Jordi Pujol

Pienso en la responsabilidad que entra?a el privilegio de disponer de un medio de opini¨®n que ofrece mayores posibilidades de audiencia, a¨²n para la injuria, que las que est¨¢n al alcance de hombre p¨²blicos avalados por centenares de miles de votos, pero tambi¨¦n pienso en que hay que confiar en la din¨¢mica decantadora del propio ejercicio de la libertad, y que no hay que atender a rumores maliciosos e imprecisos. Sin embargo no quiero callar ante el art¨ªculo de Umbral dedicado al President de la Generalitat. Adem¨¢s de otros argumentos que se han barajado ya en diversas r¨¦plicas (Pujol fue elegido, no nombrado, y es el presidente de todos los catalanes, incluidos quienes no le votamos; otras frases de Umbral me parecen insultantes ... ), quiero subrayar que es del peor gusto la referencia a "las rentas carcelarias" que el ahora presidente obtuvo en tiempos de Franco "por catal¨¢n cat¨®lico y subversivo". En aquellos momentos aqu¨ª s¨®lo hab¨ªa dos frentes: el de los defensores de la democracia y de Catalu?a, y el de sus enemigos. Y entonces un sinfin de iniciativas para la defensa de nuestra dignidad catalana -una escueia, una editorial, una revista para j¨®venes, una cooperativa de viviendas para barraquistas...encontraron apoyo en aquel catal¨¢n, cat¨®lico y subversivo.En cuanto a ¨¦sto de las rentas, habr¨ªa mucho que hablar. Quienes conocemos un poco la historia reciente estamos en buenas condiciones para calibrar la densidad de ciertos silencios, se?or Umbral, y para asombramos de ciertas agresividades de extra?a raiz. La verg¨¹enza ajena de ello es lo que me ha movido a terciar en este tema, al margen de cualquier partidismo. /