El Rey presenci¨® unas. maniobras de la Brigada Paracaidista

El Rey don Juan Carlos presenci¨® ayer en el campo de maniobras de San Gregorio (Zaragoza) un ejercicio militar con fuego real efectuado por la Brigada Paracaidista, dentro de las maniobras denominadas Trueno que anualmente realiza esta unidad de ¨¦lite del Ej¨¦rcito de Tierra. Los ejercicios, en los que participaron 3.200 hombres, 520 veh¨ªculos y 15 aviones, fueron presenciados tambi¨¦n por el ministro de Defensa, Narc¨ªs Serra, quien eludi¨® todas las preguntas que le hicieron los Informadores durante los breves minutos que dedic¨® a ¨¦stos. En el ejercico, se utilizaron bombas de napalm.

Las maniobras Trueno 83 se iniciaron hace tres d¨ªas y se prolongar¨¢n durante seis jornadas m¨¢s. El coste total de las mismas supera los cien millones de pesetas, seg¨²n coment¨® un mando del Estado Mayor de la brigada. El ejercicio de ayer consisti¨® en un avance de varias compa?¨ªas, para romper la te¨®rica presencia de enemigos que imped¨ªan la utilizaci¨®n de las l¨ªneas f¨¦rreas Zaragoza-Huesca y Zaragoza-Tudela. El avance se realiz¨® con el apoyo de fuego real proporcionado por dos compa?¨ªas de blindados de la Divisi¨®n Acorazada y varios aviones de combate F-5 del Ala 21 con base en Mor¨®n (Sevilla).El primero de los aviones de combate hizo su aparici¨®n a las 11.37 horas, y lanz¨® una potente carga de napalm (producto altamente inflamable) que arras¨®, inundada en llamas, toda la cumbre de una peque?a monta?a. La utilizaci¨®n de napalm en conflictos b¨¦licos est¨¢ prohibida por diferentes convenios internacionales.

Durante la primera parte del ejercicio, se dispararon tambi¨¦n tres cohetes contracarro de la clase Mil¨¢n. El precio de cada proyectil supera el medio mill¨®n de pesetas. Igualmente, se realizaron numerosos disparos -desde carros de combate -cada uno cuesta unas 20.000 pesetas- y los F-5 lanzaron contra diversas cumbres numerosas bombas y cuatro cohetes. Finalizada la primera fase, el Rey y las autoridades presentes -entre ellas el capit¨¢n general, de la V

Regi¨®n Militar Luis Caruana- recibieron en una tienda de campa?a amplias explicaciones sobre el desarrollo del ejercicio. De regreso al puesto de observaci¨®n, el Rey y sus acompa?antes almorzaron con dos centenares de mandos de la Brigada Paracaidista.