1.400 millones de pesetas, bot¨ªn en efectivo de un nuevo 'robo del siglo' en una empresa de seguridad de Londres
El gran robo del tren de Glasgow, del que se cumple precisamente este a?o el 20? aniversario, ha sido ampliamente superado. Una banda de ladrones se apoder¨® el pasado lunes, en plena City londinense, del mayor bot¨ªn en dinero l¨ªquido de la historia de Gran Breta?a: siete millones de libras esterlinas (unos 1.400 millones de pesetas). La operaci¨®n fue larga, de siete de la ma?ana a una de la tarde, pero se desarroll¨® en completa calma.Los ladrones, de cuatro a seis seg¨²n la polic¨ªa, iban armados, pero no dispararon ni un solo tiro. La ¨²nica carta de visita que han dejado ha sido cinco botellas de vino tinto, vac¨ªas, y cuatro vasos de cristal.
Los ladrones aprovecharon el largo fin de semana -los bancos permanecieron cerrados viernes, s¨¢bado, domingo y lunes- para encontrar repletas las arcas de Security Express, una de las m¨¢s importantes empresas brit¨¢nicas que se dedica a guardar, en un bien vigilado edificio -o al menos eso cre¨ªan hasta ahora-, el dinero de peque?os bancos, tiendas, negocios y comercios, bien en cofres de seguridad a disposici¨®n de los clientes, bien moment¨¢neamente, a la espera de trasladarlo a las centrales bancarias.
A las siete de la ma?ana, la banda, cuyos integrantes iban encapuchados y armados, lleg¨® al edificio. No hab¨ªa ni un alma en la calle Curtain ni en los alrededores. Los d¨ªas de fiesta, la City, centro econ¨®mico y financiero de la ciudad, parece un aut¨¦ntico desierto, y la hora era muy temprana para coincidir con alg¨²n turista despistado. Los ladrones entraron no se sabe todav¨ªa c¨®mo -algunos afirman que escalaron una pared- e inmovilizaron al ¨²nico guardi¨¢n.
Los complejos sistemas electr¨®nicos de seguridad les impidieron entrar en las zonas donde se guardaban los cofres, pero los ladrones, que parec¨ªan conocer bien las instalaciones, esperaron tranquilamente hasta mediod¨ªa, en que comenzaron a llegar los dem¨¢s empleados. Uno a uno, los cinco hombres fueron inmovilizados y obligados a ir desconectando las alarmas y a abrir las puertas. Un portavoz de la compa?¨ªa afirm¨® que los atracadores amenazaron a los empleados con rociarlos con gasolina y prenderles fuego. La banda cogi¨® el dinero, billetes usados de 10, 20 y 50 libras y monedas, amordaz¨® a los empleados y se march¨® tranquilamente sin que nadie se diera cuenta de nada. Cuatro horas tardaron los guardias del Security Express en conseguir desatarse y avisar a la polic¨ªa.
El jefe del escuadr¨®n de Scotland Yard especializado en grandes robos, Frank Cater, parece especialmente interesado en descubrir c¨®mo los ladrones consiguieron mover flisicamente tal cantidad de dinero y en qu¨¦ medio de transporte se lo llevaron. La polic¨ªa ha hecho un llamamiento a toda persona que pasara por aquella zona a la hora del robo y cuente lo que vio.
La empresa aseguradora, Lloyds, se ha apresurado a ofrecer por su parte una recompensa de 500.000 libras (100 millones de pesetas) a quien ofrezca una pista que lleve a la recuperaci¨®n del bot¨ªn. Por el momento, Scotland Yard contin¨²a interrogando a los empleados para lograr una descripci¨®n lo m¨¢l exacta posible de los atracadores.
El bot¨ªn del robo bate todos los r¨¦cords en el Reino Unido. Los autores del gran robo del tren de Glasgow, ocurrido en 1963, se llevaron 2,6 millones de libras esterlinas (520 millones de pesetas) en billetes usados. En 1975, otra banda atrac¨® el Banco de Am¨¦rica, en Londres, y se llev¨® unos 1.600 millones de pesetas, pero s¨®lo una parte en dinero efectivo y el resto en acciones y valores de dif¨ªcil colocaci¨®n. Con todo, los aficionados a la historia de los grandes robos se?alan que el del tren de Glasgow sigue siendo el m¨¢s grande, si se tiene en cuenta la inflaci¨®n. En 1983, 1.400 millones de pesetas suponen, de verdad, menos dinero que 520 millones en 1963.
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