El Estado invirti¨® en los siete primeros meses del a?o poco m¨¢s de la tercera parte de lo previsto para 1982

En los siete primeros meses del a?o, las inversiones del Estado apenas sobrepasaron un tercio de la cantidad presupuestada para todo el ejercicio. Aunque se corrija la aton¨ªa en lo que resta de 1982, como es probable, todo parece indicar que la inversi¨®n total espa?ola volver¨¢ a tener crecimiento negativo, debido a los s¨ªntomas de constante debilitamiento de la privada, que en parte se alimenta de aquella. La t¨ªmida recuperaci¨®n experimentada en 1980, consolidada por fin en 1981, despu¨¦s de cinco a?os de ca¨ªda, est¨¢ de nuevo en peligro.

Hasta el 1 de agosto, los pagos de operaciones de capital ordenados por el Estado representaron un 38,7% de la cantidad prevista para 1982. El presupuesto del ejercicio para los dos grupos que engloban alcanza 955.673 millones de pesetas, de los cuales 353.785 millones corresponden a "inversiones reales" (cap¨ªtulo 6 de los Presupuestos del Estado), y 601.888 millones a "transferencias de capital" (cap¨ªtulo 7).Como puede observarse en el cuadro adjunto, las inversiones propiamente dichas han registrado menor grado de realizaci¨®n (30,9% de los cr¨¦ditos disponibles) que las transferencias (43,9%). En ambos casos, referidos a obligaciones contra¨ªdas, cuyo cumplimiento total (39,1 %) fue algo superior que los pagos ordenados, el nivel de cobertura ha resultado inferior al de los siete primeros meses del a?o pasado (31,9% y 49,4%).

El escaso ritmo inversor ha hecho que los pagos ordenados hasta el 1 de agosto por capital (313.197 millones de pesetas) hayan sido casi cinco veces inferiores a los totales (1,53 billones de pesetas), cuando la consignaci¨®n de operaciones de capital es superior a una cuarta parte de los gastos del presupuesto. Ello significa que la marcha del gasto no sigue la prioridad dada a las inversiones, con el fin de paliar el paro.

Mientras que el gran cap¨ªtulo de gastos corrientes estaba previsto que aumentara sobre el a?o anterior un 23,9%, frente al 28,9% de los gastos de capital, hasta el 31 de julio los primeros han crecido un 35,5% (ya se ha gastado el 59,7%) y los de capital se han quedado en un 18,1% de incremento. No obstante, en cr¨¦dito dispuesto por los ministerios, al finalizar julio, se hab¨ªa gastado un 65% del total 1982.

La aton¨ªa de las inversiones p¨²blicas, por otra parte, se observa en un momento en que se acent¨²a el debilitamiento de las privadas. Ello significa que, si bien la segunda parte de todos los a?os suele ser m¨¢s activa en la realizaci¨®n de inversiones, en 1982 el dinero del Estado es probable que no llegue a contener la ca¨ªda de la inversi¨®n total espa?ola, como en 1981.

Seg¨²n datos oficiales, la inversi¨®n, expresada en formaci¨®n bruta de capital fijo, aument¨® durante el pasado ejercicio el 1,5%, llegando a 3,4 billones de pesetas. Sin embargo, descontado el efecto de las inversiones p¨²blicas, que tuvieron una de las mayores tasas de realizaci¨®n de los ¨²ltimos a?os, diversos servicios de estudios han estimado que la inversi¨®n privada descendi¨® algo m¨¢s del 1%.

Los indicadores disponibles revelan que la inversi¨®n total tiende de nuevo a decrecer. Seg¨²n el Banco de Espa?a, retrocedi¨® en el primer semestre, pese a que sigue siendo positiva la destinada a material de transporte y actividades vinculadas al Plan Energ¨¦tico Nacional.

De otro lado, el ¨²ltimo ¨ªndice disponible de producci¨®n industrial se?ala que, en los cuatro primeros meses de 1981, el apartado de los bienes de inversi¨®n observ¨® en descenso del 9,5%. Y las proyecciones hasta septiembre del servicio de estudios de la Confederaci¨®n Espa?ola de Cajas de Ahorros se?alan que el descenso se mantuvo fuerte hasta junio. Otro indicador que apunta en el mismo sentido es la ligera desaceleraci¨®n de las importaciones de maquinaria en mayo. Seg¨²n los datos de Aduanas, aumentaron en mayo un 24,3%, con respecto al mismo per¨ªodo de 1981, lo que rebaja el acumulado al 30,7%.