Los 27 espa?oles seleccionados para Helsinki su preparacion por libre
Cada cual con su entrenador, los atletas espa?oles seleccionados para los campeonatos mundiales de Heisinki se preparan a fondo en las ¨²ltimas jornadas premundialistas. Desde el Teide hasta los Picos de Europa, desde Barcelona a Salamanca, los 27 deportistas espa?oles piensan en el lugar m¨¢s alto del podio y en la medalla m¨¢s brillante. Cuando menos, esperan batir r¨¦cords de Espa?a. Y en el peor de los casos, sacar¨¢n adelante sus propias marcas o al menos las igualar¨¢n, dicen. Mediofondistas, saltadores, marchadores, maratonianos, vallistas, y dem¨¢s especialistas en competiciones atl¨¦ticas, ven el sol por la ma?ana, sudando ya, ansiosos de que pase lento el tiempo y r¨¢pidas las marcas, y la luna por la noche, sin haber flaqueado, sin dar l¨ªmite a sus fuerzas.
El d¨ªa 3 de agosto se encontrar¨¢n en Madrid los 27 atletas. Comer¨¢n juntos en la residencia Blume y esa noche ser¨¢ la ¨²ltima que tengan en muchos d¨ªas para hablar de cosas que no sean el deporte. A la ma?ana del d¨ªa 4 se ir¨¢n a Helsinki. La televisi¨®n mostrar¨¢ durante cinco horas diarias el desarrollo de las competiciones.De modo que, como muy tarde, el martes por la noche, Colom¨¢n Trabado, el corredor de los 800 metros lisos, y su entrenador, Julio Bravo, dejar¨¢n los Picos de Europa, donde se encuentran entrenando, y coger¨¢n el tren de Santander para llegar a Madrid. Es probable que Azulay, si deja tambi¨¦n la llegada a Madrid para ¨²ltima hora, se encuentre con ellos en alg¨²n compartimento del expreso. Azulay, el vallista de 400 metros que ostenta el r¨¦cord de Espa?a en 49.59, vendr¨¢ de Santander, de las pistas de Albericia, donde tantas horas pasa dando brincos; le acompa?ar¨¢ Julio Bravo, su entrenador t¨¦cnico. Puede que se encuentren a Abascal, que aunque vive en Barcelona tambi¨¦n decidi¨® respirar aires c¨¢ntabros. Entrenarse en las alturas debe dar buen resultado en los niveles marinos. Probablemente fue su entrenador Gregorio Rojo quien decidi¨® que Abascal estuviera por all¨ª.
Por cuesti¨®n de independencia y respeto al propio criterio de los entrenadores y los atletas, este a?o no habr¨¢ concentraci¨®n previa, como otros a?os la hubo. Cada cual har¨¢ la preparaci¨®n a su aire, durante estos d¨ªas que separan la elecci¨®n de la selecci¨®n y el avi¨®n que les lleve hasta Finlandia.
Los que menos se tendr¨¢n que preocupar de llegar pronto ser¨¢n sin duda los que ya est¨¢n en Madrid. ?ngel Heras, el corredor de 200, 400 y 4x400; Prieto, el fondista que correr¨¢ los 10.000 metros lisos. Por cierto que le sali¨® una llaga en un pie hace unos d¨ªas, pero no est¨¢ dispuesto a dejar el entrenamiento. Se entrena como una bestia, seg¨²n sus compa?eros de la federaci¨®n. No para de hacer series. Ya se lo han dicho a su entrenador, Jos¨¦ Luis Pascua, que si Prieto deja un par de d¨ªas de entrenar se le cura r¨¢pido, pero nada, no hay manera. Prieto sigue.
A las ¨®rdenes de Manuel Pascua est¨¢ Alonso Valero, tambi¨¦n en Madrid, y Roberto Cabrejas, que est¨¢ en Madrid tambi¨¦n y dej¨® su Barcelona unos d¨ªas. Cabrejas el 24 julio hizo 2,04 en altura y tres d¨ªas m¨¢s tarde bati¨® el r¨¦cord de Espa?a con 2,26, intent¨® el 2,28 y el list¨®n qued¨® temblando, pero se cay¨®. ?l tiene f¨¢cil lo de llegar a Madrid, porque est¨¢ en la misma residencia Blume y s¨®lo tendr¨¢ que coger el ascensor. M¨¢s le cost¨® estar entre los 27 de Helsinki.
Ensayos en Barcelona
Muchos atletas se entrenan en Barcelona. Moracho, a las ¨®rdenes de Jaime Enciso, que tambi¨¦n dirige a Antonio Corgos, un barcelon¨¦s que de Anoeta se march¨® a Estepona a entrenarse y ahora volvi¨® a su tierra, a lo mismo; Juan Torres, a las ¨®rdenes de Antonio Rojo; el pertiguista Alberto Ruiz, dirigido por Hans Ruff; los marchadores Mar¨ªn y Botonero, a las ¨®rdenes de Alberto Gal¨ªn y Joaqu¨ªn Lamora respectivamente; el primero en San Feloni, casi en los Pirineos, y el segundo en la misma Barcelona, haciendo su vida habitual, como si nada pasase. Llopart y Alcalde, los otros marchadores, que entrenan con el padre del primero, Mois¨¦s Llopart, se han ido al Teide. Hay demasiada responsabilidad en estos hombres, que dicen que no ganar¨¢n dos medallas, que ganar¨¢n tres y, si pueden, repetir¨¢n triunfo.Jos¨¦ Luis Gonz¨¢lez se fue a La Toja; a saber si no se le har¨¢ peque?a la isla al hacer una y otra vez los 1.500 metros. Y en Alicante, donde vive habitualmente, est¨¢ Domingo Ram¨®n, el de los 3.000 obst¨¢culos. En la tierra de los fondistas, Palencia, est¨¢ el oriundo Santiago de la Parte, entrenando por Gerardo Cisneros, seleccionador nacional de fondo y cross. En La Rioja, Juan Carlos Trespaderne.
Caso curioso es el de otro maratoniano, Ricardo Ortega, m¨¦dico de profesi¨®n, que ejerce y se entrena en Toledo. Francisco Vargas se fue a Granada, bajo las ¨®rdenes de Santiago Pecete. El hombre de 4x400, Juan Jos¨¦ Prado, se fue a Guip¨²zcoa. Particip¨® el pasado mi¨¦rcoles en un control en Madrid donde hizo 47.03, la tercera mejor marca del a?o. Ese mismo d¨ªa se fue a San Sebasti¨¢n y entrena en Anoeta, la pista de las marcas bajas.
El director t¨¦cnico de la selecci¨®n espa?ola, Carlos Gil, entrena en Salamanca a Antonio S¨¢nchez Mu?oz, un pupilo que tiene la segunda mejor marca del a?o en 400 y es campe¨®n de Espa?a en 200 metros lisos.
Las mujeres est¨¢n cerca todas. Ic¨ªar Mart¨ªnez, entrenando con Arturo Oliver, est¨¢ en Madrid. Casi todas las tardes ve a Mar¨ªa Jos¨¦ Mart¨ªnez Pati?o, con su entrenador, Manuel Pascua, en la residencia Blume. La ¨²nica que anda un poco lejos de las dos es Pilar Fern¨¢ndez, vallisoletana, mujer casera que se entrena all¨ª mismo, a las ¨®rdenes de su marido.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.