El Gobierno, presionado por problemas de recaudaci¨®n fiscal, descarta una baja inminente de los precios de los carburantes

El Gobierno, presionado por problemas de recaudaci¨®n fiscal y ante la necesidad de detener el crecimiento del d¨¦ficit p¨²blico, ha descartado, por el momento, una reducci¨®n inmediata en los precios de los derivados del petr¨®leo, pese a la baja de cinco d¨®lares anunciada por la OPEP en las tarifas del crudo. No obstante, Miguel Boyer, ministro de Econom¨ªa y Hacienda, se?al¨® ayer que "si se confirma la baja del petr¨®leo y cuando tengamos datos de su incidencia promedio en el crudo que compra Espa?a, espero que podamos hacer una reducci¨®n de los precios de los derivados".

La necesidad de recuperar casi 200.000 millones de pesetas en renta de petr¨®leo y fiscalidad perdida a lo largo del a?o y medio en que los precios de los carburantes permanecieron inmovilizados, junto a la tentaci¨®n existente en alg¨²n despacho oficial de compensar gastos inesperados del sector p¨²blico con una mayor presi¨®n fiscal a trav¨¦s de las gasolinas, parecen ser las dos razones m¨¢s importantes que pesan en la mente de los responsables de la pol¨ªtica energ¨¦tica y econ¨®mica relacionada con el petr¨®leo a la hora de resistir las presiones para que se bajen los precios de los carburantes.Aun as¨ª, fuentes del sector del refino, y sobre todo del automovil¨ªstico, consideran urgente una modificaci¨®n a la baja de las tarifas de las gasolinas y otros derivados del petr¨®leo y estiman que ser¨ªa impropio pretender que ambos sectores, ya duramente castigados por la crisis, carguen en solitario con el peso de la financiaci¨®n p¨²blica adicional que necesitan otros sectores, hoy tambi¨¦n fuertemente afectados por la crisis.

Un regalo inesperado

S¨®lo la importante recuperaci¨®n que est¨¢ experimentando el consumo de los derivados del petr¨®leo en los dos primeros meses del a?o' (que algunas estad¨ªsticas estiman en torno al 5%) y la necesidad de mantener una pol¨ªtica energ¨¦tica coherente con la reducci¨®n de la importancia del petr¨®leo, dentro de la estructura energ¨¦tica espa?ola, limitan las exigencias de estos dos sectores a la hora de hacer p¨²blicas sus demandas.No obstante, el inesperado regalo que supone para la econom¨ªa espa?ola la reducci¨®n de los precios mundiales del crudo parece abogar, en un examen de las cifras, por la baja de los carburantes.As¨ª, la baja de cinco d¨®lares en el precio del ar¨¢bigo ligero, junto a las ya anunciadas por M¨¦xico y los productores del mar del Norte, reducir¨¢n en unos tres d¨®lares y medio el precio medio del barril importado por Espa?a, que en 1982 fue del orden de los 32 d¨®lares Ese 12% de ahorro (unos 1.100 millones de d¨®lares, como m¨ªnimo) en la factura de nuestras compras de crudo ha quedado limitado por la depreciaci¨®n de la peseta, que quiz¨¢ se pueda comer hasta la mitad del mencionado ahorro.

Pero, seg¨²n opinan las fuentes del sector consultadas, todav¨ªa existe margen para. la baja de los precios del carburante, sobre todo despu¨¦s de considerar que el ¨²ltimo reajuste -decidido por el ministro de Hacienda y Econom¨ªa, Miguel Boyer, a las pocas horas de tomar posesi¨®n el pasado diciembre- se hizo con el suficiente margen como para recuperar en menos de seis meses la fiscalidad perdida y la renta del petr¨®lo que no se obtuvo en la segunda-mitad de 1981 y en 1982.

Fiscalidad perdida

Estimaciones oficiosas hab¨ªan se?alado que, con una peseta estable con relaci¨®n al d¨®lar y sin variaci¨®n en los precios de los crudos, los 100.000 millones de fiscalidad perdida, m¨¢s otro tanto de renta, se habr¨ªan recuperado antes de primeros de junio.Esto equivale a decir que el Gobierno, manteniendo la presi¨®n fiscal en 1983 a los mismos niveles que en 1982 (unos 220.000 millones de pesetas), tendr¨ªa que modificar a la baja las tarifas en alg¨²n momento. Otras fuentes oficiales, sin embargo, aduc¨ªan que esta modificaci¨®n no se realizar¨ªa, ya que, en previsi¨®n de un descenso de los consumos o ante la posibilidad de un aumento de la fiscalidad, todas las variables ser¨ªan distintas, y habr¨ªa que analizar el problema desde nuevos puntos de vista.

Seg¨²n Europa Press, Miguel Boyer tras clausurar las Jornadas de Exportaci¨®n, celebradas en Madrid, dijo que "si se confirma la baja del petr¨®leo y cuando tengamos datos de su incidencia promedio en el crudo que compra Espaf¨ªa, espero que podamos hacer una reducci¨®n de los precios de los derivados". El ministro a?adi¨® que si se repercute todo el descenso del precio del crudo, es previsible que luego aumente el consumo. y, consecuentemente, los precios del petr¨®leo. "Por lo tanto, habr¨ªa que tender a estabilizart el precio de los carburantes".