Joan Monle¨®n
Un rostro del espect¨¢culo que se transforma en cl¨¦rigo, moro o cantante
El estreno de la ¨²ltima pel¨ªcula de Carles Mira, Que nos quiten lo bailao, permite que el rostro y el generoso cuerpo del actor valenciano Joan Monle¨®n se contemple simult¨¢neamente en las pantallas de Madrid, Valencia y, pr¨®ximamente, Barcelona. La popularidad de Monle¨®n, con 14 filmes en el bolsillo, varios discos de su orquesta fallera Pavesos, representaciones teatrales y publicidad en televisi¨®n, se sit¨²a en un buen momento. Exactamente en la curva de madurez de una persona que a los 47 a?os puede elegir su trabajo, despu¨¦s de dejar bien claro que "me interesa hacer espect¨¢culo, levantar la moral al pueblo para que tenga ganas de vivir y trabajar". Luego, el soporte art¨ªstico podr¨¢ ser transformarse en cl¨¦rigo, papa Luna, gangster, cantante o en el moro Alkanfor de la pel¨ªcula de Mira. Son personajes de una misma fiesta vitalista.
Ser actor en Valencia requiere un insistente esp¨ªritu viajero, porque las escasas ofertas de trabajo se compensan con desplazamientos a Barcelona y Madrid en busca de contratos. "El t¨®pico de Valencia, tierra de artistas, es eso, un t¨®pico, porque no se traduce en nada al faltar productores de cine, empresarios que ofrezcan trabajo", afirma Monle¨®n. "El panorama no esboyante, con un teatro principal que no abrir¨¢ hasta diciembre. Muchos optan por emigrar. Yo a¨²n me salvo con la can?¨®, que me permite hacer giras por ah¨ª, sobre todo en Catalu?a, porque en Valencia se nos considera conflictivos por cantar en valenciano, cuando lo conflictivo deb¨ªa ser cantar en castellano". El ejemplo de La Trinca cantando en castellano parece loable a Monle¨®n en esta tesitura "porque supone vender cuatro veces m¨¢s de discos, sin cambiar su ideolog¨ªa. Si no hay ayuda, la gente tiene que abrirse camino". Y es que le viene grande el traje de resistentes que otorg¨® el p¨²blico a los cantantes en anteriores momentos pol¨ªticos.La encarnaci¨®n del moro Alkanfor determin¨® su oportunidad de darse a conocer en Madrid y reafirmarse en Valencia y Barcelona. "En esta pel¨ªcula pueden contemplarme desmadrado, que es lo que me gusta. Hago no s¨®lo de actor. Tambi¨¦n muestro otras facetas, otras facetas de bestia. Creo que es una burrada, pero se trata de que la gente se divierta con esas im¨¢genes ins¨®litas".
Aunque los actuales regentes de la cultura, dentro y fuera de la ciudad del Turia, no participan de esta est¨¦tica hortera o del humor iconoclasta, muy de la tierra. "Es gente muy aburrida la que dirige la cultura. S¨®lo piensan en Shakespeare, en lbsen y se olvidan de la cultura popular, o populachera. En la pel¨ªcula de Mira queda muy claro que en Valencia lo que nos gusta es disfrazarnos, sea de moro, de cristiano o de travesti.
Yo hice lo mismo que ese se?or que coge el traje de su se?ora, se va a la cabalgata y se disfraza. Y los hijos van detr¨¢s. La gente de Llutxent -donde se rod¨® el filme- cuando se vest¨ªa de moro al cuarto de hora no extra?aba el traje, como si lo hubiera llevado toda la vida". Frente a los intelectuales de la cultura, argumenta que "cultura es todo, es la forma de celebrar un pueblo sus fiestas. Yo baso mis espect¨¢culos en lo que veo en los pueblos. La gente se identifica conmigo porque hago lo que ellos hacen o quisieran hacer. Yo he visto acabar paellas con un se?or baj¨¢ndose los panta lones para ense?ar el culo o la se?ora mostrando ¨¦l color de la bragas".
Monle¨®n ha hecho de gangster con el humorista Eugenio. Empez¨® interpretando curas, el cura de El virgo de Visenteta, de Vicente Escriv¨¢, el papa Luna de Con el culo al aire. Tambi¨¦n intepret¨® en El vicari d'Olot un obispo. "Me falta hacer de Esp¨ªritu Santo", corfiesa risue?o. Luego pas¨® como director de banco, padre de Zipi yZape y Don Juan Tenorio, con Mary Santpere, en teatro. "Quiero hacer de todo para evitar que me encasillen". Levant¨® el music-hall en el teatro Alkazar de Valencia, pero la falta de apoyo oficial paraliz¨® definitivamente la funci¨®n de este escenario.
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