Vecinos del pueblo gallego de Bayona, contra la construcci¨®n de chal¨¦s junto a un parador nacional
Uno de los parajes m¨¢s bellos y monumentales de Galicia, la finca de Monterreal, en Bayona, donde se asienta el parador nacional Conde de Gondomar, puede verse afectado por los proyectos urbanizadores de la sociedad mercantil Monteferro, SA, que pretende implantar a tan s¨®lo diez metros de la muralla hist¨®rica una colonia de chal¨¦s y un parque de atracciones por una inversi¨®n total de 250 millones de pesetas. La iniciativa, que cuenta con el consentimiento del alcalde, ha movilizado en contra al vecindario de Bayona. Una manifestaci¨®n de oposici¨®n al proyecto, celebrada el s¨¢bado pasado, concluy¨® en batalla campal por la intervenci¨®n de un grupo de provocadores, con el saldo de varios heridos. Galicia est¨¢ acostumbrada a que sus expoliaciones urban¨ªsticas cuesten sangre.
La pen¨ªnsula de Monterreal, antiguo recinto militar, hab¨ªa sido comprada a principios de siglo por Angel Bedri?ana al marqu¨¦s de Elduayen. En 1966, la familia Bedri?ana vendi¨® la mayor parte de la parcela al Ministerio de Informaci¨®n y Turismo para que convirtiera los restos del castillo en parador nacional. La transacci¨®n cost¨® al Estado 19 millones de pesetas.A partir de aquel escrito, se segregaba una extensi¨®n de 15.000 metros cuadrados que seguir¨ªa en propiedad de los herederos de Angel Bedri?ana.
Esta parcela, situada en el suroeste de la pen¨ªnsula, a tan s¨®lo diez metros de las murallas, fue vendida hace a?o y medio, a un grupo inversor formado por cinco socios, por una cantidad que ronda, seg¨²n el apoderado, los 30 millones de pesetas, aunque en la escritura s¨®lo figurase como precio de compra el de 5 millones. La especulaci¨®n continu¨® su marcha ascendente, y los nuevos propietarios de la parcela la vendieron a la sociedad mercantil an¨®nima Monteferro, SA, por sesenta millones. Monteferro, SA, pretende urbanizar los 15.000 metros cuadrados, que integran enclaves hist¨®rico-art¨ªsticos como el llamado reducto del condestable, en una urbanizaci¨®n de chal¨¦s de 5.000 metros cuadrados, en la que invertir¨ªa 150 millones de pesetas, y en un parque de atracciones de 10.000 metros cuadrados, por valor de 100 millones de pesetas. Para esta sociedad, la calificaci¨®n del suelo como "verde de uso p¨²blico" seg¨²n figura en el Plan general urbano de Bayona es compatible con sus proyectos de construir un parque de atracciones. Hace un a?o pretendi¨® construir un casino, pero la proximidad del de la isla de La Toja impidi¨® la concesi¨®n de una nueva licencia.
De momento, la empresa ha comenzado la tala de ¨¢rboles y el desbrozamiento del terreno, sin que consten las correspondientes licencias municipales de obras. El alcalde de Bayona, Benigno Rodr¨ªguez Quint¨¢s, independiente, pero muy pr¨®ximo a Alianza Popular, est¨¢ d¨¦ acuerdo con los planes de urbanizaci¨®n y en su d¨ªa fue uno de los m¨¢ximos promotores del proyecto de un casino.
La ciudad amanece cada d¨ªa con pintadas contrarias a las obras, a las que califica de robo al patrimonio del vecindario. El Colegio de Arquitectos de Galicia se ha manifestado en contra de dicha urbanizaci¨®n, y el viernes pasado fue presentada una pregunta ante la Mesa del Parlamento gallego, a cargo del diputado del Grupo Mixto Gerardo Gonz¨¢lez Mart¨ªn, sobre qu¨¦ medidas hab¨ªa adoptado la Xunta para evitar la destrucci¨®n de este conjunto hist¨®rico-art¨ªstico. Una manifestaci¨®n de vecinos protestando por el inicio de las obras, el pasado s¨¢bado, concluy¨® con varios heridos, debido al enfrentamiento con otro grupo de personas a favor del proyecto. El clima de tensi¨®n aumenta en Bayona d¨ªa a d¨ªa.
Posible pacto
Seg¨²n ha podido saber EL PAIS en fuentes solventes, la soluci¨®n del conflicto podr¨ªa venir por parte del Ministerio de Cultura, si este departamento expropiase a los diez socios, todos vigueses, de Monteferro, SA, la propiedad de la parcela. Seg¨²n estas mismas fuentes, la cantidad que ¨¦stos exigir¨ªan al Estado u?a la de 150 millones de pesetas. De esta forma, la finca de Monterreal pasar¨ªa en un a?o y medio de los cinco millones de pesetas con que se consign¨® la escritura de compra a la familia Bedri?ana -aunque en realidad fueran muchos m¨¢s- a los 150 que ahora pedir¨ªan sus due?os.En contra de la urbanizaci¨®n de sucios de caracter¨ªsticas similares al de la pen¨ªnsula de Bayona hablan legislaciones oficiales, como el Plan general urbano de la ciudad, refrendado por el Ministerio de la Vivienda, las antiguas normas sobre el litoral de las R¨ªas Bajas, la ley del suelo, la normativa sobre protecci¨®n y vigilancia de las costas y la ley de Protecci¨®n de Monumentos Militares. Especialmente esta ¨²ltima dictamina muy claramente que la protecci¨®n de estos recintos abarca no s¨®lo al espacio interior, como en el caso de castillos amurallados como el de Bayona, sino a la extensi¨®n colindante que los rodea.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.