Un grupo de intelectuales reivindica el car¨¢cter europe¨ªsta de Madariaga

La obra y la personalidad de Salvador de Madariaga fue reivindicada por un grupo de intelectuales en una tertulia en homenaje al pol¨ªtico y escritor espa?ol que se celebr¨® el pasado martes, d¨ªa 18, en el Centro de Difusi¨®n de los Derechos del Hombre de la Cruz Roja de Madrid. Justino de Azc¨¢rate, Fernando Chueca Goitia, Eduardo Garc¨ªa de Enterr¨ªa, Jos¨¦ Prat, Alonso Zamora Vicente, Jos¨¦ Mar¨ªa de Areilza y el profesor Gonz¨¢lez M¨¢s recordaron a Madariaga como un gran historiador, liberal completo, espa?ol protot¨ªpico, escritor magn¨ªfico y gran europe¨ªsta.

Entre los asistentes a este homenaje figuraban Pilar de Madariaga, hermana del pensador espa?ol; Javier Solana, sobrino nieto del mismo y actual ministro de Cultura; Pedro Sainz Rodr¨ªguez, Francisco Yndurain, Enrique de la Mata Gorostizaga y la viuda de Nicol¨¢s Franco. El profesor Gonz¨¢lez M¨¢s, que traz¨® antes de comenzar la tertulia una biograf¨ªa del escritor, contextualizada con otros hechos de su tiempo, ley¨® una carta de la viuda de Salvador de Madariaga, Emilia de Madariaga, en la que expresaba su emoci¨®n por este homenaje.Justino de Azc¨¢rate record¨® algunos de los momentos vividos con ¨¦l en Par¨ªs, Latinoam¨¦rica y Ginebra. "En todos ellos quedaba la huella de su cabeza viva, activa y creativa". En relaci¨®n con los ¨²ltimos tiempos del escritor espa?ol, Justino de Azc¨¢rate dijo que si algunos espa?oles consideraron muy d¨¦bil su posici¨®n frente al franquismo fue porque Madariaga no ced¨ªa a las exaltaciones.

Para el arquitecto Fernando Chueca Goitia, Madariaga, nacido en La Coru?a el 23 de junio de 1886 y fallecido en Suiza el 14 de diciembre de 1978, fue uno de los grandes liberales que han ganado el esp¨ªritu de la Europa contempor¨¢nea.

El profesor constitucionalista Eduardo Garc¨ªa de Enterr¨ªa, que comparti¨® su amistad en los ¨²ltimos doce a?os de la vida del historiador, dijo de ¨¦l que era un cosmopolita pero no as¨¦ptico. "Fue falso lo que se dijo de ¨¦l que era un ingl¨¦s con acento espa?ol. Por el contrario, era un protot¨ªpico espa?ol en sus modos, juicios, pasiones y defectos".

El senador socialista Jos¨¦ Prat expres¨®, por su parte, su inicial admiraci¨®n plat¨®nica por lo que signific¨® Madariaga "un espa?ol ligado a la generaci¨®n del 98". Jos¨¦ Prat defendi¨® tambi¨¦n el europeismo y americanismo de Salvador de Madariaga y confes¨® que continuaba siendo un gran admirador "de este magn¨ªfico y variad¨ªsimo escritor".

El secretario de la Real Academia, Alonso Zamora Vicente, inici¨® sus recuerdos en los a?os treinta, cuando Zamora Vicente comenzaba a estudiar en la universidad de Madrid y los termin¨® con un comentario sobre el d¨ªa en que Madariaga tom¨® posesi¨®n de su esca?o en la Real Academia, hecho que se produjo el d¨ªa 2 de mayo de 1976. Madariaga fue nombrado acad¨¦mico en mayo de 1936 y su sill¨®n permaneci¨® sin ocupar durante el franquismo, como el de otros muchos escritores exiliados, a pesar de que hubo una ley para que se cubrieran estas plazas.

Por ¨²ltimo Jos¨¦ Mar¨ªa de Areilza, presidente de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, dijo que Madariaga era uno de los padres fundadores de la Europa actual pero que siempre se mantuvo como un espa?ol cabal "porque todo espa?ol cabal es europeo".