7 nuevas salas dedicadas a Goya
La obra de Goya, que en su mayor parte permanec¨ªa guardada en los bajos del museo desde que en 1976 comenzaran las obras de acondicionamiento de la pinacoteca, vuelve a ocupar la mayor parte de la atenci¨®n del Prado en siete de las salas recientemente acondicionadas. Salvo la colecci¨®n de pintura negra y los tapices, que se exhibir¨¢n en octubre, los restantes fondos ya se presentan al p¨²blico.Y no solamente se exhiben las pinturas expuestas hasta 1976, sino que en esta ocasi¨®n han sido incluidos varios cuadros que anteriormente permanec¨ªan en lugares ajenos al museo. Es el caso de La comuni¨®n de San Jos¨¦ de Calasanz y La oraci¨®n del huerto, propiedad de los Padres Escolapios del colegio de San Ant¨®n, quienes han cedido estas obras hasta el pr¨®ximo mes de noviembre. Las dos obras permiten apreciar con detalle la evoluci¨®n de la pintura religiosa de Goya. La inclusi¨®n de la Inmaculada, un cuadro de peque?o tama?o que hasta 1977 permaneci¨® en los almacenes del Prado sin ser tomado en consideraci¨®n y que ahora ha sido recuperado, permite completar m¨¢s a¨²n la evoluci¨®n de la pintura religiosa.
Todas las dem¨¢s obras, desde el retrato juvenil de Carlos III hasta La Pradera de San Isidro, las Majas o los Fusilamientos y La carga de los mamelucos, han sido colocadas en las nuevas salas respetando la distribuci¨®n y colocaci¨®n original de las pinturas en el museo.
Goya en las colecciones privadas madrile?as ha sido una de las exposiciones de mayor ¨¦xito de esta temporada.
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