Carmen Rigalt
Ayer, mientras vot¨¢bamos los premios Olympia de periodismo sobre los pasados Mundiales, Ros¨®n y Alvarez de Miranda criticaban con dureza a ciertos sectores de la Prensa. Como la cosa fue en la comarca del Henares, no s¨¦ muy bien qu¨¦ sectores criticaron, pero de las informaciones se deduce que la cr¨ªtica fue global. Yo quer¨ªa darle el primer premio de reportaje deportivo a Carmen Rigalt, porque lo suyo eran once magistrales retratos humanos de la selecci¨®n nacional. Y uno, en lo suyo, en la glosa pol¨ªtica, a veces ha tratado de hacer lo mismo, de humanizar la pol¨ªtica y al pol¨ªtico. Para bien y para mal. Pero esto parece que no les gusta (generalizando: naturalmente no se refieren a m¨ª) a Ros¨®n y Alvarez de Miranda. Carmen Rigalt sali¨® con el segundo premio. En el jurado, Pedro Escart¨ªn, L¨®pez-Sancho, Antonio Valencia, Boby Deglan¨¦, Joaqu¨ªn Prat, Reoyo y m¨¢s gente. Desde que hay tantas mujeres en el periodismo, el periodismo se ha rehumanizado, digamos. Rosa Mateo entrevistando a la esposa de Carrillo o Rosa Montero entrevistando a Ruiz-Mateos/ Rumasa, podr¨ªan ser todo un ejemplo de c¨®mo la mujer observa, entre ir¨®nica y agresiva, este mundo macho que hemos hecho los hombres, con ese golpista/terrorista/arbitrista que todos llevamos dentro. Ros¨®n, que tan firme imagen ha conseguido en su Ministerio, ha dicho en la comarca del Henares:-Uno de los errores evidentes de la actual Constituci¨®n es no haber desarrollado una ley que limite la capacidad de expresi¨®n.
A m¨ª me parece que la Prensa -y me incluyo- no ha dejado de reconocer y proclamar al nuevo Ros¨®n, al que una se?ora de provincias ha llamado "el jefe de los guardias", vi¨¦ndole pegar carteles electorales, y que sin duda ha manejado muy bien sus guardias para devolver el orden a la calle. Limitar la capacidad de expresi¨®n no es bueno, ni por la izquierda ni por la derecha, salvo cuando los periodistas, o lo que sean, van directamente contra la capacidad de expresi¨®n de los dem¨¢s. Y sigue Ros¨®n:
-La Prensa se ha convertido en un superpoder que est¨¢ estableciendo unas reglas de juego desde posiciones personales. Yo pienso que en muchas ocasiones los medios de comunicaci¨®n no son solventes.
Ros¨®n sabe que s¨®lo con admiraci¨®n y estima personal puedo recordarle la frase/l¨ªmite que de sobra conoce: "Mejor peri¨®dicos sin democracia que democracia sin peri¨®dicos". Peri¨®dicos libres, se entiende. A?ade Ros¨®n que los medios de comunicaci¨®n est¨¢n interfiriendo los procesos pol¨ªticos, potenciando a su antojo una opci¨®n u otra.
"En la Prensa hay un exceso de ideolog¨ªa sobre profesionalidad". Pero ocurre que los procesos pol¨ªticos son sociales, que la Prensa expresa a la sociedad, a las distintas ¨¢reas ideol¨®gicas, que en otro caso ser¨ªan mudas (y esto lo reconoc¨¦is vosotros en la misma jornada, recordando que la Prensa fue herramienta fundamental de la transici¨®n, si no estoy mal informado de vuestros pasos). Ocurre, asimismo, que los peri¨®dicos potencian, muy tibiamente, por otra parte, "una opci¨®n u otra", pero no a su antojo, sino porque las rotativas, naturalmente, tambi¨¦n tienen ideolog¨ªa y piensan por su cuenta, y las ideolog¨ªas las hacen funcionar m¨¢s que la electr¨®nica.
No puede haber en la Prensa, contra lo que dice Ros¨®n, "un exceso de ideolog¨ªa sobre profesionalidad", porque la profesionalidad period¨ªstica consiste en explicar y propagar a diario las ideolog¨ªas. Nuestro ministro/dem¨®crata duro ha probado que sabe cazar antidem¨®cratas. Ser¨ªa demasiado f¨¢cil para ¨¦l cazar periodistas, o sea, poderes inermes y locuaces. Por ejemplo, Carmen Rigalt.
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