La Copa del Mundo, todo un espect¨¢culo que arrastra m¨²ltiples intereses econ¨®micos

La Copa del Mundo de Esqu¨ª Alpino, adem¨¢s de ser una de las principales competiciones en este deporte, arrastra tras de s¨ª una gran cantidad de intereses econ¨®micos desde que comenz¨® en 1966. Publicidad, derechos de retransmisiones por televisi¨®n, los pools de los equipos y otros han llegado a provocar, indirectamente, que la Federaci¨®n Internacional de Esqu¨ª (FIS) haya cambiado los reglamentos y adoptado o creado modalidades m¨¢s espectaculares (eslalon paralelo y supergigante) con el fin de atraer a las marcas comerciales y al p¨²blico a esta gran competici¨®n.
Al comienzo de los a?os sesenta, el esqu¨ª alpino de competici¨®n contaba cada temporada con un apretado calendario de carreras organizadas por las principales estaciones invernales de Europa. A las ya cl¨¢sicas Lauberhorn, Hahnenkamm y Kandahar, se hab¨ªan sumado otras que, poco a poco, hab¨ªan conseguido ser lugar de cita obligado para la elite del esqu¨ª mundial, como Val D'lsere, y su Crit¨¦rium de las Primeras Nieves, Adelboden, Megeve, Grindelwald, entre otras.Ante este hecho, los periodistas del diario deportivo L'Equipe, Serge Lang y Michel Clare crearon la Challenge L'Equipe, durante la temporada 1965-66, en la que se iban sumando los resultados de las carreras m¨¢s importantes disputadas en Europa. Esta Challenge fue el punto de partida para el nacimiento de la Copa del Mundo de Esqu¨ª Alpino. Durante los Campeonatos del Mundo de 1966, celebrados en Portillo (Chile), estos dos periodistas se reunieron con algunos jefes de equipo, como Bob Beattie, de Estados Unidos (que m¨¢s tarde seria el creador del esqu¨ª profesional y de los eslalones paralelos), Sepp Sulzberger, de Austria, y Jean Beranger, Honor¨¦ Bonnet y Ren¨¦ Sulpice, de Francia. Tambi¨¦n estuvieron presentes los corredores Killy, Perillat y Lacroix, de Francia, y Karl Schrariz, de Austria. Entre todos ellos desarrollaron los puntos b¨¢sicos para poner en marcha la Copa del Mundo, la cual se celebrar¨ªa por primera vez durante la temporada 1966-67. Sus primeros vencedores fueron el franc¨¦s Jean Claude Killy, que obtuvo la m¨¢xima puntuaci¨®n posible en aquellos tiempos: 225 puntos, y la canadiense Nancy Greene, que consigui¨® 176. Ambos recibieron el primer trofeo de la Copa del Mundo, un globo terr¨¢queo de cristal.
El Congreso de la Federaci¨®n Internacional de Esqu¨ª (FIS) celebrado en 1967 en la ciudad de Beirut, dio car¨¢cter oficial a la Copa del Mundo, la cual, a partir de entonces, se celebra todas las temporadas de diciembre a marzo y que ya es conocida con el nombre de Circo Blanco, dados los constantes traslados de una estaci¨®n a otra que deben realizar los equipos, marcas, periodistas y seguidores.
En la actualidad se han cambiado algunas cosas, tales como la puntuaci¨®n (ahora punt¨²an los quince primeros de cada carrera), algunos puntos del reglamento (beneficiando a los polivalentes) e, incluso, las carreras, incorporando al calendario un eslalon paralelo y creando una nueva modalidad: el super-gigante. Con ello tratan de dar mayor espectacularidad a las competiciones y, de paso, atraer de nuevo al p¨²blico a las pistas, atrayendo tambi¨¦n a las firmas comerciales que, poco a poco, han ido separ¨¢ndose de una Copa del Mundo que ha perdido bastante inter¨¦s entre los aficionados.
Fundamento comercial
Porque la Copa del Mundo, adem¨¢s de sus fines deportivos, tambi¨¦n tiene una estructura comercial nada desde?able. Cuando se cre¨® esta competici¨®n se pens¨® que a los fabricantes les interesar¨ªa el hecho de que los corredores iban a ir haciendo publicidad de sus productos por todo el mundo y as¨ª fue. Ahora, por ejemplo, los esqu¨ªs han cambiado radicalmente su aspecto exterior, con grandes letras para indicar la marca y el modelo, la marca en los cantos laterales, e, incluso, las suelas transparentes a trav¨¦s de las cuales se lee la marca, gracias a lo cual esta se ve en las fotograf¨ªas que se hacen a los corredores en acci¨®n. Algo parecido ocurre con los trajes, cuya marca va colocada en los lugares m¨¢s visibles.Tambi¨¦n pensaron los creadores que la Copa del Mundo interesar¨ªa a las estaciones de esqu¨ª dada la publicidad obtenida gracias a la difusi¨®n internacional de su nombre. Sin embargo, ¨²ltimamente las estaciones han perdido parte del inter¨¦s por formar parte del calendario, por lo que la FIS trata de revitalizar esta competici¨®n creando m¨¢s espect¨¢culo.
Normalmente, la Copa del Mundo est¨¢ patrocinada fundamentalmente por una firma comercial, aunque en las carreras se pueda colocar publicidad de otras marcas. Tambi¨¦n se consigue dinero por otros medios: en las grandes carreras, el p¨²blico tiene que pagar por entrar a la zona acotada para tal fin. El esqu¨ª es, para los pueblos de los Alpes, como el f¨²tbol en Espa?a, por ejemplo.
Por este motivo, otra fuente de ingresos la constituyen las retransmisiones por televisi¨®n. Seg¨²n los reglamentos de la FIS sobre este tema, las Federaciones Nacionales tienen el derecho de suscribir los acuerdos sobre transmisiones por televisi¨®n de las competiciones del calendario FIS que organizan en su pa¨ªs, con excepci¨®n de Campeonatos del Mundo y Juegos Ol¨ªmpicos. En Campeonatos del Mundo los derechos de transmisi¨®n se negocian entre la FIS y la Federaci¨®n organizadora.
Igualmente, seg¨²n este mismo reglamento, si en alg¨²n caso los intereses de la FIS se ven involucrados por una retransmisi¨®n m¨¢s all¨¢ de las fronteras del pa¨ªs organizador, ser¨¢ la FIS quien negociar¨¢ directamente con las compa?¨ªas de televisi¨®n interesadas. Tambi¨¦n se perciben beneficios por la publicidad de los dorsales, banderas de jalonamiento y pancartas de salida y llegada.
Los corredores y el dinero
Cada equipo nacional tiene un pool de marcas que son las que equipan a los corredores y, en algunos casos, dan incluso una cierta cantidad de dinero por poder formar parte de ese pool. Esto, l¨®gicamente, s¨®lo ocurre con los equipos importantes. Seg¨²n los reglamentos de la FIS, cualquier compensaci¨®n que un corredor perciba por estos contratos deber¨¢ ser entregada a su Federaci¨®n Nacional. Igualmente, si un corredor est¨¢ empleado por una de las empresas del pool, cualquier ventaja material eventualmente percibida, por el servicio que sea o por un empleo regular, deber¨¢ estar en consonancia con el nivel de los tratamientos, sueldos e indemnizaciones de la profesi¨®n que sea.Seg¨²n estas normas, un corredor, durante los periodos de preparaci¨®n y competici¨®n, s¨®lo puede aceptar la indemnizaci¨®n ¨ªntegra de los viajes, el reembolso ¨ªntegro de la pensi¨®n, dinero para gastos menudos, indemnizaci¨®n por p¨¦rdida de ingresos durante su estancia en el equipo, la protecci¨®n social (seguro de accidentes y enfermedad) y becas. Igualmente, la FIS admite el hecho de que una Federaci¨®n Nacional reserve fondos "para asegurar la educaci¨®n y la carrera futura de un competidor retirado". Esto, por ejemplo, es llevado a cabo por el equipo italiano, donde se les ofrece una cierta cantidad de dinero a los corredores seg¨²n las clasificaciones obtenidas en las carreras. Este dinero se les ingresa en un fondo o "seguro de retiro" y, cuando un corredor abandona la competici¨®n, puede disponer de esa cantidad.
En Espa?a, las marcas que componen el pool s¨®lo aportan material, sin existir ning¨²n tipo de colaboraci¨®n econ¨®mica, por lo que las becas y gastos de los corredores corren a cargo del presupuesto de la Federaci¨®n Espa?ola de Deportes de Invierno (FEDI). Por este motivo, cuando alguna firma comercial quiere entrar a formar parte del pool debe aportar material en una cuant¨ªa igual a la que entregan el resto de las marcas.
Ultimamente, sin embargo, la FIS admit¨ªa un caso especial: la licencia B. Con ella, algunos esquiadores pueden percibir dinero por los contratos con las marcas del pool, pudiendo participar en las pruebas FIS del calendario, pero no en los Juegos Ol¨ªmpicos. En este caso se encuentran en la actualidad el sueco Ingemar Stenmark y Hanni Wenzel, de Liechtenstein. Sin embargo, el Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional (COI) les permitir¨ªa hacerlo en los pr¨®ximos Juegos Ol¨ªmpicos de Invierno de 1984 en Sarajevo (Yugoslavia) si aceptan renunciar a la licencia B y pasan los beneficios de sus contratos a sus Federaciones nacionales respectivas. Por otro lado, la FIS ha decidido no volver a conceder licencias de tipo B.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.