Preocupaci¨®n espa?ola por las maniobras militares conjuntas de EE UU y Honduras

El Ministerio espa?ol de Asuntos Exteriores hizo p¨²blico ayer un comunicado en el que muestra su preocupaci¨®n por los "preparativos de la grandes maniobras aeronavales y terrestres, que comenzaron el viernes pasado y. se desarrollar¨¢n en Centroam¨¦rica durante los pr¨®ximos seis meses".El comunicado asegura que "Espa?a, que no es parte involucrada en el conflicto, no puede sin embargo mostrarse indiferente ante la crisis que asola la regi¨®n, ni ante el sufrimiento de sus pueblos. Por esa raz¨®n, el Gobierno espa?ol ha expresado reiteradamente su deseo de que prevalezca la paz y ha manifestado su apoyo sin reservas a las gestiones que, desde hace varios meses, vienen realizando los presidentes de los cuatro pa¨ªses del grupo de Contadora".

En la nota se expresa la preocupaci¨®n ante la posibilidad de que los ejercicios militares puedan entorpecer el clima que las gestiones del grupo han creado, "una vez que todas las partes han aceptado el marco, multilateral en el que resolver los. problemas de la regi¨®n y los contenciosos entre los Estados".

Entre tanto, se ha establecido un puente a¨¦reo entre Estados Unidos y Honduras, mediante el cual aparatos norteamericanos transportan grandes cantidades de material militar, en la primera fase del ejercicio militar, bautizado como Ahuas Tara II. Estas maniobras se prolongar¨¢n hasta marzo de 1984 y contemplan el supuesto t¨¢ctico de que un pa¨ªs extranjero, denominado Corinto, ha invadido Honduras, informa Efe.

El ejercicio se realizar¨¢ en tres fases principales, en la ¨²ltima de las cuales los soldados hondure?os actuar¨¢n solos, sin cobertura norteamericana, en una especie de ensayo general supervisado por asesores estadounidenses.

Por otra parte, el nuevo jefe de Estado Mayor del Ej¨¦rcito de Tierra de Estados Unidos, general John Wickham, ha manifestado que su pa¨ªs no tiene por qu¨¦ aumentar su actividad militar actual en Centroam¨¦rica. Sin embargo, se neg¨® a predecir cu¨¢l ser¨¢ la situaci¨®n en el futuro. Haci¨¦ndose eco de una frase del presidente Ronald Reagan, se?al¨® que "nunca se debe decir nunca" a una posible mayor actividad en la zona. Wickham descart¨® las consideraciones de su predecesor en el cargo, el general Edward Meyer, sobre la necesidad de tener en cuenta el "apoyo p¨²blico" para operaciones militares en el extranjero.