Dirigentes de Alianza Popular tratan de captar adeptos entre los emigrantes espa?oles en Suiza

Aunque los partidos de izquierda han tenido hasta la fecha una posici¨®n pr¨¢cticamente hegem¨®nica en la emigraci¨®n, a partir de ahora la derecha espa?ola va a desplegar velas a orillas del lago Leman. Hace s¨®lo unos d¨ªas, Luis Castro Valdivia, secretario general de las Nuevas Generaciones de Alianza Popular (AP), visitaba Lausana y Ginebra con objeto de examinar el terreno y comprobar la viabilidad de su proyecto pol¨ªtico m¨¢s all¨¢ de las fronteras. Las cartas personales de Fraga Iribarne a algunos emigrantes y las circulares de Isabel Quijada y Faustino del Pulgar acompa?ando un documento de Guillermo Kirkpatrik sobre "emigraci¨®n y paro" comienzan a dar sus frutos. Algunos de los destinatarios no olvidan el gesto del l¨ªder aliancista y hoy d¨ªa se declaran dispuestos a ensanchar las bases de la leal oposici¨®n constituyendo AP en la emigraci¨®n.El terreno m¨¢s propicio y el mejor abonado es, seg¨²n revela el matutino 24 heures, de Lausana, la segunda generaci¨®n, la juventud, los hijos de nuestros connacionales en Suiza. El rotativo a?ade que la estrategia de AP cuenta con dos elementos importantes a su favor: la implantaci¨®n del partido de Fraga en Galicia, de donde proceden la mayor¨ªa de los emigrantes, y el comportamiento m¨¢s bien conservador de ¨¦stos en la vida de cada d¨ªa.

Iniciativa en la Iglesia

El movimiento asociativo y los partidos de izquierda, sobre todo el PSOE y el PCE, que gozan de una cierta implantaci¨®n en la Confederaci¨®n Helv¨¦tica, observan con escepticismo esta ofensiva aliancista. Tampoco ven con muy buenos los el que la iniciativa haya surgido pr¨¢cticamente en las inmediaciones de la misi¨®n cat¨®lica de Lausana, cuyos sacerdotes orientan espiritualmente a un gran n¨²mero de emigrantes. Y, como la Iglesia y Alianza Popular se oponen a la despenalizaci¨®n del aborto, hay quienes piensan que esta coincidencia puede ir m¨¢s lejos en el plano pol¨ªtico.La organizaci¨®n de AP en Suiza est¨¢ ahora en manos de dos j¨®venes espa?olas, empleadas de comercio, pero sin mayor experiencia organizativa. Esta deficiencia podr¨ªa ser suplida, seg¨²n avanza 24 heures, por alg¨²n especialista de Madrid: "un estudiante-militante" que vendr¨ªa oficialmente para profundizar sus conocimientos lig¨¹¨ªsticos y que aprovechar¨ªa los ratos libres para estructurar el partido.

Otra posibilidad ser¨ªa echar mano de la nobleza surgida de la emigraci¨®n o, en ¨²ltima instancia, servirse de algunos funcionarios internacionales con. gran experiencia como cuadros.