Duelo multitudinario en el entierro de una dirigente guerrillera peruana

La multitudinaria asistencia al funeral, que fue oficiado por un obispo, y al entierro de la dirigente de la organizaci¨®n guerrillera Sendero Luminoso, Edith Lagos, que tuvo lugar en la ciudad sure?a de Ayacucho, ha despertado preocupaci¨®n en la clase dirigente peruana.

La joven, de veinte a?os de edad, fue muerta por la polic¨ªa el pasado d¨ªa 3 de septiembre cuando se dispon¨ªa, junto con miembros de su organizaci¨®n, a tender una emboscada a una patrulla de la Guardia Republicana, seg¨²n un comunicado del Ministerio del Interior. Otras versiones indicaron que la joven muri¨® despu¨¦s de ser detenida. Parlamentarios de todas las tendencias han pedido que se abra una investigaci¨®n al respecto.El semanario Oiga, que publica una extensa informaci¨®n sobre el sepelio, publica una foto en la que se ve una gran multitud que abarrota la calles durante el sepelio de la guerrillera. Ello, seg¨²n la publicaci¨®n "revela que los guerrilleros, por absurdo que parezca, han conseguido adeptos".

Sendero Luminoso, nombre por el que es conocida la escisi¨®n prochina del Partido Comunista Peruano (PCP), que decidi¨® seguir "por el sendero luminoso de Jos¨¦ Carlos Mari¨¢tegui" -pionero del socialismo peruano-, pas¨® a la lucha armada en 1980.

Su principal zona de influencia se sit¨²a en la regi¨®n de Ayacucho, a 570 kil¨®metros al sur de Lima. En la ciudad de Ayacucho, el pasado 2 de marzo, 150 guerrilleros de Sendero Luminoso atacaron los puestos de polic¨ªa y liberaron a 274 reclusos que se encontraban en la prisi¨®n de la ciudad, entre ellos 54 acusados de actividades terroristas.

Edith Lagos fue vestida con un uniforme verde olivo y una boina roja. Miles de personas acompa?aron el f¨¦retro y desfilaron por la capilla ardiente y, "para sorpresa de muchos" -se?ala Oiga- el obispo de Ayuacucho, Maximiliano Prado, ofici¨® una misa de cuerpo presente.

Al salir de la iglesia, una bandera roja, con la hoz y el martillo, fue colocada sobre el ata¨²d, que fue paseado por toda la ciudad hasta que cay¨® la noche. El semanario se?ala que el hecho de que el cuerpo de la guerrillera no fuera entregado inicialmente a sus f¨¢miliares fue un "grave error pol¨ªtico".

El toque de queda en la regi¨®n de Ayacucho ha sido ampliado en los ¨²ltimos meses a doce horas, de siete de la tarde a siete de la ma?ana. La capital cuenta con una importante presencia de fuerzas policiales que, sin embargo, no pueden evitar que de cuando en cuando un atentado deje a oscuras toda la ciudad. El ¨²nico ¨¦xito policial se reduce a centenares de estudiantes y campesinos detenidos como sospechosos