800 'marines' norteamericanos supervisan en la capital libanesa la evacuaci¨®n por mar de combatientes palestinos hacia Siria

La evacuaci¨®n por tierra, con destino a Siria, de combatientes palestinos que se encontraban en Beirut, fue suspendida indefinidamente ayer por decisi¨®n de Damasco, que considera m¨¢s segura la salida por mar desde Beirut hacia su puerto de Tartous; esto fue llevado a cabo ayer por medio millar de personas, siguiendo con normalidad el plan Habib, que fue reforzado ayer con la llegada de ochocientos marines norteamericanos. En tanto la evacuaci¨®n palestina comienza a convertirse en un acto rutinario, el inter¨¦s se fija en el pos-Beirut y en las opciones pol¨ªticas para el futuro de L¨ªbano bajo la presidencia de Bechir Gemayel, quien ha declarado su disposici¨®n para firmar un tratado de paz con los israel¨ªes.

Las autoridades israel¨ªes no plantearon ning¨²n problema al cambio de planes sirio, cuyas autoridades prefirieron el transporte de los evacuados por v¨ªa mar¨ªtima y no terrestre, ante el temor de que el convoy fuese atacado por las milicias cristianas. Un portavoz israel¨ª declar¨® que "era una cuesti¨®n t¨¦cnica" que no afectaba para nada la letra y el esp¨ªritu de los acuerdos alcanzados.La sensaci¨®n optimista respecto al estricto cumplimiento de los planes de evacuaci¨®n crece de d¨ªa en d¨ªa, y su realizaci¨®n con normalidad, tambi¨¦n. Simult¨¢neamente a la llegada de los ochocientos marines en la madrugada de ayer a Beirut -al mando del coronel James Mead, veterano de Vietnam-, que relevaron inmediatamente a los franceses en la zona de embarque, los israel¨ªes replegaron posiciones en la l¨ªnea divisoria de la capital y en el aeropuerto, donde era esperada la fuerza expedicionaria italiana en las ¨²ltimas horas de la tarde de ayer.

Las tropas israel¨ªes retiraron sus carros de combate del sur de la capital, dirigi¨¦ndolos hacia el Este, hacia el valle de la Bekaa, y al Norte. Otro contingente ha sido embarcado en el puerto de Junieh, veinte kil¨®metros al norte de Beirut, con destino desconocido.

El normal desarrollo de la operaci¨®n de evacuaci¨®n provoca que los esfuerzos se concentren en la b¨²squeda de una soluci¨®n pol¨ªtica para L¨ªbano, una cuesti¨®n dificil, por cuanto la elecci¨®n de Gemayel ha provocado el firme rechazo de la comunidad musulmana y de las fuerzas de la izquierda libanesa.

El deseo expresado por el joven presidente electo liban¨¦s de firmar un tratado de paz con Israel aumenta las reticencias, a pesar de sus declaraciones aperturistas sobre la necesidad de respetar los derechos confesionales de cada cual y de que L¨ªbano recupere la identidad nacional.

En la b¨²squeda de tal consenso participa el infatigable emisario norteamericano, Philip Habib, ayudado por el embajador de Arabia Saud¨ª en Beirut, Al¨ª al Shaer; ambos pretenden establecer un puente para el di¨¢logo entre Gemayel y los representantes de las comunidades musulmanas. El diario izquierdista liban¨¦s As Safir inform¨® ayer que Elabib ha solicitado al ex primer ministro, Saeb Salam, que mantenga una entrevista con el presidente electo.

Los musulmanes e izquierdistas solicitaron respuestas inmediatas sobre dos puntos: la presencia de las tropas israel¨ªes en territorio liban¨¦s y el eventual tratado de paz entre Beirut y Tel Aviv, as¨ª como garant¨ªas pol¨ªticas para los grupos antifalangistas.

Escalada de represalias

El tema parece tener una dif¨ªcil soluci¨®n a corto plazo, desde el momento que la elecci¨®n de Gemayel, y lo que ¨¦sta representa, ha generado una escalada de represalias violentas, como fueron los ataques a cuarteles de la polic¨ªa en el norte del pa¨ªs, el bloqueo de la carretera Tr¨ªpoli-Beirut y los atentados contra propiedades de aquellos diputados que posibilitaron la elecci¨®n de Bechir Gemayel.

El ex primer ministro sunnita, Rashid Karami, ha amenazado con constituir una zona liberada en el norte de L¨ªbano, y el ex presidente cristiano maronita, Suleiman Franjieh, fue expl¨ªcito al declarar que "no consentiremos lo que nos han impuesto los israel¨ªes".

La propia soluci¨®n del tema de Beirut est¨¢ superada para convertirse en un problema concerniente a todo el territorio liban¨¦s, de Norte a Sur y de Este a Oeste. As¨ª, en la franja con Israel, bajo dominio de las milicias cristianas de Saad Haddad, se afirma que ¨¦ste acepta totalmente la designaci¨®n de Gemayel, pero no formar¨¢ alianza con las tropas falangistas porque prefiere tratar directamente, como hace ahora, con Israel.

Est¨¢ tambi¨¦n el tema de la pacificaci¨®n del valle de la Bekaa, donde los israel¨ªes siguen reforzando sus posiciones y donde los duelos artilleros se recrudecen entre las bater¨ªas sirias y palestinas.