Los 75 a?os de Rafael Lapesa

Hoy, 8 de febrero, cumple 75 a?os un profesor que por su ¨¢nimo liberal y su capacidad t¨¦cnica constituye una honra para todos sus compa?eros de profesi¨®n filol¨®gica.Lapesa es uno de los ¨²ltimos disc¨ªpulos directos de Men¨¦ndez Pidal, pues en los nueve cursos que van del oto?o de 1927 a los inicios de la guerra civil trabaj¨® inmediatamente con ¨¦l en la secci¨®n de filolog¨ªa del Centro de Estudios Hist¨®ricos, instituci¨®n -seg¨²n es sabido- insuperada luego en la historia de los estudios ling¨¹¨ªsticos y literarios espa?oles y que probablemente tardar¨¢ bastante en ser igualada.

Los a?os del centro los dedic¨® Lapesa a trabajos dialectales y l¨¦xicos, preparando en particular un Glosario del espa?ol primitivo concebido expl¨ªcitamente como volumen segundo de los Or¨ªgenes de don Ram¨®n y que est¨¢ falto s¨®lo de un ¨²ltimo repaso para ser publicado; adem¨¢s escribi¨® entonces un estudio de an¨¢lisis literario y de lengua art¨ªstica sobre el padre Pedro de Ribadeneyra, en la l¨ªnea ya de varios otros -preciosos- que luego ha hecho a lo largo de su vida y que ahora est¨¢n recogidos en dos vol¨²menes paralelos: De la Edad Media a nuestros d¨ªas (1967) y Poetas y prosistas de ayer y de hoy (1977).

S¨®lo la misma ceguera intelectual y moral que pretende aminorar en comentarios de pasillo la obra de Men¨¦ndez Pidal puede explicar que en res¨²menes anuales y panoramas parezcan desconocerse a veces estos estudios de Rafael Lapesa, o se ignore que D¨¢maso Alonso viene publicando desde hace a?os unos tomos de Obras completas llenos de saber y de belleza.

Los cursos del Centro de Estudios Hist¨®ricos hicieron que nuestro autor fuese capaz, al poco de cumplir sus 34 a?os, de cerrar una primera etapa de actividad acad¨¦mica escribiendo ya la versi¨®n inicial de su Historia de la lengua espa?ola (1942); luego, en sus cuarenta a?os, dio a luz tres monograf¨ªas fundamentales: Asturiano y provenzal en el fuero de Avil¨¦s, La trayectoria po¨¦tica de Garcilaso y La obra literaria del marqu¨¦s de Santillana.

Definitiva madurez

Una tercera etapa o momento en la labor escrita alcanza con posterioridad Lapesa, y es ya la de su definitiva madurez: desde entonces hasta ahora mismo no cesa de publicar principalmente estudios de fonolog¨ªa o de sintaxis hist¨®rica; dif¨ªcilmente alg¨²n profesional de la filolog¨ªa es capaz hoy de sacar un art¨ªculo de la densidad y materiales originales que tiene el que quiz¨¢ es ¨²ltimo trabajo de don Rafael: Unidad y variedad de la lengua espa?ola.

A esta labor escrita incansable Lapesa ha unido una dedicaci¨®n a su c¨¢tedra y a la Academia no menos notorias y ejemplares; tampoco hoy ning¨²n profesional espa?ol es recordado con tan un¨¢nime respeto por sus alumnos como don Rafael. Sus afanes de trabajo siguen intactos -aun en medio de sufrimientos personales que no hacen sino acrecentar ese respeto que se le debe- y para los meses venideros proyecta ultimar para la imprenta el glosario del espa?ol primitivo antes mencionado y el tomo pendiente de la Historia de la pronunciaci¨®n, de Amado Alonso.

Deliberadamente, no queremos hacer m¨¢s extensas estas l¨ªneas, que vamos a terminar con unas palabras que tienen la autoridad intelectual y moral de su autor, D¨¢maso Alonso; Lapesa es "un hombre", dice, "que, dotado de un esp¨ªritu preclaro, se ha entregado a ¨¦l, a la vocaci¨®n que su propio esp¨ªritu le se?alaba, y ha desde?ado todo lo dem¨¢s: comodidades, dinero, popularidad vocinglera, para no hacer traici¨®n a su se?alada meta". "El gran hero¨ªsmo", termina D¨¢maso, "tiene su premio: el prodigio. Prodigio es que exista la obra important¨ªsima publicada por Rafael Lapesa".