Mauroy hace un balance triunfal de la acci¨®n de su Gobierno

El primer ministro franc¨¦s, Pierre Mauroy, ha hecho un balance triunfal de la acci¨®n de su Gobierno y ha afirmado que la Francia de la d¨¦cada de los setenta era "un barbecho". Paralelamente a este torrente de optimismo, destinado posiblemente a los militantes socialistas, el Gobierno ha lanzado tambi¨¦n un llamamiento a los intelectuales para que colaboren con el poder de izquierdas.Para Mauroy, "la obra iniciada por el Gobierno socialista ya es excepcional". En dos a?os, recuerda, han sido adoptadas 200 leyes, se ha puesto en marcha un "programa excepcional de reformas" y el avance social "no tiene precedentes". Y, al mismo tiempo, la econom¨ªa avanza por el camino "del saneamiento y de la modernizaci¨®n".

Estos balances de antosatisfacci¨®n ya empiezan a ser norma del primer ministro. As¨ª lo hizo en mayo de 1982, en v¨ªsperas de la segunda devaluaci¨®n del franco. Tambi¨¦n se repiti¨® en las ¨²ltimas elecciones municipales, pocos d¨ªas antes, igualmente, de la tercera depreciaci¨®n de la moneda francesa.

Las razones que ahora motivan el triunfalismo de Mauroy no se sabe muy bien cu¨¢les pueden ser (una cuarta devaluaci¨®n no ser¨ªa imposible en el oto?o, pero no ahora), aunque se sospecha que haya querido reanimar a las bases de izquierda valorando las realizaciones que, seg¨²n Mauroy, han salvado a Francia de quedarse en el "barbecho" en el que la hab¨ªan convertido los Gobiernos anteriores de derechas.

Las reacciones de la oposici¨®n dicen exactamente lo contrario sobre el balance del Gobierno socialista. Una de las cr¨ªticas m¨¢s moderadas procede de la ex presidenta del Parlamento europeo y ex ministra Simone Veil, mujer pol¨ªtica caracterizada por su esfuerzo en la ecuanimidad: "En todos los aspectos, la situaci¨®n de Francia es catastr¨®fica". Y a?ade a¨²n: "Cuando en el extranjero oigo decir que, poco m¨¢s o menos, Francia se encuentra en la misma situaci¨®n que Brasil o M¨¦xico, no me alegro. Encuentro eso aflictivo".