Amancio Prada lleva el 'C¨¢ntico espiritual' a los lugares de san Juan de la Cruz en Granada

Por primera vez desde que fueron escritos, los versos de san Juan de la Cruz han sido cantados por Amancio Prada en el mismo lugar de la colina de la Alhambra donde su autor los concibi¨® y plasm¨® sobre el papel, hace ahora cuatrocientos a?os. A finales del siglo XVI, en efecto, san Juan vivi¨® m¨¢s de seis a?os en Granada, donde fue prior, desde enero de 1582 hasta junio de 1588, del convento que la orden del Carmelo ten¨ªa entonces en la colina de la Alhambra, en lo que actualmente se conoce como campo o carmen de los M¨¢rtires, a unos metros de distancia del auditorio municipal Manuel de Falla, donde Amancio Prada interpret¨® hace unos d¨ªas con enorme ¨¦xito su versi¨®n musicada del C¨¢ntico espiritual.

"Se trata, sin duda, del mejor poema de amor humano que se ha escrito hasta ahora en castellano", afirma el cantante del Bierzo. "La vigencia del C¨¢ntico, es, en este sentido, la misma que la del Quijote, las obras de Shakespeare, la pintura de Vel¨¢zquez o la m¨²sica de Bach o de Cabez¨®n".Comenzado a escribir por san Juan de la Cruz durante su encarcelamiento en Toledo, entre los meses de diciembre de 1577 y agosto de 1578, el C¨¢ntico espiritual fue terminado en el convento de los M¨¢rtires -es lo que se conoce como segunda versi¨®n del poema-, cuyas ¨²ltimas estrofas complet¨® probablemente en 1582. En Granada hizo san Juan la reestructuraci¨®n definitiva de la obra, entre 1585 y 1586, a?adiendo en esta ocasi¨®n -seg¨²n el hispanista, afincado en Andaluc¨ªa, Gerald Brenan, en su libro sobre la vida y la obra del m¨ªstico poeta- una nueva estrofa, la que actualmente ocupa el und¨¦cimo puesto, que elev¨® el n¨²mero total de estrofas del C¨¢ntico a cuarenta. Adem¨¢s, en los M¨¢rtires escribi¨® tambi¨¦n su Noche oscura del alma y complet¨® la Subida al monte Carmelo, ambas comentarios en prosa al poema que comienza con el verso En una noche oscura; as¨ª como el ¨²ltimo de sus grandes poemas, Llama de amor viva.

Humano, er¨®tico y sensual

"Descubr¨ª la poes¨ªa de san Juan de la Cruz, en Par¨ªs, a mis veintitantos a?os", cuenta Amancio Prada. "Por entonces yo hac¨ªa canciones sobre poemas m¨ªos, a Miguel Hern¨¢ndez y otros temas, hasta que un amigo y vecino, a quien le daba la tabarra con la guitarra por las noches, me recomend¨® que leyera el C¨¢ntico, y as¨ª fue como descubr¨ª lo que para m¨ª es sin duda el poema de amor m¨¢s humano, er¨®tico y sensual que se ha escrito nunca en castellano"."Como se trataba de un poema demasiado largo", contin¨²a, "me propuse hacer una composici¨®n que abarcara y desarrollara las tres fases que resumen el C¨¢ntico: la b¨²squeda, el encuentro y la con sumaci¨®n amorosa. Entonces, por encargo de una firma francesa, hice una primera versi¨®n sobre una selecci¨®n del poema para gui tarra y violonchelo, y la estrena mos en Par¨ªs, en el a?o 1973, acompa?¨¢ndome Eduardo Gattinoni en el violonchelo. A?os m¨¢s tarde, despu¨¦s de que me fui a vivir a Segovia, donde precisamente hay un convento muy bonito, fundado por san Juan tras su marcha de Granada, termin¨¦ la composici¨®n en su versi¨®n actual, con todo el poema cantado y la instrumentaci¨®n ampliada para viol¨ªn, voz, guitarra y violonchelo. Lo grabamos en junio de 1977".

Del paso por Granada de quien est¨¢ considerado como el m¨¢s grande de los poetas m¨ªsticos de la literatura espa?ola en castellano, queda a¨²n un recuerdo f¨ªsico en el propio Carmen de los M¨¢rtires, el multicentenario ¨¢rbol de la Cruz, que a duras penas consigui¨® salvarse de la desproporcionada tala practicada hace ocho a?os en el bosque de la colina cuando se quiso construir all¨ª un hotel de cinco estrellas, tras la ?legal cesi¨®n de este jard¨ªn monumental a una empresa privada por parte del Ayuntamiento franquista de la ¨¦poca. Afortunadamente, la operaci¨®n pudo paralizarse a tiempo, el cedro del santo poeta se salv¨® y el Carmen se encuentra hoy en fase de reconstrucci¨®n.

"Junto a este ¨¢rbol", comenta el cantante y compositor, "se comprende que san Juan pudiera escribir sus bellos versos. Oyendo el continuo rumor de agua que hay en este lugar, se me ocurre que aqu¨ª pudo escribir tambi¨¦n el poema Que bien s¨¦ yo lafonte que mana y corre. Me imagino aqu¨ª alfrailecico metido en una cueva y desvaneci¨¦ndose en el aire, que para m¨ª es una especie de despersonalizaci¨®n, al tiempo que el inicio de un proceso de la m¨ªstica".