Apremiantes contactos pol¨ªticos en Madrid para atajar la generalizaci¨®n de la guerra en Centroam¨¦rica

Felipe Gonz¨¢lez, presidente del Gobierno espa?ol, recibi¨® en la tarde de ayer en La Moncloa a Willy Brandt, ex canciller de la Rep¨²blica Federal de Alemanla y presidente de la Internacional Socialista. La visita de Brandt, que fue seguida de una cena a la que tambi¨¦n asistieron los ex presidentes de Venezuela y Costa Rica, Carlos Andr¨¦s P¨¦rez y Daniel Oduber, respectivamente, se inscribe dentro de los contactos pol¨ªticos que se realizan estos d¨ªas en Madrid entre personalidades europeas y americanas, socialistas y democristianas, para hallar una soluci¨®n apremiante, negociada y pac¨ªfica, a la crisis centroamericana, calificada como "grave y peligrosa" por Willy Brandt.

La direcci¨®n de la Internacional Socialista teme grandemente que los acontecimientos en Am¨¦rica Central, sobre todo el enfrentamiento militar nicarag¨¹ense-hondure?o, sea el ¨²ltimo paso hacia un conflicto b¨¦lico generalizado, con el involucramiento directo en ¨¦l de las superpotencias.De una opini¨®n muy similar a ¨¦sta participan dirigentes democristianos como Andr¨¦s Zald¨ªvar, presidente de la Uni¨®n Mundial Dem¨®crata Cristiana o Jos¨¦ Napole¨®n Duarte, l¨ªder democristiano salvadore?o, presentes ambos en Madrid estos d¨ªas, donde han manifestado sus inquietudes en este sentido.

Las reuniones de Madrid se insertar¨ªan en el inter¨¦s com¨²n por conseguir el prop¨®sito pacificador citado, como complemento a la labor desplegada, hasta ahora sin grandes logros, por los Gobiernos de M¨¦xico, Panam¨¢, Colombia y Venezuela, agrupados en el denominado Grupo de Contadora, con el aleccionamiento del presidente del Gobierno espa?ol, Felipe Gonz¨¢lez.

El viaje a Washington

Del reciente viaje del jefe del Ejecutivo espa?ol a Estados Unidos e Iberoam¨¦rica, los reunidos en Madrid han extra¨ªdo las ¨²ltimas informaciones elaboradas en Washington al respecto de la crisis centroamericana, coinciden todos los observadores.

De acuerdo con fuentes pol¨ªticas democristianas solventes, existe la convicci¨®n compartida de que la Administraci¨®n norteamericana prev¨¦ una intervenci¨®n militar directa en Nicaragua a muy corto plazo, antes de que se inice la precampa?a electoral en Estados Unidos.

Ello obedecer¨ªa al deseo de Washington de reconducir la situaci¨®n centroamericana que, a ojos de la Administraci¨®n Reagan, se habr¨ªa deteriorado para sus intereses dada la evoluci¨®n de los acontecimientos militares en El Salvador, la inestabilidad del r¨¦gimen guatemalteco de Efra¨ªn R¨ªos Montt y la incertidumbre pol¨ªtica derivada de la p¨¦sima situaci¨®n econ¨®mica mexicana.

Todo esto, unido a una eventual consolidaci¨®n pol¨ªtica en Nicaragua, seg¨²n las fuentes citadas, inclinar¨ªa la balanza en detrimento de los intereses norteamericanos. Sobre esta consideraci¨®n, los flancos vulnerables que la situaci¨®n pol¨ªtica en Nicaragua ofrecer¨ªa a Estados Unidos llevar¨ªa aparejado el afianzamiento en Washington de las tesis intervencionistas estadounidenses en aquel pa¨ªs centroamericano.

Reagan, insatisfecho

El proceso pol¨ªtico de democratizaci¨®n, anunciado por los dirigentes sandinistas, y que incluye la promulgaci¨®n de una ley de partidos pol¨ªticos, una ley electoral y elecciones generales en 1985, no satisface a Ronald Reagan, que exigir¨ªa un ritmo mucho m¨¢s acelerado y un adelantamiento s¨²bito de las elecciones y de la liberalizaci¨®n de los partidos pol¨ªticos para desistir del empleo de la fuerza militar. Washington considera muy negativo, adem¨¢s, el solapamiento entre el Frente Sandinistas y el Ej¨¦rcito nicarag¨¹ense. Este hecho, a juicio de la Administraci¨®n Reagan, convierte en inviable cualquier forma de democratizaci¨®n del tipo de la anunciada por Managua.

Los dirigentes sandinistas, entre ellos el titular de Asuntos Exteriores, Miguel d'Escoto, presente tambi¨¦n estos d¨ªas en Madrid, atribuyen al ej¨¦rcito de Honduras la ejecuci¨®n de los designios "desestabilizadores" que Washington aplica contra Nicaragua, seg¨²n dijo a este diario el martes.

El sacerdote-ministro agreg¨® que mientras Honduras no negocie bilateralmente con Nicaragua, el Grupo de Contadora habr¨¢ fracasado. D'Escoto reiter¨® la "disponibilidad de mi Gobierno a negociar con Honduras", pero matiz¨® que esto "no puede en ning¨²n caso implicar la imposici¨®n de un sistema diferente, o traidor, a los ideales por los que murieron tantos hijos de Nicaragua".

Los observadores conceden la m¨¢xima importancia a la entrevista celebrada en la tarde de ayer entre Willy Brandt y el ministro nicarag¨¹ense, cuyo contenido no ha sido divulgado.