El presidente franc¨¦s propone el establecimiento de una federaci¨®n en Chad para poner fin al largo conflicto civil

Pocas horas antes de que el ministro de Densa, Charles Hernu, llegara a Yamena piara inspeccionar las tropas francesas, el presidente Fran?ois Mitterrand declaraba al vespertino Le Monde que la forma en que Francia est¨¢ interviniendo en el conflicto chadiano ha evitado una guerra entre Par¨ªs y Tr¨ªpoli o la toma de Yamena por soldados libios. Las esperadas palabras del jefe del Estado galo sientan oficialmente las bases de la pol¨ªtica de Francia en Chad, donde Par¨ªs propugna la b¨²squeda de una soluci¨®n negociada entre las partes en conflicto que podr¨ªa conducir al establecimiento de una federaci¨®n en el pa¨ªs africano. Miterrand advierte al coronel Gadafi que "ser¨ªa imprudente por su parte especular con el desgaste del tiempo".

Lo que no queda muy claro despu¨¦s de leer la entrevista publicada por el diario parisiense -corregida minuciosamente por Mitterrand y matizada en algunos p¨¢rrafos significativos- es si los paracaidistas franceses participar¨ªan directa o indirectamente en un eventual ataque a Faya-Largeau, el oasis del Norte en poder de las tropas prolibias del ex presidente Uedei, como es el deseo de Hiss¨¨ne Habr¨¦. Para Mitterrand, la presencia del contingente galo en Chad ha sido determinante en el cese de los combates.Los casi 3.000 soldados de ¨¦lite enviados por el Gobierno de Par¨ªs, que "no participan directamente en la guerra civil chadiana", declara Mitterrand, se encuentran bajo las ¨®rdenes de Yamena, aunque sea el Ministerio galo de Defensa y El El¨ªseo quienes decidan en ¨²ltima instancia. En ese sentido, el presidente evit¨® un no categ¨®rico a la participaci¨®n francesa en la sugerida reconquista de la ciudad de Faya-Largeau.

"Nuestras tropas, que no dependen nada m¨¢s que de nosotros, no pueden ser consideradas como una fuerza auxiliar", dijo Miterrand a los entrevistadores de Le Monde. "Dado que nuestra presencia se juzga necesaria, hay que tener presente que Francia no ir¨¢ m¨¢s que donde quiera ir, en bien del inter¨¦s com¨²n que entendemos servir".

Al ser preguntado si Par¨ªs se opondr¨ªa a un ataque hacia el Norte de las tropas de Hiss¨¨ne Habr¨¦, Mitterrand insiste en se?alar que la presencia de las tropas francesas debe "ayudar a Chad a reencontrar la paz, no a aumentar sus dificultades. A pesar de todo, los paracaidistas disponen de medios para progresar r¨¢pidamente, si es necesario, hacia otros objetivos..." lo que ha de ser interpretado como un serio aviso al coronel Gadafi.

"Si hubi¨¦ramos actuado de otra manera", asegura el presidente Mitterrand, "Francia estar¨ªa en guerra contra Libia desde hace varias semanas, o el Ej¨¦rcito libio estar¨ªa en Yamena". El dispositivo puesto en pie por Par¨ªs "permite la respuesta militar y de manera r¨¢pida a una nueva ofensiva".

Mitterrand rechaza la idea de que la partici¨®n de facto actual de Chad -el Norte, en manos de Uedei; el Sur, en las de Habr¨¦- pueda convertirse en una situaci¨®n consentida. El presidente franc¨¦s prefiere hablar de federaci¨®n, ya que una partici¨®n provocar¨ªa la "desestabilizacion de ?frica entera".

Negociaci¨®n multilateral

"Una federaci¨®n podr¨ªa responder mejor a la realidad que la unidad formal siempre rota", confiesa Fran?ois M¨ªtterrand aunque condiciona esa alternativa a la voluntad del pueblo de Chad, consultado en refer¨¦ndum. La posibilidad de negociaciones; exclusivas entre los dos antagonistas en Chad le parece irreal a Mitterrand, por lo que se inclina por una negociaci¨®n ampliada, con participaci¨®n de representantes de la OUA, de la ONU y "cualquier otro interlocutor" que pudiera contribuir a una soluci¨®n pac¨ªfica. Y, desde luego, de Francia.

La prioridad de cualquier proceso negociador deber¨ªa ser, en opini¨®n del presidente franc¨¦s, la recuperaci¨®n "de la unidad, de la soberan¨ªa y de la independencia de Chad, y la retirada de los ej¨¦rcitos extranjeros". Un pacto de no agresi¨®n entre los pa¨ªses de la regi¨®n es tambi¨¦n considerado importante por el jefe del Estado galo, para quien Libia est¨¢ buscando en el conflicto "la expansi¨®n, o al menos garantizar su frontera sur". La franja de Auzu, anexionada por Gadafi en 1973, ser¨ªa, sin embargo, "un asunto bilateral a discutir entre Tr¨ªpoli y Yamena".

Frangois Mitterrand afirma no haber ignorado a Washington a lo largo del conflicto, aunque El El¨ªseo considera que la Casa Blanca se ha preocupado demasiado por el tema chadiano. "Nadie hab¨ªa pedido a los norteamericanos el env¨ªo de los AWACS o de los F-15", puntualiza el presidente, "aunque cuando nos han comunicado lo que sab¨ªan sobre movimientos (de soldados) libios nosotros se lo hemos agradecido". Mitterrand cree que "todo vuelve a estar en regla" entre Par¨ªs y Washington despu¨¦s de la retirada por EE UU de sus aviones esp¨ªas.