El Plan de Saneamiento Integral significa, para la corporaci¨®n, la base del futuro bienestar en la ciudad.

Las 400 hect¨¢reas de nuevas zonas verdes y la puesta en marcha del 90% de las obras del Plan de Saneamiento Integral de Madrid (PSIM) han puesto en estos cuatro ¨²ltimos a?os las bases para que en un pr¨®ximo futuro la ciudad sea m¨¢s agradable. El ¨¦xito de este objetivo depender¨¢ de la pol¨ªtica de consolidaci¨®n que se siga y de la coordinaci¨®n a establecer con las localidades del Area Metropolitana en la recuperaci¨®n de un anillo verde que los intereses es peculativos impidieron conservar en sus t¨¦rminos originales, a pesar de su necesidad para salvaguardar el medio ambiente de la capital; una ciudad que para mantenerse limpia exige en la actualidad un desembolso superior a los 9.000 millones anuales (el 13% del presupuesto municipal).

Los responsables de la delegaci¨®n municipal de Saneamiento y Medio Ambiente est¨¢n satisfechos de la obra realizada: cien parques nuevos, una treintena de plazas remodeladas y ajardinadas y media docena de bulevares recuperados o restructurados van a ser su tarjeta verde de presentaci¨®n para las pr¨®ximas elecciones municipales. "Nunca se han realizado tantos parques en Madrid", dicen los encargados del ¨¢rea, que en estos dos ¨²ltimos a?os, y, en especial, en los ¨²ltimos tres meses, han realizado una carrera contra reloj para que todos los s¨¢bados y domingos se abriera una nueva zona verde.Algunos t¨¦cnicos opinan, incluso, que esta marcha ha sido agotadora, al haberse concentrado las realizaciones, previstas para los cuatro a?os, en los dos ¨²ltimos, quiz¨¢ a causa de la desorientaci¨®n de los primeros momentos y de la necesidad de elaborar un plan de trabajo acorde con los deseos del equipo de gobierno municipalA la vista de los trabajos realizados, parece que los esfuerzos prioritarios se han centrado en construir parques utilitarios dota dos de instalaciones culturales, deportivas y recreativas; recuperar recintos ajardinados ya consolida dos y forestar amplias zonas de la ciudad, aprovechando las fiestas del ¨¢rbol y las tareas del departamento de jardines, saldadas con la plantaci¨®n de 132.500 ¨¢rboles.

La pol¨ªtica seguida con respecto a la construcci¨®n de nuevos parques se ha dirigido -a dar a los distritos su propia zona verde. Esta idea descentralizadora no ha sido, sin embargo, llevada a sus ¨²ltimos extremos. Frente a esta pol¨ªtica de zonas verdes, muchos de los actos celebrados en la capital -tales como verbenas, funciones de circo, concursos h¨ªpicos-, dentro de lo que se ha dado en llamar recuperaci¨®n de los parques como espacios vivos, se han celebrado en parques tradicionales como el Retiro o la Casa de Campo. Las protestas suscitadas por la realizaci¨®n de estos actos, que en muchas ocasiones terminaban con el destrozo parcial de la zona verde y el incremento de la programaci¨®n de actividades por parte de las juntas, han paliado algo la situaci¨®n.Cautela municipal

Entre las cr¨ªticas que se le hacen al equipo municipal figura la acusaci¨®n de que es cauto en su pol¨ªtica de recuperaci¨®n. El cierre al tr¨¢fico del Retiro fue una medida beneficiosa, puesto que el paseo de Coches estaba considerado como parte de la red viaria de la ciudad, pero no se ha conseguido evitar que de lunes a viernes este paseo se convierta en aparcamiento de los oficinistas de la zona, ni que el s¨¢bado y el domingo la Polic¨ªa Municipal tenga que habilitar incluso la mediana para que estacionen todos los veh¨ªculos que se dirigen al parque.en situaci¨®n parecida podr¨ªa incluirse la finca de Tres Cantos, en la carretera que va a Colmenar Viejo, situada a 22 kil¨®metros de la capital y propiedad del Ayuntamiento, cuya extensi¨®n es el doble de la del Retiro, y que no ha sido objeto de las mejoras necesarias para quedar abierta al p¨²blico.

Al margen de estas cr¨ªticas, la labor realizada en parques y jardines se ha notado positivamente. Las fases inauguradas de los grandes parques de las Cruces, Pradolongo y Darwin, la apertura de otros muchos de menos extensi¨®n y la recuperaci¨®n de una finca como la Quinta de los Molinos, aunque la falta de vigilantes limite su uso a los fines de semana y d¨ªas festivos, han equilibrado el espacio ambiental del ciudadano.

Los responsables municipales dicen que hay que construir muchos m¨¢s parques y cumplir los objetivos recogidos en el Plan General de Ordenaci¨®n Urbana, aprobado por el Ayuntamiento. Gracias a la creaci¨®n de una empresa mixta para la conservaci¨®n de los parques perif¨¦ricos, los 900 jardineros municipales podr¨¢n dedicarse a los distritos c¨¦ntricos, donde hay 762 hect¨¢reas de zona verde; al parque del Oeste, que tiene una extensi¨®n de 98 hect¨¢reas, y a la Casa de Campo. Este ¨²ltimo recinto, con sus 1.722 hect¨¢reas, representa a¨²n el 55,37% de la zona verde total que existe en la capital, que se eleva, si no se cuenta el monte de El Pardo, a 3.200 hect¨¢reas, aproximadamente nueve metros cuadrados por habitante.

La soluci¨®n adoptada para asegurar la conservaci¨®n tendr¨¢, en opini¨®n de los defensores de la medida, un coste similar al que ahora tienen las contratas, que expiran totalmente en septiembre de 1984. Sin embargo, permitir¨¢ lograr una agilidad administrativa, que el Ayuntamiento reconoce no tener, para poner en marcha la conservaci¨®n de un parque. El coste es muy importante en una delegaci¨®n que gasta en la actualidad m¨¢s de 9.000 millones de pesetas al a?o, lo que supone el 39%. del dinero invertido en compras de bienes y servicios municipales. Recoger la basura se lleva m¨¢s de 4.000 millones de pesetas?; limpiar las calles, m¨¢s de 2.250 millones; conservar y sanear el alcantarillado, m¨¢s de 1.000 millones, y conservar los parques, una cantidad similar.Peces a final de a?o

Si el incremento de zonas verdes ha sidoJo m¨¢s visible en estos cuatro a?os, la realizaci¨®n de "la mayor obra de ingenier¨ªa sanitaria actualmente en ejecuci¨®n", tal como llaman los encargados al Plan de Saneamiento Integral de Madrid (PSIM), no empezar¨¢ a sentirse de forma generalizada hasta el pr¨®ximo mes de septiembre, cuando a la depuradora de Valdebebas, en funcionamiento, se unan las de Viveros, Butarque, China y Rejas.

Pescar peces en el Manzanares a finales de este a?o parece ser la consigna. Para ello est¨¢ en marcha un plan que en su desarrollo total supondr¨¢ un gasto de 33.161 millones de pesetas, algo menos que todo lo que han representado los gastos fijos de la delegaci¨®n de Saneam¨ªento en estos cuatro a?os. La puesta en marcha de los 200 proyectos que componen la obra permitir¨¢ el vertido limpio de las aguas del Jarama y Manzanares.

Pero este plan por s¨ª s¨®lo no completar¨ªa la depuraci¨®n de las aguas, contaminadas desde sus cabeceras. Ser¨¢ necesario que se lle ve adelante el proyecto de control de vertidos industriales, cuyo borrador acaba de elaborarse, as¨ª como que los pueblos inicien de forma mancomunada la instalaci¨®n de depuradoras en sus pol¨ªgonos ganaderos o industriales, campo en el que, excepci¨®n hecha de algunas localidades, no se ha hecho pr¨¢cticamente nada. La raz¨®n es que, seg¨²n dicen los responsables provinciales, hace cuatro a?os no se conoc¨ªa siquiera la situaci¨®n en la que se encontraban. Si en el mandato que termina los madrile?os no pudieron ver a¨²n el Manzanares con agua limpia, no ocurri¨® lo mismo con los estanques del Retiro y de la Casa de Campo, que fueron vaciados, limpiados, reconstruidos y llenados de nuevo.Basuras en la calle

La limpieza viaria fue el tercer frente en el que se ha desenvuelto la batalla por la recuperaci¨®n ambiental de la ciudad. Seg¨²n las estad¨ªsticas, por cada ocho kilos de basura que los ciudadanos sit¨²an .en bolsas y acaban en los cubos, uno lo tiran directamente a la calle. A pesar de las campa?as de concienciaci¨®n, en las que se han gastado 70 millones de pesetas, y las operaciones especiales de la delegaci¨®n -limpieza de fachadas, recogida de veh¨ªculos abandonados, recuperaci¨®n del vidrio-, queda a¨²n mucho por realizar y ya se habla de incrementar, el n¨²mero de parados que se ocupan de la limpieza los s¨¢bados y domingos, de extender el uso de los nuevos contenedores especiales y de incrementar sensiblemente los fondos destinados a convencer a los ciudadanos, poco sensibilizados, al parecer, por los bandos del alcalde.

Otro de los problemas planteados y no resueltos en su totalidad ha sido la contaminaci¨®n atmosf¨¦rica. Los alarmantes ¨ªndices de contaminaci¨®n registrados en el mes de diciembre de 1979 fueron la se?al para la adopci¨®n de medidas, que se concretaron en la elaboraci¨®n de un Plan de Saneamiento Atmosf¨¦rico, que a¨²n no se ha podido llevar a cabo de forma integral ante las trabas encontradas en la Administraci¨®n centraf.

Los responsables municipales, mermados en sus competencias, iniciaron la aplicaci¨®n de ¨²na serie de medidas encaminadas a mejorar el control de las fuentes emisoras de la contaminaci¨®n. En los ¨²ltimos tres a?os se ha incrementado el equipo de la red de control atm¨®sf¨¦rico, han sido inspeccionados 45.000 veh¨ªculos con motor diesel y se ha realizado un estudio de los generadores de calor, 6.000 -de los cuales fueron revisados.A pesar de la conseguida contenci¨®n de los ¨ªndices, el definitivo control se conseguir¨¢ cuando pueda realizarse una inspecci¨®n programada de todo el parque automovil¨ªstito con motor diesel y de la totalidad de las calderas de la capital, al tiempo que se establece un plan de ayudas econ¨®micas que permita la sustituci¨®n de aquellas fuentes de energ¨ªa que no puedan corregir sus ¨ªndices de contaminaci¨®n. Todo eso, si se quiere que el cielo, las aguas, las calles y los parques est¨¦n tan limpios como aparecen en los carteles publicitarios.