El barro impidi¨® que muchos valencianos acudiesen a las urnas en las zonas afectadas por la inundaci¨®n

En la comarca de la Ribera Alta, la situaci¨®n en que se celebraron los comicios de ayer era ca¨®tica. De las dos grandes poblaciones de esta zona que resultaron m¨¢s da?adas por las inundaciones, Alcira y Carcagente, la segunda registraba a simple vista los ¨ªndices de participaci¨®n m¨¢s bajos. Muchos colegios electorales se constituyeron tarde. En algunos hab¨ªa dos palmos de barro en el suelo cuando se deber¨ªa haber empezado a votar, y en otros, una pala excavadora tuvo que entrar para amontonar los objetos inservibles que imped¨ªan, por razones de espacio, que se constituyese la mesa. En la localidad de Alcira, una gran parte de los colegios electorales no ten¨ªan cabina y hubo que habilitar habitaciones para este fin.

El recuento de votos, en medio de un paisaje urbano que parec¨ªa extra¨ªdo de una pel¨ªcula de guerra despu¨¦s de un bombardeo -el Ej¨¦rcito continuaba trabajosamente la limpieza sobre un inmenso barrizal-, hubo de realizarse en muchos colegios, por la falta de fluido el¨¦ctrico, a la luz de velas o l¨¢mparas de gas butano, que desde la ma?ana eran buscadas por los respectivos ayuntamientos. En el pueblecito de Benimuslem, pr¨®ximo a Alcira, al mediod¨ªa no hab¨ªan comenzado las votaciones."Hoy, votar aqu¨ª es una barbaridad", dec¨ªa el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Carcagente, Arcadi Espa?a, del PSOE. "Hemos venido insistiendo en que se aplazaran las elecciones. Creemos que, sea cual sea el resultado, no puede ser tomado en cuenta. Anoche el Ej¨¦rcito tuvo que romper las puertas de algunos locales para que pudiesen ser habilitados como colegios, y el alcalde, con un grupo de voluntarios, ha estado repartiendo urnas y cabinas. A primera hora de la ma?ana faltaban, a pesar de todo, papeletas en muchos colegios; ahora parece que la situaci¨®n se ha empezado a normalizar". En ese momento eran las 13.30 horas.

La riada se llev¨® los DNI

Junto a las dificultades que proporcionaba el que, una semana despu¨¦s de las inundaciones, el barro llegue a tener veinticinco cent¨ªmetros de altura en las calles, y el que muchos votantes, por haber sido evacuados o por residir fuera, tengan que trasladarse en condiciones precarias, se a?ad¨ªa una nueva: a algunos, la riada se les hab¨ªa llevado el documento nacional de identidad. "Han venido muchos a pedirnos un certificado de que est¨¢n en el censo", dec¨ªa Arcadi Espa?a, "pero hemos decidido no extender ninguno, porque ser¨ªan f¨¢cilmente utilizables por otras personas.

El primer teniente de alcalde de Carcagente se?alaba, adem¨¢s, que su partido decidi¨® prescindir de los interventores porque estaban dedicados a distribuir comida entre la poblaci¨®n, tarea que consideraban prioritaria. En muchos lugares no se hab¨ªa presentado ni el presidente ni los otros componentes de la mesa, por lo que se procedi¨®, en aplicaci¨®n de la ley, a escoger para este fin a, los primeros ciudadanos que pasaban por la calle si pertenec¨ªan al distrito. El alcalde de Alcira, Francisco Blasco, tambi¨¦n del PSOE, hab¨ªa solicitado la noche anterior por la radio a los ciudadanos que votasen.

Esa zona ha sido siempre de las que han arrojado unos mayores ¨ªndices de participaci¨®n en los com¨ªcios y de m¨¢s alto porcentaje para la izquierda. Alcira, con 38.000 habitantes, tiene un, censo aproximado de 20.000; Carcagente, con una poblaci¨®n de unos 23.000 ciudadanos, cuenta con 16.000 votantes aproximadamente. En Alcira vot¨® al PSOE en las ¨²ltimas generales un 58% y en Carcagente un 46%.

El Ayuntamiento de Alcira puso ayer a disposici¨®n de muchos votantes coches enviados por la Diputaci¨®n Provincial para que se desplazasen, ya que su flota estaba inutilizada. A las entradas de esta ciudad y de Carcagente, la Guardia Civil hab¨ªa establecido controles que imped?an la entrada a los que no fuesen a votar. Ambas poblaciones han estado cerradas a los veh¨ªculos particulares por las tareas de limpieza que se est¨¢n llevando a cabo.

En algunos lugares, era impresionante observar los vertederos habilitados por las autoridades, en los que se acumulaban hasta una altura de varios metros montones de objetos de la m¨¢s variada ¨ªndole, desde lavadoras hasta muebles, televisores y carritos de ni?o completamente cubiertos de barro.

Inter¨¦s por votar

En Alcira se respiraba, pese a todo, un cierto ambiente electoral. "Hay que votar para que no ganen los de siempre", dec¨ªa un grupo de j¨®venes a otro, todos ellos provistos de las inevitables botas de agua. En las secciones cuarta y segunda del distrito primero, ya hab¨ªa votado un 10% y un 15%, respectivamente, a las 11.30 horas.

El alcalde de Alcira pudo ir a votar a su distrito, La Barraca de Aguas Viva. Cuando lleg¨® ante la urna, advirti¨® que no llevaba las papeletas y tuvo que ir a cogerlas a una dependencia vecina, donde estaban almacenadas. Con todo, en esta poblaci¨®n se advert¨ªa bastante inter¨¦s por votar en muchos distritos. En el instituto Rey don Jaime hab¨ªa una largu¨ªsima cola formada por ciudadanos que hab¨ªan abandonado las tareas de limpieza de sus casas para poder emitir su voto. "Antes la he visto", dec¨ªa Blasco, "y me he puesto a llorar como un chiquillo".

Salvador Dolz, un joven que se encontraba en esa cola, al ser preguntado por este peri¨®dico sobre el estado en que hab¨ªa quedado su domicilio, dec¨ªa: "Todo se ha ido a hacer pu?etas, pero hay que votar. Si las elecciones hubiesen sido a los dos o tres d¨ªas de la inundaci¨®n, no habr¨ªamos podido, pero ahora es diferente".

A la entrada de Carcagente, el colegio de la secci¨®n tercera del distrito primero estaba ubicado en el local de la asociaci¨®n de vecinos de la zona de Santa B¨¢rbara. Muy cerca de la puerta estaba la cabina montada; a la izquierda, una mesa con papeletas; algo detr¨¢s, la mesa con las urnas, y al fondo, un enorme mont¨®n de muebles y enseres cubiertos de barro que hab¨ªan tenido que ser apartado por una pala excavadora, ya que cuando se abri¨® el colegio era imposible constituir la mesa.