La derecha, descabalgada
Buscaban lo de siempre, un hombre, un hombre, eso que nunca les hab¨ªa faltado para emblematizar o capitanear los valores, porque la derecha, cuando no ten¨ªa un hombre, el hombre, o s¨®lo lo ten¨ªa a medias, contaba siempre, desde Cal¨ªgula/Pav¨ªa, con el suplemento del caballo. Las fuerzas progresistas, en el mundo, lo tienen m¨¢s crudo, porque un l¨ªder de izquierdas ha de tener detr¨¢s una buena biblioteca y, lo que es m¨¢s importante, hab¨¦rsela le¨ªdo. Para hacer un l¨ªder conservador basta con subirlo a un caballo, y que el caballo, a su vez, sea conservador (lo son casi todos los caballos). De modo que el l¨ªder progresista es un centauro de s¨ª mismo y su biblioteca, y un l¨ªder conservador es una figura poliformo/perversa de funcionario/caballo. Por eso ha quedado m¨¢s, la derecha, en las grandes estatuas p¨²blicas: porque hace mejor un se?or a caballo, se?alando el non plus ultra con un sable, que un se?or a lomos de su biblioteca. Caballos hay en todas las remontas, o sea, que si Fraga no encuentra un sucesor, no debe de ser por eso. Lo cual que Fraga me env¨ªa afectuosamente una p¨¢gina de Time (que ya hab¨ªa visto yo en la consulta del m¨¦dico) sobre la fascinaci¨®n e incluso la locura de la ¨²ltima moda en tirantes para ejecutivos. Gracias, don Manuel. Se ve que los ratos que le deja libres, en Londres, la Thatcher/Juana de Arco/Cruella de Vil, Catalina la Grosse, Julia Sforza/Mirlam Urquijo, los dedica Fraga a respirar por las calles el humour londinense. Pero Fraga ha tenido que interpretar muchos papeles en la Historia de Espa?a, y ahora, ya, s¨®lo hace malamente de Fraga.Buscaban un Cara de Plata, ya digo, un hermoso segund¨®n valleinclanesco, miraban a ver, para suceder a don Manuel, pero s¨®lo se presentaban a examen chicos/Telva, ye-yenazis o viejos pataches de la jurispericia, tenores y cojos de alma como piratas de zarzuela. No pod¨ªa ser. La derecha, hoy con el 86 como paisaje, necesita tres cosas, o una de las tres: un hombre providencial. Una idea. Un gran partido/grupo de presi¨®n. El propio Fraga, con adem¨¢n que no hubi¨¦ramos sospechado en ¨¦l, parece buscar en torno a qui¨¦n dejarle los millones de votos, el peso de la p¨²rpura, sus hist¨®ricos tirantes de Tirant lo Blanc -"C¨®mo le aprecio yo a Manolo y c¨®mo le va eso de Tirant lo Blanc, Paco" (Areilza)-, m¨¢s la pegatina de la Internacional Conservadora y unas pastas que le chorice¨® a la Thatcher, sin mala intenci¨®n, cuando les dio t¨¦ y simpat¨ªa. En cuanto a la idea, la derecha lleva muchos a?os reciclando inventos culturales o mejoras sociales de la izquierda, incluso anticip¨¢ndose a ella desde el Poder, como hac¨ªa Giscard, y de ah¨ª que Fraga haya dicho ahora, al salir de la entrevista con presidente Gonz¨¢lez, que en realidad el PSOE va a aplicar un programa AP. Por eso miraban, ya digo, en Balmes, V¨¢zquez de Mella, Maeztu. Maeztu, vestido de Mortadelo/ Filem¨®n, con su cuello de porcelana, redondo y desajustado del pescuezo - dijo aquello de que "vivir es defenderse". No en vano le¨ªa a Nietzsche, aunque Baroja asegura que ten¨ªa las p¨¢ginas de Zaratustra sin abrir. Fue la gloria de don Ramiro, una premonici¨®n: la derecha vive hoy defendi¨¦ndose, en la oposici¨®n. Y, en cuanto al partido/grupo de presi¨®n, todos se van quedando en fugas de agua como las que persigue Isabel II/Canal: la fuga Alzaga, la fuga Camu?as, la fuga Garrigues, la fuga ?lvarez ?lvarez, la fuga Roca, ?conocen?
Nuestro capitalismo, a su vez, se divide hoy como los conejos: de monte y casero. El de monte o asilvestrado lo capitanea Ferrer-Salat. El casero, dom¨¦stico, ¨²til, pr¨¢ctico y practicable, usadero, usual, son los siete grandes que jam¨¢s quisieron, ay, a Ruiz-Mateos en su mesa oblonga. Aguirre/Esc¨¢mez han invertido en democracia. Ferrer/ CEOE no invierten suficientemente en Fraga, o esperan el nuevo Fraga, sin tirantes. El caballo est¨¢ engualdrajado, pero no hay jinete.
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