Yilmaz G¨¹ney presenta en Espa?a su cine contra la represi¨®n pol¨ªtica y cultural de la dictadura turca
El director de 'Yol' ha estado en la c¨¢rcel, en su pa¨ªs, por sus ideas y por sus pel¨ªculas
Cuando en el ¨²ltimo Festival de Cannes se present¨® Yol, del turco Yilmaz G¨¹ney, que esta noche presenta su pel¨ªcula en Espa?a, pocos conoc¨ªan su sorprendente trayectoria. Sin embargo, all¨ª estaba presentando su obra, cuando muchos le imaginaban confinado en una c¨¢rcel de su pa¨ªs. Entre los cargos que pesaban sobre ¨¦l figuraba la carta que escribi¨® al festival de Valladolid de 1980, en el que se exhibi¨® su filmograf¨ªa. En dicho texto denunciaba la dictadura fascista que reina en Turqu¨ªa. Su cine se refiere a esa situaci¨®n.
Tiene cuarenta y cinco a?os, el pelo ceniciento y el porte de un gal¨¢n rom¨¢ntico del cine de los a?os cincuenta. No en vano Yilmaz G¨¹ney fue actor antes que guionista, y ayudante antes que director. Hijo de campesinos, su afici¨®n al cine altern¨® con la literatura, la econom¨ªa y el derecho. Escribi¨® en 1961 una novela, La incongruencia de los tres desconocidos, que le vali¨® ya su primera condena por presunta propaganda comunista. Tras dieciocho meses de c¨¢rcel, interpret¨® cerca de medio centenar de pel¨ªculas. La popularidad de sus trabajos y el dinero conseguido con ellos permitieron a G¨¹ney dedicarse exclusivamente a la realizaci¨®n."La base documental de mis pel¨ªculas", dice, "es la propia vida, mi vida y la de quienes conozco. Lo esencial no consiste en buscar temas nuevos, en mostrar lo nunca visto, hacer lo nunca hecho. Se pueden hacer muy bien cosas que ya se han tratado centenares de veces, y encontrar una nueva mirada, una nueva forma de contarlas".
La carrera de Yilmaz G¨¹ney no fue conocida en Europa de forma exhaustiva, pero espor¨¢dicamente comenzaron a llegar noticias de su cine a trav¨¦s de festivales. El reba?o, por ejemplo, llam¨® poderosamente la atenci¨®n de los cin¨¦filos, aunque ello no condicionara su distribuci¨®n comercial. En Espa?a es Yol la primera de sus pel¨ªculas que se presenta, -hoy se estrena en Madrid, en diciembre en Barcelona y en enero en el resto de Espa?a- y ello, naturalmente, gracias al premio del Festival de Cannes de este a?o, en el que G¨¹ney comparti¨® la Palma de Oro con Missing (Desaparecido), de Costa-Gavras (La noche de San Lorenzo, de los Taviani, obtuvo el Premio Especial del Jurado).
"Sufr¨ª varias detenciones m¨¢s. Una, por ayudar a estudiantes que favorec¨ªan la independencia del pueblo turco; otra, por participar en una reyerta en la que muri¨® un juez fascista. Aunque nunca pudieron probar mi culpabilidad en esa muerte, fui condenado a dieciocho a?os de c¨¢rcel. Pero no detuve mi actividad cinematogr¨¢fica: escrib¨ªa guiones, los dibujaba plano a plano, hablaba con los actores y daba instrucciones muy precisas a mis ayudantes, que se encargaban de filmar lo que les indicaba. Su elecci¨®n particular condicionaba la realidad final de cada pel¨ªcula, pero todas ellas nacieron de mis trabajos clandestinos".
Yol es la ¨²ltima de las obras realizadas por G¨¹ney en esas condiciones. Huido de la c¨¢rcel, como alguno de los personajes que retrata en su filme, pudo intervenir en el montaje definitivo y aplicar su visi¨®n personal sobre el conjunto de la pel¨ªcula. M¨¢s tarde se traslad¨® a Cannes, de donde pas¨® a Suiza. "All¨ª vivo ahora, aunque a¨²n no me haya podido acoger al estatuto del refugiado pol¨ªtico". Le pregunto si prepara una nueva pel¨ªcula: "Se est¨¢ filmando' ya". ?Trata sobre Turqu¨ªa? ?C¨®mo puede hacerse desde Europa una pel¨ªcula sobre su pa¨ªs? "Es un secreto", contesta en un tono susurrado, bien contrario a la vehemencia con que se expresaba en Cannes.
"En Yol quise recoger la historia de mis compa?eros de celda. Cuando regresaban los pocos que obten¨ªan permisos para visitar a sus familias, me contaban las incidencias de sus viajes. Sintetic¨¦ los testimonios de once de ellos; m¨¢s tarde, por dificultades de rodaje, tuve que resumirlos en seis, y en el montaje definitivo desapareci¨® otro de ellos. La pel¨ªcula, pues, narra las vivencias de cinco prisioneros. Los dem¨¢s contin¨²an existiendo y pueden ser motivo de nuevas pel¨ªculas, tanto m¨ªas como de otros directores. Son historias que est¨¢n en el ambiente, que pueden ser recogidas por cualquiera. S¨¦, adem¨¢s, que lo ser¨¢n. Una de esas historias es la de un hombre que ocup¨® su semana de libertad en buscar a un hijo desaparecido: de alguna manera, es la historia de Missing, aunque no se desarrolle en Turqu¨ªa. Los pa¨ªses no son muy distintos cuando sufren la misma opresi¨®n".
No es Yol una pel¨ªcula que s¨®lo denuncie la dictadura que reina en Turqu¨ªa. Las aventuras vividas por los cinco presos en libertad provisional posibilitan un documental que descubre la fuerza de viejas tradiciones religiosas, de costumbres arcaicas que impiden la libertad del individuo tanto como las leyes fascistas: "Todos estamos en una c¨¢rcel: usted mismo lo est¨¢ si seguimos dependiendo de una cultura que restringe la libertad del hombre. Tambi¨¦n nosotros conducimos la represi¨®n, sufri¨¦ndola o ejerci¨¦ndola. La diferencia entre los personajes que muestro en la pel¨ªcula y nuestra propia realidad es s¨®lo una cuesti¨®n de grado".
Babelia
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