La situaci¨®n financiera de la Caja Rural de Santander es grav¨ªsima, seg¨²n el Gobierno regional de Cantabria
La inexistencia de garant¨ªas suficientes, determinada por la "pol¨ªtica de amiguismo" desarrollada por la direcci¨®n de la Caja Rural de Santander, y que ha tenido su continuidad, tras el cese por el Banco de Espa?a de aqu¨¦lla, en los nuevos directivos avalados por el Consorcio Nacional de Cajas Rurales, ha llevado a esta entidad de cr¨¦dito agrario a una "grav¨ªsima situaci¨®n", seg¨²n los datos facilitados por el Gobierno Regional de Cantabria. La situaci¨®n se caracterizar¨ªa por la existencia de deudas y fallidos por importe de 1.345 millones de pesetas, lo que representa el 40% de los recursos ajenos de la entidad. En la lista de esos deudores figura en primer lugar el grupo del diputado de UCD por Cantabria, Justo de las Cuevas, que aparece en la relaci¨®n facilitada ahora con seiscientos millones.
El volumen de deudores, de los que tan s¨®lo una peque?a parte fue desvelada por la investigaci¨®n del Banco de Espa?a que dio paso al cese del presidente, del director general y de todos los consejeros de la citada caja rural, el pasado d¨ªa 11 de marzo, ha sumido a la Caja Rural de Santander en una situaci¨®n que, en opini¨®n de los t¨¦cnicos consultados, hace predecir "un inevitable caos financiero", calificando la situaci¨®n "no como preocupante, sino insalvable". Sin embargo, esta "situaci¨®n l¨ªmite" est¨¢ siendo utilizada por el Consorcio Nacional de Cajas Rurales, que preside Domingo Sol¨ªs Ruiz, para impedir que el Banco de Espa?a intervenga directamente y ponga definitivamente al descubierto unos hechos que amenazan seriamente la supervivencia de la entidad.
Pol¨ªtica de continuismo
Seg¨²n un portavoz del Gobierno Regional de Cantabria, el gobernador del Banco de Espa?a, Jos¨¦ Ram¨®n Alvarez Rendueles, se refiri¨® recientemente a la imposibilidad de intervenir directamente en la Caja Rural de Santander, ante la amenaza del Consorcio Nacional de Cajas Rurales de abandonar la entidad c¨¢ntabra a su suerte, que no ser¨ªa otra, seg¨²n los expertos, que la quiebra, dado que el Banco de Espa?a no estar¨ªa dispuesto a correr con el costo de su reflotaci¨®n.El portavoz del Ejecutivo regional, aun aceptando la tesis del Banco de Espa?a, mostraba su extra?eza, sin embargo, por la "evidente falta de voluntad" del consorcio para afrontar directamente el problema. "Lo vienen demostrando", dijo, "con su pol¨ªtica de continuismo en la direcci¨®n, en la que ocupan los cargos de responsabilidad hombres del equipo del director cesado". El representante de la Diputaci¨®n regional se hac¨ªa eco de la sorpresa que para ellos supone, tambi¨¦n, Ia incompetencia y la apat¨ªa" demostradas en los cinco meses transcurridos desde la intervenci¨®n del consorcio, ya que "el tiempo juega en contra de los intereses de quienes queremos recuperar para los ganaderos una entidad de cr¨¦dito fuerte, saneada y competitiva".
La lista de morosos
El elevado n¨²mero de incobrables, de los que existe ya constancia exhaustiva, es el resultado de una pol¨ªtica de concesi¨®n de cr¨¦ditos sin exigir los avales precisos. As¨ª, en la lista de morosos que maneja el propio consorcio, a cuyos datos generales ha tenido acceso EL PAIS, figura, en primer lugar, el grupo de Justo de las Cuevas, integrado por sus familiares y socios en diversos negocios -entre ellos el tambi¨¦n parlamentario de UCD Roberto S¨¢ez-, con seiscientos millones de pesetas.Le siguen en importancia el constructor y hostelero Jos¨¦ L¨®pez Garc¨ªa, ex dirigente de la CEOE; dos cooperativas que han sido dadas como inexistentes por el Registro Nacional de Cooperativas y que tienen cr¨¦ditos por valor de doscientos millones de pesetas, y la Uni¨®n Territorial de Cooperativas del Campo (Uteco), ¨¦sta, con 250 millones de pesetas, de los que 105 millones corresponden al traspaso realizado por la caja rural de su cuenta de inmobiliario, hecho denunciado en el informe elaborado por el Banco de Espa?a, con la precisi¨®n de que el director de la caja rural, Tom¨¢s Mier, era a su vez, en el momento de la operaci¨®n, gerente de Uteco, puesto que sigue desempe?ando.
Otros descubiertos importantes los protagonizan Pescados del Cant¨¢brico, SA (Pescansa), con 160 millones de pesetas; Juan Ram¨®n L¨®pez Lia?o, propietario de la empresa no agraria Cauchos Maries, SA, que adeuda 85 millones de pesetas; los cuarenta millones adeudados por Antonio Guti¨¦rrez Herrer¨ªas y los veinte de Ferm¨ªn G¨®mez Se?a, ambos ligados estrechamente a Justo de las Cuevas a trav¨¦s del sindicato ganadero AIGAS, controlado por ¨¦ste, a los que se unen cerca de cien millones m¨¢s de ex consejeros y altos directivos de la caja, que completan la cifra de 1.345 millones de incobrables, sobre la base de unos recursos ajenos de 3.800 millones y un capital social de 230 millones de pesetas, seg¨²n datos del 12 de junio de 1982.
Poder para el jefe de riesgos
Ante esta situaci¨®n, el Consorcio Nacional de Cajas Rurales otorg¨® poder para gestionar la caja rural a cuatro altos directivos: Antonio Gonzalo Isabel, Tomas Buergo Hidalgo, Jos¨¦ Manuel Fern¨¢ndez N¨²?ez y Jes¨²e Bl¨¢zquez Ortega, quienes posteriormente decidieron delegar sus funciones en Ignacio Arce del Peral, hombre de confianza del ex director de la entidad al menos durante los ¨²ltimos trece a?os, habiendo desempe?ado el cargo de jefe de riesgos y subdirector hasta la llegada del consorcio.La actitud continuista de ¨¦ste, que mantiene peri¨®dicos contactos con el cesado director general, del que fuentes de los trabajadores se?alan que sigue detentando el poder de decisi¨®n en la caja, y el no afrontar los problemas dejados por la anterior gesti¨®n hacen que la entidad no pueda ni siquiera cubrir los coeficientes de caja obligatorios, siendo enviados los fondos por el consorcio con un inter¨¦s que agrava a¨²n m¨¢s la situaci¨®n de la caja c¨¢ntabra.
Esta ineficacia ante la crisis de la entidad contrasta, adem¨¢s, con el mantenimiento y profundizaci¨®n de la pol¨ªtica de presiones en contra de los trabajadores, continuando los intentos, ya fracasados anteriormente, para revocar al comit¨¦ de empresa, y en especial a algunos de sus miembros, considerados conflictivos por la direcci¨®n del consorcio.
El director delegado de ¨¦ste para Cantabria, Arce, lleg¨® a confeccionar una lista de trabajadores con descubiertos en sus cuentas, a los que amenaz¨® con la retenci¨®n de la paga de verano si no regularizaban su situaci¨®n, pretensi¨®n que fue abortada por la intervenci¨®n del comit¨¦ de empresa, que denunci¨® el hecho ante la Delegaci¨®n del Ministerio de Trabajo. El n¨²mero de trabajadores que pudieron verse afectados por esa medida -alrededor de veinticinco- ofrec¨ªa un saldo medio deudor que no llegaba a las 36.000 pesetas.
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