La danza contempor¨¢nea, entre el mimo y el 'ballet' cl¨¢sico
Clausura de las Jornadas de Danza en Valencia
La danza contempor¨¢nea se mueve entre el mimo, la teatralizaci¨®n y el ballet cl¨¢sico. La danza contempor¨¢nea es el resultado de infinidad de propuestas coreogr¨¢ficas que surgieron al romper Isadora Duncan la concepci¨®n unidimensional del ballet cl¨¢sico de "tu-t¨² y zapatillas de puntas". Las Jornadas Internacionales de Danza que concluyeron el pasado domingo en el teatro Principal y sala Escalante, de Valencia, resultaron un testimonio l¨²cido de las diferentes y antag¨®nicas concepciones que concurren en el escenario de la danza.Las coreograf¨ªas m¨¢s innovadoras correspondieron a la teatralizaci¨®n del argentino Oscar Araiz y a la danza buto del grupo japon¨¦s Ariadone, mientras el mismo Araiz, director del Ballet de Ginebra, y las primeras estrellas de varios ballets europeos presentaron la versi¨®n permanente del ballet cl¨¢sico.
Un gesto es danza
El af¨¢n de teatralizar con la danza pertenece a las propuestas con que Oscar Araiz, core¨®grafo de Escenas de familia, ejecutada a partir de la m¨²sica de Poulenc, realiza su trabajo del Ballet de Ginebra, aunque tambi¨¦n reconoce que se mueve en diferentes l¨ªneas y ¨¦sta no representa en exclusiva su tarea coreogr¨¢fica. El abanico de posibilidades que baraja lo mostr¨® con la abstracci¨®n de Adagieto de Gustav Malher y la danza teatral de la pieza anteriormente citada, o su puesta en escena de Tango, arreglos musicales de Atilio Stampone y concepci¨®n esc¨¦nica de Carlos Cytrynowski."En los gestos hay danza, independientemente de lo que significan", expresa Araiz. "Un gesto de la cara, un gesto de la boca ya es danza. Tengo aversi¨®n por la pantomima y, sin embargo, s¨¦ que estoy toc¨¢ndola. Aunque creo que la diferencia est¨¢ clara. El mimo reemplaza a la danza cuando el movimiento del bailar¨ªn podr¨ªa estar reemplazado por una palabra. Reivindico los peque?os movimientos para este arte, porque creo que el simple hecho de que dos personas se acerquen o se alejen ya determina una historia o varias historias seg¨²n qui¨¦n vea el movimiento". El programa del Ballet de Ginebra present¨® dos piezas del gran espect¨¢culo Ib¨¦rica, "un gran sue?o que dedico a la cultura hisp¨¢nica", y versiones extraordinarias de Debussy, Rachinaninov y Stravinski. El cuerpo del ballet lo integran veintis¨¦is j¨®venes, entre ellos primeras figuras que Araiz ha formado en anteriores contratos con otras instituciones.
La novedad de las Jornadas procedi¨® tambi¨¦n del grupo de danza buto Ariadone, de Jap¨®n, que realiz¨® en Valencia su primera y exclusiva actuaci¨®n en Espa?a desde su fundaci¨®n hace siete a?os. El puente tendido entre la cultura oriental y occidental por su creador, el core¨®grafo Ko Murobushi, se llama Zarathoustra. La reinvenci¨®n que el filosofo Nietzsche hizo del hombre contempor¨¢neo acerc¨¢ndolo de nuevo a la divinidad cautiv¨® a Murobushi, quien tras su lectura gest¨® un espect¨¢culo que se remonta al movimiento sorprendente de las c¨¦lulas y de los instintos reprimidos por la cultura.
Parte de presupuestos dif¨ªciles de integrar en una concepci¨®n cl¨¢sica de la danza. Murobushi considera que el hombre ha olvidado el mandato de Dios de andar erguido, porque ya no cree en Dios, y ha vuelto al movimiento de los animales. Las cinco mujeres del grupo luchan siempre contra la gravedad en movimientos de signo contrario, se intentan poner de pie y al mismo se pegan a la tierra.
La aportaci¨®n espa?ola en las Jornadas parti¨® de los grupos catalanes Heura Danza Contempor¨¢nea y el d¨²o Cesc Gelabert y Lydia Azzopardi. La gala de primeras estrellas, espect¨¢culo que cerr¨® la muestra, tuvo una especial relevancia con El P¨¢jaro de Fuego, de Stravinsky, de los bailarines Charles Jude y Ferenz Barbay, y la actuaci¨®n de este con Gislinde Skroblin, de la Opera de Munich.
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