Marco Ferreri, director de cine

Una revista pornogr¨¢fica tiene la culpa de que el director italiano Marco Ferreri ruede su primera pel¨ªcula publicitaria en Montealegre, un pueblo vallisoletano del que procede la familia de Jorge Guill¨¦n y que est¨¢ presente en la obra del poeta. Ferreri eligi¨® para un spot publicitario de un nuevo modelo de autom¨®vil el mismo castillo que luce, junto a su puerta, una l¨¢pida con los versos que el autor de C¨¢ntico le dedic¨®.

La pac¨ªfica vida de Montealegre, una localidad vallisoletana de menos de 500 habitantes, situada en las cercan¨ªas de los montes Torozos, se ha visto alterada por la llegada de unos tipos raros, que han tornado su famoso castillo por asalto y han colocado junto a ¨¦l c¨¢maras, focos, cables y otros aperos. Los dirige un sesent¨®n cachondo y simp¨¢tico que lleva una extra?a barba, tiene una lustrosa barriguilla y mantiene permanentemente un pitillo colgando de los labios. Responde al nombre de Marco Ferreri y los vecinos de Montealegre han sabido enseguida por su alcalde, Pedro Escribano, que se trata de un famoso director de cine italiano. Ferreri ha ca¨ªdo bien en el pueblo, come en la taberna, habla con quien se pone a tiro y se r¨ªe a carcajadas con las canciones que le canta en italiano el "alcalde cantor", como llama a Pedro Escribano.Lo curioso del caso es que Ferreri eligi¨® este sobrio pueblecito castellano de tierra de campos para su priniera incursi¨®n en el mundo de la publicidad porque vio su castillo en una revista pornogr¨¢fica que hoje¨® en el avi¨®n que le conduc¨ªa desde Bagdad a Roma. El director de El cochecito ten¨ªa que rodar un espacio propagand¨ªstico del coche en Irak, "pero all¨ª andan a tiros, est¨¢n en guerra y no consider¨¦ que aquellos lugares fueran los propicios, as¨ª que me volv¨ªa a Roma para estudiar un nuevo emplazamiento cuando me dio por mirar una revista porno que hab¨ªa en el avi¨®n. Me sorprendi¨® encontrar este castillo, me gust¨® y nos vinimos".

Es la primera vez que el autor de La grand bouffe rueda publicidad. "Hago esto porque tambi¨¦n lo han hecho Antonioni y Sergio Leone, es una experiencia nueva con el coche como excusa: pues mira, no s¨¦ si ¨¦ste es un campo interesante para un realizador o no lo es". Ferreri rodaba un plano en el que el coche sal¨ªa velozmente de un costado del castillo, daba una vuelta y penetraba en la fortaleza. La c¨¢mara estaba instalada de tal forma que no se recog¨ªa la placa dedicada a Jorge Guill¨¦n. Su equipo hab¨ªa colocado una coraza de madera convenientemente envejecida sobre la puerta met¨¢lica del castillo para simular un portal¨®n medieval. En el pueblo esperan que los italianos no se lleven esas maderas "porque el castillo queda m¨¢s bonito con esa puerta que han puesto que con la que ten¨ªa". Parece que Ferreri no tendr¨¢ inconveniente en regalarles el ingenio.

Marco Ferreri confirm¨® que est¨¢ preparando una nueva pel¨ªcula con Hanna Schygulla y Ornella Mutti como protagonistas. "Tratar¨¢ sobre las relaciones de dos mujeres: no, no ser¨¢ un cine intimista, mis pel¨ªculas nunca lo han sido ni tampoco lo ser¨¢n ahora. Voy a contar la historia de dos mujeres que quieren vivir en un mundo fant¨¢stico entre los supermercados".

Ferreri sonr¨ªe y pone sus ojos un poco m¨¢s tristes que de costumbre cuando se le pregunta si va a volver a rodar en Espa?a. "Ah, la Espa?a, la Espa?a se fue con mi juventud".