El PSI pide la dimisi¨®n de Fanfani y la convocatoria de elecciones anticipadas

El Partido Socialista (PSI) abandona a Fanfani, Los socialistas han decidido: elecciones en junio, El Gobierno, a un paso de la crisis. Son los t¨ªtulos de primera p¨¢gina de los diarios La Repubblica, Il Messaggero e Il Corriere della Sera de ayer. La noticia es que los socialistas han convocado para ma?ana y el s¨¢bado una reuni¨®n extraordinaria del comit¨¦ central para pedir a Amintore Fanfani que obre en consonancia con la situaci¨®n actual de crisis y dimita. En este caso, seg¨²n los socialistas, lo mejor es ir cuanto antes a elecciones anticipadas.En el diario Avanti, ¨®rgano oficial del partido socialista, se dec¨ªa ayer que las elecciones anticipadas "son un hecho de fisiolog¨ªa, pol¨ªtica" sobre el que no hay por qu¨¦ hacer tragedias griegas. Por el contrario, el l¨ªder democristiano, Giulio Andreotti, ex presidente del Consejo de Ministros, que acaba de celebrar a bombo y platillo sus 40 a?os de vida pol¨ªtica, ha pedido que en la proyectada reforma institucional se introduzca un art¨ªculos que haga imposible celebrar elecciones anticipadas.

Los comunistas se han subido tambi¨¦n al carro de los partidarios de las elecciones, ya que han afirmado que "consideran acabada la experiencia del Gobierno Fanfani". Lo que s¨ª piden es que los socialistas concurran a la campa?a electoral diciendo que, aunque por el momento sea imposible la alternativa de izquierdas, esa es su meta futura. Los seguidores de Enrico Berlinguer recuerdan a los socialistas de Bettino Craxi el duro precio que han tenido que pagar por su alianza de gobierno con la Democracia Cristiana.

Los motivos socialistas

Los democristianos, por su parte, est¨¢n convencidos de que el partido socialista empuja hacia las urnas por dos motivos: porque en septiembre tendr¨ªa que enfrentarse con la aprobaci¨®n de los presupuestos para 1984, en un momento de profunda crisis, en el que los socialistas tendr¨ªan que decidir abiertamente si est¨¢n o no a favor de una pol¨ªtica de rigor, y segundo, porque teme que cuanto m¨¢s se espere para ir a elecciones, m¨¢s tiempo tendr¨¢ la Democracia Cristiana para llevar a cabo la reestructuraci¨®n del partido con la secretar¨ªa de Ciriaco de Mita.De Mita, como pasaba hace un a?o con el fen¨®meno Craxi, atraviesa un momento de auge y vuelve a contar con el apoyo no s¨®lo de ciertos medios reticentes de su propio partido, sino tambi¨¦n de los ambientes de la alta industria milanesa y de la Prensa.

Los democristianos se oponen, l¨®gicamente, a que se adelanten los comicios, pero si las cosas se ponen feas y los socialistas no cejan en sus pretensiones de anticipar las elecciones, antes que celebrarlas en oto?o prefieren que se llevan a cabo inmediatamente. "No les tenemos miedo", ha dicho, seco, De Mita. Para la Democracia Cristiana, no perder votos en este momento ser¨ªa ya un ¨¦xito, mientras que para el partido socialista supondr¨ªa una derrota el no conseguir la victoria que todo el pa¨ªs le atribu¨ªa hace s¨®lo un a?o, poco antes que llegara a la secretar¨ªa democristiana De Mita, a quien se bautiz¨® entonces como el otro Craxi.