Francesc Bellmunt rueda en Barcelona una historia de amor y curas
La industria cinematogr¨¢fica catalana parece tomar unas dimensiones hollywoodienses en la perspectiva oto?al que se nos echa encima. Tres filmes empiezan a rodarse en Barcelona en poco m¨¢s de tres semanas. Cada uno de los realizadores, Francese Bellmunt, Vicente Aranda y Gonzalo Herralde, se hallan ocupados en buscar los ¨²ltimos detalles de escenarios y decorados. Bellmunt se ha visto obligado a retrasar el inicio del rodaje porque a¨²n no hab¨ªa fichado a su protagonista femenina. Empez¨® la semana pasada y el argumento, en tono jocoso, gira sobre amores y cl¨¦rigos.
"Nos hemos visto obligados incluso a poner anuncios en los peri¨®dicos. La verdad es que me parece que no hay actores. Debe de ser un problema generacional. Ah¨ª es nada el ejemplo del grupo que componen Dagoll Dagom. No hay problema cuando se trata de encontrar los tipos m¨¢s variados entre la gente de esta edad, alrededor de los 30 a?os. Pero entre los m¨¢s j¨®venes es todo un problema".A los t¨¦cnicos, ayudantes de producci¨®n, scripts, foquistas, montadores y auxiliares, decoradores y el considerable etc¨¦tera de especialistas que participan en la producci¨®n de un filme, esta acumulaci¨®n de tres rodajes no les parece lo mejor, puesto que no les permite estar en todos ellos y se ven obligados a escoger y a limitarse. Incluso las productoras han tenido que dirigirse a Madrid para encontrar quien sustituyera a los escasos t¨¦cnicos catalanes, la mayor¨ªa de ellos casi exclusivamente dedicados al cine publicitario.
El primero de estos tres rodajes barceloneses es el del filme de BelImunt. Empez¨® el pasado jueves en de Vall Park, un polideportivo situado en la carretera que va de Barcelona a Sant Cugat.
La historia religiosa del filme de Bellmunt, Pa d`angel, es un proyecto antiguo: "Esta historia la ten¨ªa aparcada desde mi adolescencia", dice el director. Pero la reciente visita papal a Espa?a ha removido temas que pod¨ªan parecer caducos a alguien que se considerara laico, como es el caso de Bellmunt. El t¨ªtulo inicial deb¨ªa de ser Hostia pero por razones econ¨®micas, "sobre todo por las exigencias de los exhibidores del norte y del sur de la pen¨ªnsula", concreta Bellmunt, se cambi¨® tan significativa palabra por Pa d'angel. En catal¨¢n, pa d`angel es una denominaci¨®n popular de la oblea, que se utiliza precisamente para fabricar las hostias.
La hija de un amigo
Ni el t¨ªtulo definitivo, ni Hostia, ten¨ªan el car¨¢cter habitual de blasfemia con que se le suele revestir, Simplemente se pretend¨ªa "jugar con la contradicci¨®n que incluye la propia palabra", contesta BelImunt. "Se dice que hay un cierto rebrote del sentimiento cat¨®lico a partir de la visita del Papa. No se si eso es exactamente as¨ª, pero lo que s¨ª es verdad es que la publicidad que se mont¨® alrededor de tal acontecimiento, una publicidad claramente agresiva, obligaba a la participaci¨®n a favor o en contra".Hace ya dos a?os que el argumento estaba en la mente de BelImunt: "Sucedi¨® que la hija de un amigo m¨ªo, que ten¨ªa unos 16 a?os, empez¨® a tener veleidades religiosas. Entre ambos se desataron fuertes incomprensiones generacionales, y adem¨¢s su padre era de izquierdas". En aquel momento empez¨® a elaborar un gui¨®n con Juanjo Puigcorber, coguionista y protagonista de sus anteriores filmes, L?orgia y La quinta del porro. "En primer lugar se trataba de pensar y recoger todos los t¨®picos que ten¨ªamos archivados, ideas m¨¢s o menos v¨¢lidas sobre curas e instituciones eclesi¨¢sticas. Despu¨¦s se trat¨® de plantear en la ficci¨®n lo que realmente sucede, pero que hasta entonces no eramos capaces de detectar".
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