La herencia maldita
Llamo herencia maldita a una serie de malos usos y malas artes de los que el franquismo nos dej¨® impregnados hasta los tu¨¦tanos. Uno de ellos es el del globo sonda. Un buen d¨ªa, alguien que parece despistado, pero siempre persona oficial, lanza unas palabras que a todos nos parecen il¨®gicas. Si no hay reacci¨®n fuerte en contra (que cada vez hay menos), alguien m¨¢s oficial a¨²n las repite al poco tiempo, y si sigue sin producirse la contestaci¨®n masiva, al poco tiempo lo que parec¨ªa il¨®gico aparece publicado en el BOE.La televisi¨®n ayuda mucho al globo sonda. Aparecen en la pantalla noticias que parecen oficiales y definitivas, nadie se molesta en aclarar si son rumores o la opini¨®n de un solo se?or. Si no efectuamos un seguimiento tenaz dela noticia en la Prensa, y a veces aun haci¨¦ndolo, nos quedaremos sin saber la oficialidad de la noticia, hasta que un buen d¨ªa aparece en el BOE.
Tal me pasa a m¨ª con la anunciada subida del agua, la bajada de pensiones, el tema de la OTAN y tantos m¨¢s.
Y hablando de la subida del agua., se me ocurren unas consideraciones. Los que vivimos los a?os del hambre (no para todos) sabemos mucho de estraperlo. Cuando las cosas escasean, se les sube el precio.
El consumo sigue siendo el mismo y siguen escaseando, pero el que vende se enriquece. As¨ª, el Canal vender¨¢ la mitad de agua, pero los beneficios ser¨¢n los mismos. Y quedar¨¢ establecido un principio de justicia. El que tenga dinero se ba?ar¨¢, a?adir¨¢ a su whisky todo el agua que quiera y regar¨¢ sus tiestos. El que no tenga dinero no tendr¨¢ ni el consuelo de beber en
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una fuente p¨²blica, porque ya no existen.
Un principio de igualdad aconseja que cuando algo escasea se raciona. Equitativamente y por igual para todos. El sistema no es bueno, pero al igual que la democracia, es el menos malo. Lo dem¨¢s, se diga lo que se quiera y lo haga quien lo haga, es volver al estraperlo.
?Y c¨®mo luchar contra el globo sonda? Creo que s¨®lo hay un remedio: protestar fuerte y airadamente con todos los medios al alcance cada vez que alguien saque la lengua a paseo en cosas que nos parecer¨¢n il¨®gicas, pero que tienen un fin y un prop¨®sito bien definidos. Y en esto, como en la defensa de lalibertad y la democracia, la Prensa .debe jugar un papel muy fuerte. Hajugado, est¨¢ jugando y debe jugar a¨²n m¨¢s, porque en el envite nos va mucho a todos. Quiz¨¢ entonces los espa?oles empiecen a comprar de verdad el peri¨®dico./
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