la Salve en Donostia".

El lendakar¨ª alcanz¨® el ayuntamiento donostiarra gracias al esfuerzo y la labor de cadetes de la Polic¨ªa Municipal de San Sebasti¨¢n, que hubieron de empujar a los simpatizantes de Herri Batasuna, que en alg¨²n momento zarandearon a la comitiva de Carlos Garaikoetxea. Cuando el lendakari y su comitiva, en la que destacaban entre otros, el gobernador civil de Guip¨²zcoa, Pedro Mar¨ªa Ar¨ªstegui, tres consejeros del Gobierno vasco, un senador del PNV, el alcalde y concejales donostiarras, penetraron en el ayuntamiento, los manifestantes de Herri Batasuna intentaron seguirle. La barrera formada por los hombres de B¨¦rrozi -grupo de la escolta personal que acompa?a al presidente vasco- impidi¨® la entrada de los abertzales, mientras se suced¨ªa la lluvia de monedas y se reproduc¨ªan los insultos en medio de una gran crispaci¨®n.

Media hora despu¨¦s grupos m¨¢s reducidos de simpatizantes de Herri Batasuna continuaban enfrent¨¢ndose verbalmente con la escolta de Carlos Garaikoetxea. Los manifestantes gritaban entonces "berrozis, polic¨ªa, la misma porquer¨ªa", mientras en las cercan¨ªas y en puntos aislados personas, algunas de ellas de edad avanzada, discut¨ªan intercambi¨¢ndose amenazas e insultos.