La renuncia de Vitor Crespo a formar Gobierno coloca al borde de la ruptura a la coalici¨®n Alianza Democr¨¢tica

La renuncia del socialdem¨®crata Vitor Crespo a formar Gobierno parece ser el fracaso del ¨²ltimo intento de resolver La crisis pol¨ªtica sin recurrir a la convocatoria de elecciones generales y coloca al borde de la ruptura a la coalici¨®n de centro-derecha Alianza Democr¨¢tica, que ha gobernado Portugal desde 1980. En la recta final de la formaci¨®n del cuarto Gobierno de Alianza Democr¨¢tica, dentro del plazo establecido por el presidente Ramalho Eanes para la soluci¨®n de la crisis gubernamental, Vitor Crespo se enkent¨® con nuevas diferencias surgidas entre los dos principales componentes de la coalici¨®n gubernamental, el Centro Democr¨¢tico Social (CDS) y el Partido Social Dem¨®crata (PSD).

Este ¨²ltimo quiere que los democristianos presenten una nueva lista de candidatos para ocupar las carteras ministeriales que les corresponden en la formaci¨®n del nuevo Gobierno y critica la decisi¨®n del CDS de no hacerse cargo de la vicepresidencia como un gesto que "no refleja un empe?o serio de ese partido" por la continuidad de Alianza Democr¨¢tica.El indicio m¨¢s espectacular de la crisis surgi¨® el mi¨¦rcoles, cuando quedaron en evidencia las dificultades del CDS, desgarrado por una crisis interna provocada por la dimisi¨®n de su presidente, Freitas do Amaral, para designar sus representantes en el Gabinete en formaci¨®n. Los ¨²nicos democristianos dispuestos a colaborar incondicionalmente con el primer ministro escogido por Pinto Balsemao para sucederle eran Luis Barbosa y Bayion Horta, respectivamente ministros de Asuntos Sociales y de Industria del Gobierno dimisionario.

Otras eventuales colaboraciones eran vetadas por la direcci¨®n de los democristianos, y otros nombres citados, de personalidades ligadas a la derecha radical del CDS, o eran inaceptables para el PSD o planteaban exigencias acerca de la estructura del Gobierno o de los ministerios atribuibles, tambi¨¦n inaceptables por el partido mayoritario de la coalici¨®n, el Partido Socialdem¨®crata.

Despu¨¦s de un ultim¨¢tum de Balsemao al CDS -d¨¢ndole un plazo de veinticuatro horas para decidirse-, de una agitada reuni¨®n de la direcci¨®n del PSD, en la que algunos socialdem¨®cratas defendieron la necesidad de una ruptura inmediata de las negociaciones, y de una dram¨¢tica sesi¨®n de la comisi¨®n directiva del CDS, terminada en la madrugada de ayer, la situaci¨®n no mejor¨® sensiblemente.

Cinco d¨ªas despu¨¦s de la presentaci¨®n por el PSD a sus aliados de la lista completa de sus once representantes en el futuro elenco ministerial, la respuesta del CDS se limitaba a una lista incompleta, comunicada a Vitor Crespo y cuya composici¨®n fue considerada por el secretario general del PSI) como la expresi¨®n de una falta de empe?o de los democristianos para solucionar la situaci¨®n.

Anticip¨¢ndose al juicio del presidente Eanes, el PSD acusaba al CDS de impedir la formaci¨®n del Gobierno fuerte y estable, exigido por el jefe del Estado para alejar la perspectiva (le elecciones generales anticipadas. Pero el ¨²ltimo plazo concedido, hasta las seis de la tarde de ayer, finaliz¨® con la impresi¨®n generalizada de que la ruptura de Alianza Democr¨¢tica es irreversible.

En el palacio de Belem, el presidente Eanes, a quien cabe, seg¨²n la expresi¨®n de los socialistas, la responsabilidad de "firmar el certificado oficial de fallecimiento de Alianza Democr¨¢tica", espera las ¨²ltimas decisiones del PSD y del CDS para fijar su decisi¨®n.

El general-presidente se resiste a una disoluci¨®n simple e inmediata del Parlamento y sigue considerando que el medio m¨¢s adecuado para alcanzar las elecciones anticipadas, si tal es el deseo mayoritario de los partidos, es la solicitud formal de disoluci¨®n votada por la mayor¨ªa de los diputados.

Otra alternativa de muy dudosa viabilidad ser¨ªa que el actual Gobierno acepte mantenerse en funciones por un plazo limitado y predeterminado.