La intervenci¨®n ilegal de un tel¨¦fono no ofrece dificultades

La intervenci¨®n ilegal de una l¨ªnea telef¨®nica no ofrece ninguna dificultad, seg¨²n los expertos consultados por EL PAIS. El m¨¦todo habitual utilizado hasta el momento para las escuchas legales consist¨ªa en solicitar de una centralita telef¨®nica que conectara la l¨ªnea del abonado a controlar con una comisar¨ªa o centro policial, donde las conversaciones eran grabadas.Los trabajadores de la Telef¨®nica han acordado con la direcci¨®n negarse a hacer pinchazos si no se les exhibe la orden judicial o, en su defecto, y por aplicaci¨®n de la ley antiterrorista, una fotocopia de la orden -usualmente, un t¨¦lex- firmada por el ministro del Interior o el director de la Seguridad del Estado, que deber¨¢ ser ratificada o revocada judicialmente a las 72 horas. Bajo ning¨²n otro supuesto admitir¨¢n los trabajadores facilitar escuchas policiales.

Sin embargo, la no utilizaci¨®n de los servicios de Telef¨®nica no impide en modo alguno la posibilidad de realizar escuchas, en este caso ya totalmente ilegales. El m¨¦todo m¨¢s f¨¢cil es hacer una desviaci¨®n de la l¨ªnea de un abonado a partir de la caja de registro de un inmueble donde se distribuyan las l¨ªneas telef¨®nicas. Una mera derivaci¨®n de la l¨ªnea, tras un breve tanteo para detectarla, posibilita su conexi¨®n con un magnet¨®fono, que funcionar¨¢ cuantas veces converse el abonado. El acceso a las cajas de registro, usualmente ubicadas en las fachadas del inmueble, no ofrece apenas dificultades.

Otra posibilidad es hacer una derivaci¨®n a partir de las conexiones telef¨®nicas subterr¨¢neas, que si bien por el, elevado n¨²mero de l¨ªneas de abonados que transportan hacen el pinchazo m¨¢s dif¨ªcil, en modo alguno lo impiden. Que el tendido de las conexiones telef¨®nicas subterr¨¢neas en buena parte est¨¦ adjudicado a una multiplicidad de empresas privadas (Sintel, Radiotr¨®nica, Dragados y Construcciones, Standard, Abengoa, etc¨¦tera) facilita notablemente que supuestos trabajadores de la mismas trabajen a placer en el subsuelo hasta localizar y pinchar la l¨ªnea en cuesti¨®n.

M¨¦todos sofisticados

Existen otros m¨¦todos m¨¢s sofisticados para la realizaci¨®n de intervenciones telef¨®nicas, a partir de micr¨®fonos radioemisores situados dentro del auricular o en la caja de registro, lo que elimina la aparatosidad de los cables. Los expertos no dudan en asegurar que es imposible averiguar sin un aparato especial si un tel¨¦fono se halla o no intervenido, y que los clics y los extra?os ruiditos que resultan audibles en modo alguno corresponden a supuestas escuchas.El secr¨¢fono de que disponen algunos tel¨¦fonos de las m¨¢s altas personalidades del pa¨ªs tampoco es una garant¨ªa contra su intervenci¨®n. Este aparato efectivamente codifica y vuelve ininteligibles las conversaciones captadas entre dos abonados que dispongan del mismo, salvo que el interventor tambi¨¦n tenga un aparato de este tipo que las decodifique. Un m¨¦todo para eliminar dr¨¢sticamente una escucha, siempre que la fortaleza del cable lo permita, es aplicar un elevad¨ªsimo voltaje al hilo telef¨®nico, lo que destrozar¨ªa el aparato interventor.