'Stroszek', la balada de Gaspar
El pesimismo de Werner Herzog, m¨¢s literario a veces que nacido de la vida real, prolong¨® la historia del protagonista de El enigma de Gaspar Hauser, o en todo caso, del actor, Bruno S., el hombre que se acerc¨® al cine por vez primera con aquella pel¨ªcula.En esta ocasi¨®n Herzog quiso contar la desolada historia de un hombre, carne de hospitales y de psiqui¨¢tricos, que viaja a los Estados Unidos con la ilusi¨®n de cualquier otro pobre perdedor que quiere cambiar de sociedad. La historia de Stroszeck no var¨ªa en lo sustancial respecto a la de otros marginados, aunque s¨ª es "una de las m¨¢s desesperadas de Herzog", como opina Juan Carlos Rentero en su minucioso trabajo publicado en Dirigido por ... : "Herzog", dice, "contin¨²a fiel a s¨ª mismo en su arriesgado pesimismo, en su declarada necesidad de encontrar el lado humano de sus personajes. Stroszek es un filme desesperado, pero de una desesperaci¨®n que no parec¨ªa nunca tan real como aqu¨ª."
Werner Herzog eligi¨® para esta pel¨ªcula al mismo no actor porque pretend¨ªa encontrar a "un ser humano, un ser aut¨¦ntico, no un s¨ªmbolo". Entusiasmado con la experiencia f¨ªlmica de haber colaborado con el hombre que vivi¨® una experiencia similar a la de Gaspar Hauser, no dud¨®, en esa afici¨®n tan suya de contratar a actores que aportaran una expresi¨®n inusual en el cine, de trabajar de nuevo con el enigin¨¢tico Bruno S. "El sufrimiento que expresa su mirada es un sufrimiento aut¨¦ntico", opinaba p¨²blicamente el director alem¨¢n, olvidando posiblemente su capacidad para descubrir con la c¨¢mara ese matiz que tanto le impresion¨® personalmente.
A veces, y es algo com¨²n en el cine de nuestros d¨ªas, se sensibilizan los directores con las experienc¨ªas que conocen en la vida real, creyendo en su capacidad para traducirla a im¨¢genes. Herzog no es precisamente un director capaz para interpretar lo cotidiano en los t¨¦rminos de un documental.
Posee una po¨¦tica estilizadora tan protagonista que las vivencias que quiere mostar quedan d¨ªstorsionadas por su lenguaje, acerc¨¢ndose probablemente a una sensibilidad nueva, pero dif¨ªcil desde una lectura tradicional del cine. Herzog sigue exigiendo un esfuerzo.
Se enamor¨® de su protagonista al encontrar en ¨¦l t¨¦rminos que no son usuales en otros seres humanos: "Nunca hab¨ªa encontrado a un ser humano al que la sociedad hubiera destruido hasta ese punto". Para ilustrarlo, comenta la an¨¦cdota: "El apartamento que se ve en la pel¨ªcula es el suyo propio, el que se compr¨® con el dinero de El enigma de Gaspar Hauser, as¨ª como el piano donde le humillan los bribones".
Stroszek se emite hoy a las 22.00 por la segunda cadena.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.