La compa?¨ªa alemana BMW renuncia a comprar Jaguar
La compa?¨ªa alemana BMW ha renunciado a comprar la filial Jaguar de la British Leyland, que se ofrece a la venta por unos doscientos millones de libras esterlinas (unos 40.000 millones de pesetas). La venta de la Jaguar forma parte de los planes del Gobierno conservador de Margaret Thatcher de privatizar al menos una parte de la BL antes de las pr¨®ximas elecciones generales.
La industria del autom¨®vil brit¨¢nica ha sido una de las m¨¢s afectadas por la crisis econ¨®mica del pa¨ªs y aunque el pasado mes de enero se recuperaron algo las ventas de coches producidos en el Reino Unido, el porcentaje de coches de importaci¨®n sigue siendo muy alto 56,94%. Esta es una de las razones que ha llevado este fin de semana a los principales sindicatos a promover una campa?a de control de importaciones que afectar¨ªa, fundamentalmente, a veh¨ªculos producidos en Jap¨®n y en Espa?a.La Jaguar produce uno de los coches m¨¢s espectaculares del mercado europeo, en directa competencia con la BMW, y ha logrado este a?o cerrar sin p¨¦rdidas. Sin embargo, y pese a que casi dobl¨® su producci¨®n en 1982, su cifra total de ventas sigue siendo muy baja: 14.677 en 1981, 22.042 en 1982 y 26.000 unidades previstas para este a?o. Una producci¨®n que no tiene por qu¨¦ inquietar a la BMW, quien, tras un detenido estudio, ha preferido dejar pasar la oferta.
Portavoces de la British Leyland aseguraron ayer que la operaci¨®n de privatizaci¨®n de un sector de la compa?¨ªa segu¨ªa adelante y que continuaban los contactos con Honda para producir en 1985, y a trav¨¦s de una nueva empresa de capital conjunto, un modelo de lujo del Austin Rover.
Seg¨²n datos oficiosos, la British Leyland ha costado al Estado desde 1975 unos 2.000 millones de libras esterlinas (400.000 millones de pesetas) y ello pese a la dr¨¢stica reducci¨®n de personal. El anuncio de que la industria del autom¨®vil suprimir¨¢ pr¨®ximamente otros varios cientos de puestos de trabajo ha sido el toque de corneta para los sindicatos brit¨¢nicos, que celebraron el pasado domingo una reuni¨®n de emergencia.
Los sindicatos han creado un comit¨¦ para el control de las importaciones que intentar¨¢ lograr que el Parlamento dicte leyes proteccionistas. Si la campa?a pac¨ªfica no tiene ¨¦xito, los sindicatos est¨¢n dispuestos a pasar a la acci¨®n directa.
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