Abuso period¨ªstico

A prop¨®sito de la muerte del terrorista Mart¨ªn Luna, en enfrentamiento armado con funcionarios del Cuerpo Superior de Polic¨ªa, han vuelto a reemerger las famosas y pintorescas lucubraciones period¨ªsticas acerca del misterioso trasfondo de los GRAPO.Cada cu¨¢l es muy due?o de creer o dejar de creer lo que le venga en gana y de hacer las interpretaciones que guste, aunque rocen lo delirante. Pero ya es menos de recibo que el editorialista de un diario madrile?o, aunque no lo exprese clara y directamente, venga a decir -o insinuar- que el citado suceso luctuoso constituye un abuso policial; ello despu¨¦s de dar a entender su contrariedad por que el nuevo ministro del Interior hubiera formulado el d¨ªa antes unas declaraciones que calificaban de correcta, meritoria y ejemplar la actuaci¨®n policial.

Por favor, seamos serios y coherentes. La muerte de un ser humano es siempre un suceso tr¨¢gico, penoso. Pero cuando unos funcionarios, en cumplimiento de su deber de detener a un delincuente, responden con fuego -en el ejercicio de su leg¨ªtima defensa- al fuego contra ellos dirigido, no merecen una referencia period¨ªstica como la que queda comentada. Y menos desde un ¨®rgano de Prensa que, a la menor inflexi¨®n hacia abajo en la curva de efectividad policial contra el terrorismo, se apresura a tildar de ineficaz, si no de torpe, a la polic¨ªa.

enero de 1983