El pr¨ªncipe Felipe felicit¨® en Asturias a quienes ensalzan los valores de la cultura y la educaci¨®n

En su segundo discurso en Asturias, el pr¨ªncipe Felipe interrumpi¨® durante varios segundos sus palabras, ante las dudas que le planteaba el texto al que daba lectura, que hab¨ªa sido ligeramente modificado, minutos antes. El pr¨ªncipe, que felicit¨® a quienes "ensalzan los valores de la cultura y la educaci¨®n" resolvi¨® con aplomo y serenidad la engorrosa situaci¨®n imprevista y su gesto de naturalidad fue premiado por los aplausos de] p¨²blico que llenaba ayer el teatro Campoamor. Un hombre de ciencia como Severo Ochoa, pero tambi¨¦n un inventor de ficciones como Gonzalo Torrente Ballester, coincidieron en apostar decididamente por la necesidad de dedicar una mayor atenci¨®n a la investigaci¨®n cient¨ªfica y t¨¦cnica en Espa?a.

El Gobierno auton¨®mico de Asturias, integrado por socialistas y un comunista, y presidido por Rafael Fern¨¢ndez, que se define como un viejo republicano", public¨® ayer en las contraportadas de la prensa asturiana un anuncio de pago con el t¨ªtulo "Asturias con su rey".El pr¨ªncipe Felipe expres¨® su confianza en que "en la cultura y en la educaci¨®n est¨¢ el secreto de que las relaciones entre los espa?oles conduzcan al progreso y a la paz que de coraz¨®n deseo para Asturias y para Espa?a". Acompa?ado de sus padres, los reyes Juan Carlos y Sof¨ªa, el pr¨ªncipe pronunci¨® un breve discurso en el acto de entrega de los premios de la Fundaci¨®n del Principado correspondientes a 1982.

"De nuevo", dijo el pr¨ªncipe, "tengo la satisfacci¨®n de felicitar a quienes han conseguido los premios que llevan mi nombre y que concede la Fundaci¨®n del Principado de Asturias". A continuaci¨®n felicit¨® a los galardonados y a la Fundaci¨®n, "cuyas actividades", agreg¨®, "honran a esta querida regi¨®n y ensalzan los valores de la educaci¨®n y la cultura". En este acto, el escritor Gonzalo Torrente defendi¨® la introducci¨®n de la imaginaci¨®n en la escuela como ant¨ªdoto de la frase unamuniana "que inventen ellos", Severo Ochoa se mostr¨® partidario de atribuir a la Corona la funci¨®n de garant¨ªa de continuidad que toda pol¨ªtica cient¨ªfica nacional exige, Graciano Garc¨ªa expuso la vocaci¨®n americana de la Fundaci¨®n, y Jos¨¦ Ram¨®n Fern¨¢ndez Cuevas ley¨® las actas de los Premios Pr¨ªncipe de Asturias 1982.

Los premiados este a?o fueron Miguel Delibes y Gonzalo Torrente (letras), Antonio Dom¨ªnguez Ortiz (ciencias sociales), Pablo Serrano (artes), Mario Bunge (comunicaci¨®n y humanidades), Manuel Ballester Boix (investigaci¨®n cient¨ªfica y t¨¦cnica) y Enrique Iglesias (cooperaci¨®n iberoamericana).

En nombre de los premiados intervino Gonzalo Torrente, quien recab¨® de los poderes p¨²blicos un tipo de educaci¨®n m¨¢s imaginativa, no que castre, sino que fertilice y favorezca las facultades creadoras. "Hay que contar a los ni?os" dijo, "cuentos de hadas para que de mayores puedan hacer innecesaria la importaci¨®n de patentes". Abog¨® por una educaci¨®n m¨¢s imaginativa y m¨¢s ambiciosa que la contemplada por ¨¦l en 45 a?os de ense?ante, en los que nunca vio m¨¢s que sistemas de ense?anza destinados a la exaltaci¨®n e instalaci¨®n de lo mediocre, en cuya selecci¨®n las instituciones se han mostrado tan h¨¢biles, al tiempo que dificultaban o imped¨ªan, que dificultan y siguen estorbando, la selecci¨®n de los mejores, empujados a la emigraci¨®n con dolorosa frecuencia.

Gonzalo Torrente se?al¨® que la sociedad espa?ola no ha salido apenas del error contenido en la frase de Unamuno "que inventen ellos", porque persiste en su antigua soberbia, que hoy enmascara impotencia, ego¨ªsmo, pereza ...

A?adi¨® de forma complementaria que los espa?oles, ante las grandes tareas, solemos descargarnos de responsabilidad proponi¨¦ndoselas al Estado, sin damos cuenta de que el Estado tampoco recibe nada gratuitamente. Por tanto, la enorme empresa de promover la ciencia y la t¨¦cnica corresponde a la sociedad en su conjunto, en colaboraci¨®n con el Estado y, a veces, al margen de ¨¦l. Al Estado le compete, sobre todo, favorecer, promover y, en su caso, defender. "Al que aduzca nuestra pobreza, hay que responderle con la estad¨ªstica asombrosa de los gastos in¨²tiles, del despilfarro de la sociedad espa?ola en actos que no crean riqueza ni, por supuesto, dan felicidad; en actos que en todo lo m¨¢s redundan en el fomento de la estupidez colectiva. Con la mitad de lo que la sociedad espa?ola derrocha tendr¨ªamos las bases econ¨®micas suficientes para crear en muy pocas generaciones una ciencia y una t¨¦cnica espa?ola a la altura de los tiempos".

Al final de su discurso, Gonzalo Torrente se refiri¨® al acercamiento de la Monarqu¨ªa a los que piensan "que llevan en sus mentes el futuro", y mirando al Pr¨ªncipe, dijo: "Un d¨ªa, alteza, la antorcha quedar¨¢ en vuestras manos. Deseo ardientemente que sea entonces realidad lo que ahora es s¨®lo sue?o".

El premio Nobel Severo Ochoa, que habl¨® en nombre de los jurados que otorgaron los Premios Pr¨ªncipe de Asturias 1983, destac¨® tambi¨¦n el papel de la iniciativa privada en la promoci¨®n de actividades culturales y cient¨ªficas, aunque los costes exigidos por ellas demandan una participaci¨®n de los Gobiernos, como ya ocurre en los pa¨ªses tecnol¨®gicamente avanzados. Ochoa expuso la necesidad de imprimir la m¨¢xima continuidad posible a la pol¨ªtica cient¨ªfica capaz de eludir los cambios bruscos derivados, a veces, de los cambios de Gobierno en los sistemas democr¨¢ticos. Y sugiri¨® a este respecto que la promoci¨®n de la ciencia en Espa?a podr¨ªa adquirir la deseada estabilidad si se la vinculase a la Corona. Se mostr¨® luego a favor del retomo a Espa?a de un buen n¨²mero de j¨®venes investigadores, y aludi¨® al problema del c¨¢ncer y al descubrimiento de un grupo de bi¨®logos espa?oles al demostrar que genes procedentes de c¨¦lulas cancerosas humanas pueden provocar el desarrollo de un c¨¢ncer en c¨¦lulas sanas, circunstancia que abre un amplio cauce al estudio de la naturaleza de esta enfermedad. El premio Nobel asturiano se dirigi¨® a los Reyes para decirles que est¨¢ seguro de que bajo su alto patronazgo, "y en un ambiente de libertad, seremos testigos de un creciente aumento de cultivo de las artes, la literatura y la ciencia en nuestro pa¨ªs, las actividades que verdaderamente engrandecen y son tan importantes para el bienestar espiritual y f¨ªsico de los pueblos".

Graciano Garc¨ªa, director de la Fundaci¨®n del Principado de Asturias, afirm¨® que esta instituci¨®n privada busca la luz en la Corona, tiene sus ra¨ªces en Asturias, pero su horizonte es Espa?a, y con Espa?a, Am¨¦rica. "La Fundaci¨®n del Principado de Asturias", a?adi¨®, "ha arrimado el hombro a esta magna empresa que tiene ante s¨ª la Espa?a democr¨¢tica al crear los Premios Pr¨ªncipe de Asturias, s¨ªmbolos de la vinculaci¨®n entre el heredero de la Corona y el Principado de Asturias".