El encargo del 'Guernica'
En el art¨ªculo "Revelaciones sobre el encargo a Picasso para pintar el Guernica", que publica su peri¨®dico el 12 de febrero, comenta Jos¨¦ Aguilar el libro del profesor Fernando Mart¨ªn sobre el tema. Durante tres a?os me he dedicado, por encargo del Gobierno espa?ol, a recuperar el citado cuadro, lo que me ha permitido conocer en la medida de lo posible las circunstancias que rodearon su encargo y ejecuci¨®n.Quisiera por ello precisar los siguientes puntos: la iniciativa de encargar el mural a Picasso parti¨® de Jos¨¦ Renau, director general de Bellas Artes, que me narr¨® personalmente, en Madrid, en junio de 1981, c¨®mo esta propuesta fue inmediatamente aceptada por el Gobierno y financiada por Hacienda, quien se sirvi¨®, por cierto, para lograr divisas, dificiles en tiempo de guerra, de la llamada Caja de Reparaciones del Cuerpo de Carabineros, nutrida por el porcentaje que percib¨ªan estos vigilantes de aduanas por las multas y sanciones en delitos de contrabando. Renau viaj¨® a Par¨ªs para hacer el encargo a Picasso, quien acepto de inmediato a finales de 1936, muchos meses antes de producirse el bombardeo de Guernica en abril de 1937.
Las dimensiones del mural le obligaron, en efecto, a alquilar el estudio de la calle de Grands Augustins, donde los 3,50 metros de altura del bastidor hicieron necesario ponerle inclinado, tal como aparece en las fotografias realizadas entonces por Dora Maar. Dicho estudio no fue comprado por el Gobierno espa?ol para Picasso "como pago indirecto", ya que muchos a?os despu¨¦s, en los sesenta, se vio desahuciado de ¨¦l por sus actuales propietarios. Me consta
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El encargo del 'Guernica'
Viene de la p¨¢gina 11que para evitarlo pidi¨® ayuda a Malraux, ministro de Cultura del general De Gaulle, y que no le perdon¨® su falta de apoyo. Tal fue una de las razones de que no acudiese a par¨ªs, a inaugurar la gran exposici¨®n que le dedic¨® el Gobierno franc¨¦s en 1962.
Por la ejecuci¨®n del Guernica y tras fuerte e inteligente insistencia del agregado cultural de la Embajada de Espa?a en Par¨ªs, Max Aub, Picasso acept¨® 150.000 francos (unos 7.000 d¨®lares en 1937). Este hecho, que pude conocer por mi t¨ªo el pintor Luis Quintanilla, jefe de los servicios de informaci¨®n de la Embajada en Par¨ªs con Araquistain en aquel entonces, me permiti¨® localizar en 1980, con mucha suerte y bastante empe?o, si no el recibo original, desaparecido, pruebas documentales del pago en escritos del embajador Luis Araquistain y el ministro de Estado Alvarez del Vayo. Gracias a ello pude entablar con los herederos y con el Museo de Arte Moderno de Nueva York una larga negociaci¨®n que llev¨® a la entrega del lienzo. A ¨¦l se a?adieron, por expresa voluntad de donaci¨®n de Picasso, encontrada en poder de su abogado Roland Dumas, los 62 estudios que lo acompa?an hoy en el Cas¨®n.
Estas vicisitudes quedaron recogidas y documentadas en mi libro La odisea del "Guernica" (Editorial Planeta, 1981). / C¨®nsul general de Espa?a.
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