Garrigues / Oscar
Soy el primero en lamentar las puertas respectivas que se, han pegado Garrigues, en uced¨¦, y Oscar Alzaga, en AP (no acudiendo a la presentaci¨®n del programa por Fraga). Estas alianzas no me parec¨ªan contra natura, ni mucho menos, sino que quiz¨¢ han pecado de lo contrario. Se lo dice Mercedes Sampietro a Valverde, su amante, en Hablamos esta noche (gracias por las flores, Pilar).
-Ninguna mujer sensata ir¨ªa a Italia acompa?ada. Italia es la patria de los latin-lover. Ning¨²n comerciante sensato llevar¨ªa hierro a Bilbao ni bacalao a Escocia. Ning¨²n pol¨ªtico imaginativo debe llevarle a la derecha m¨¢s derecha ni a Fraga m¨¢s fraguismo, pues que Fraga no es tonto, claro, y sabe que esta clase de donantes vienen m¨¢s a llevarse que a traer. Antes o despu¨¦s de las diferencias y ambiciones personales de los dos pol¨ªticos amateur que se han pegado puerta simult¨¢nea en los grandes partidos de derecha, lo que yo veo aqu¨ª (y me parece grave) es un agotamiento de la capacidad creadora de la burgues¨ªa de derechas, que ha tenido dos siglos de marcha e invento. Ni a Fraga ni a Lavilla les interesaban, en el fondo, sus espont¨¢neos secuaces, salvo a efectos estad¨ªsticos, porque son unos porteadores que han llegado con un paquete pol¨ªtico vac¨ªo. Fraga, incluso, que, como es natural, sabe m¨¢s que nadie del fraguismo, ha recibido con reparos, reticencias y renuencias a Alvarez / Alvarez y Ricardo de la Cierva. Fraga no quiere ser una fonda para tr¨¢nsfugas de s¨ª mismos. Dicen las gacetillas de la Prensa del coraz¨®n electoral que la solicitud de Emilio Romero ni siquiera la ha tramitado.
Encuentro a Paco Ord¨®?ez en el espect¨¢culo / Stravinski del Espa?ol y pienso que si Paco, pese al rechazo natural de todo organismo vivo ante un cuerpo extra?o, ha conseguido incrustarse en el PSOE, es porque trae algo en el portafolios revent¨®n: las leyes Hacienda/ Divorcio, que est¨¢n funcionando, aunque muy deterioradas por el Gobierno. La derecha, desde que lo dijo Ortega, ha vivido de creencias, pero ahora necesita ideas, ideas que puedan pasar por creencias, o a la viceversa (hay columnistas que ya escriben "cuarenta?ismo", desde que yo neologic¨¦ as¨ª los 40 / 40). El agotamiento ideol¨®gico de la derecha, la decadencia del Occidente del dinero, el crep¨²sculo de las ideolog¨ªas, crep¨²sculo por el que se pasean de bracete Spengler / Fern¨¢ndez de la Mora, a m¨ª me inquieta, pues que la derecha conserva todos sus poderes terrestres (Anthony Burguess) -y celestes (Felipe quiere nacionalizar la electricidad, socializar el rayo), mientras que ha perdido la articulaci¨®n de ideas o creencias que le permita justificar ese monopolio de lo c¨®smico, como es el agua o la electricidad. Para ser los administradores de las fuerzas naturales hay que ostentar una ideolog¨ªa sobrenatural, y ni a Oscar Alzaga (cruce Sartre sin n¨¢usea / Pato Donald) ni a Antonio G / W (como un Hegel con camiseta liberal) se les puede exigir una Fenomenolog¨ªa del Esp¨ªritu que carismatice el Imperio Austroh¨²ngaro, como Goethe carismatiza el Imperio de Napole¨®n. La grave contradicci¨®n planetaria es que la derecha, que sigue siendo due?a del poder y la fuerza, ha perdido el sistema teol¨®gico que la justifique. La izquierda, que cuenta con unas ideolog¨ªas actuales y actuantes, y con cierta capacidad de invenci¨®n / renovaci¨®n, no tiene ni poder ni fuerza. Aqu¨ª y ahora, Garrigues / Oscar no tienen ninguna idea nueva que vender a la derecha, salvo un taxi lleno de amiguetes. Los taxis de Par¨ªs ganaron la batalla del Marne, pero eso fue cuando el siglo a¨²n era bonito. Dec¨ªa el citado Goethe: "Si tienes un monstruo, escr¨ªbele". Fraga, hoy, no tiene quien le escriba.
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