Comando Rock debuta en la Academia Militar de Zaragoza con m¨²sica de los Rolling

"La paz tambi¨¦n da h¨¦roes, la paz tambi¨¦n da h¨¦roes". Con este estribillo coreado por buena parte del auditorio puesto en pie, culminaba en ¨¦xito el deb¨² de Comando Rock, que interpret¨® m¨²sica de los Rolling y Miguel R¨ªos, entre otras composiciones. Una experiencia ins¨®lita puesta en marcha por el Ej¨¦rcito, ya que no se tiene noticia de que exista otro grupo de rock -incluso fuera de Espa?a- fundado por mandos militares y en el que sus integrantes sean soldados de reemplazo

El sal¨®n de actos de la Academia General de Zaragoza, tan acostumbrado a albergar solemnes actos castrenses, se llen¨® ayer duran te hora y media de 30.000 vatios de ritmo absoluto, luces parpadeantes y hasta efectos de humo coloreados por los focos. El recinto estaba pr¨¢cticamente lleno, salvo las dos primeras filas que figuraban con letreros de reserva a la "comisi¨®n organizadora". Sentado solo en la primera, el padre de la idea el general Toquero, jefe del CRISDE, que hizo entre otros estos comentarios: "No fue f¨¢cil poner esto en marcha, se pudo conseguir gracias al permiso directo del general Ascanio Togores". "Las letras las prepara un equipo de soci¨®logos del CRISDE y Javier Vargas las adapta y les pone m¨²sica". "Creo que va a tener una influencia tremenda", "es necesario enlazar la vieja generaci¨®n con la nueva".Para presentar el acto se llev¨® a Coralin, la locutora m¨¢s marchosa de la FM zaragozana, que no recibi¨® otra indicaci¨®n que hacerlo a su estilo. "El rock es el medio de comunicaci¨®n total y enrolla much¨ªsimo a la gente joven", dec¨ªa ella, menuda y con minifalda, rodeada de uniformes. El grupo con buen sonido y con todo el ceremonial del rock. Recuerda mucho a la m¨²sica de Miguel R¨ªos y no por casualidad. Su director, el soldado Javier Vargas, ha sido miembro de su equipo y autor de varias de sus canciones.

En el patio de butacas, un auditorio escogido. No eran los futuros destinatarios de Comando Rock -los j¨®venes que cumplen el servicio militar- sino los caballeros alf¨¦reces y cadetes que hoy juran bandera, sus novias y sus hermanas. En el palco de arriba, los invitados: se?oras con abrigo de piel -algunas segu¨ªan el ritmo con la mano- y veteranos oficiales.

La actuaci¨®n comenz¨® con disciplinados aplausos al t¨¦rmino de cada actuaci¨®n, un tanto m¨¢s encendidos en las canciones de tem¨¢tica militar pero poco a poco el ambiente se calde¨® y en el Under My Thumbs de los Rolling Stones se hizo ya imparable. La mitad de los espectadores aproximadamente permanecieron todo el tiempo sobrios en sus asientos, con ligeros ladeos de cabeza al comp¨¢s de la m¨²sica, pero la otra mitad se levant¨®, bail¨®, toc¨® palmas al son y aplaudi¨® a rabiar. Temas de Miguel R¨ªos que hablaban de libertad, canciones inspiradas en la milicia, con el mensaje constante de la paz, el Brown sugar, el Olvido de los muertos o El ganster local y la rubia platino hicieron que los j¨®venes caballeros cadetes -y m¨¢s de un oficial- vibraran con la m¨²sica.