Las conversaciones sobre Hong Kong, afectadas por la ca¨ªda del d¨®lar local

Las negociaciones entre China y el Reino Unido a prop¨®sito de Hong Kong se reanudar¨¢n el pr¨®ximo jueves, d¨ªa 22, en una atm¨®sfera de nerviosismo provocada por la ca¨ªda del d¨®lar de Hong Kong y por las recientes declaraciones de un alto funcionario chino que descart¨® completamente la posibilidad de que Londres contin¨²e manteniendo alg¨²n papel en la administraci¨®n de la colonia a partir de 1997, fecha en la que expira el contrato de cesi¨®n de los llamados Nuevos Territorios.A finales de la semana pasada el d¨®lar de Hong Kong cruz¨® la barrera psicol¨®gica de los ocho d¨®lares norteamericanos, cotiz¨¢ndose a 7,95, la cifra m¨¢s baja de todos los tiempos.

La ca¨ªda de la divisa coincidi¨® con un informe oficial seg¨²n el cual los resultados econ¨®micos de la colonia ser¨¢n este a?o notablemente inferiores que los de fechas precedentes: disminuci¨®n del 15% en el sector privado de la construcci¨®n y crecimiento cero en el gasto privado.

Desde que la primera ministra brit¨¢nica, Margaret Thatcher, visit¨® Pek¨ªn el mes de septiembre de 1982 para fijar la apertura de negociaciones y el calendario a seguir, la moneda de Hong Kong ha sufrido frente a la norteamericana una devaluaci¨®n efectiva de casi un tercio de su valor. El optimismo inicial ha dejado paso a la preocupaci¨®n, seg¨²n se va conociendo la posici¨®n oficial del Gobierno chino.

Aunque las negociaciones se desarrollan, por mutuo acuerdo, en el m¨¢s completo secreto, parece cada vez m¨¢s evidente que China no tiene el menor prop¨®sito de permitir en forma alguna la presencia del Reino Unido en su territorio un d¨ªa m¨¢s de lo estrictamente imprescindible. El ¨²ltimo jarro de agua fr¨ªa lo constituyen las declaraciones de un alto funcionario del Ministerio de Asuntos Exteriores, Zhou Nan, calificando de "falta de realismo y de conocimientos jur¨ªdicos" la posibilidad de que China autorice la administraci¨®n conjunta de Hong Kong a partir de 1997. "Soberan¨ªa y administraci¨®n son cosas inseparables", afirm¨® Zhou Nan. "Las personas que en 1983 contin¨²an acerc¨¢ndose a China con la mentalidad colonialista del siglo XIX carecen completamente de sentido de la realidad y de la historia".

En esta ocasi¨®n no son los brit¨¢nicos quienes piden realismo y cooperaci¨®n, sino que es Pek¨ªn quien reclama a Londres que ponga los pies en el suelo: Hong Kong pasar¨¢ a formar parte de China inexorablemente, y no hay siquiera que discutir el problema. "Todo puede tener soluci¨®n", afirmaba el funcionario chino, "si el Reino Unido mantiene una actitud razonable y cooperadora. Cooperar quiere decir, sobre todo, mantener la tranquilidad econ¨®mica durante el per¨ªodo de transici¨®n, repatriar las divisas de Hong Kong depositadas actualmente en los bancos de Londres y controlar la inflaci¨®n, que ser¨¢ superior en 1983 al 11,8%.

Aunque el contrato de cesi¨®n de los Nuevos Territorios no expira hasta dentro de 14 a?os, parece que el Gobierno chino no quiere eternizar las discusiones, para evitar precisamente movimientos de p¨¢nico, y que querr¨ªa dejar solventados los problemas principales en un plazo m¨¢ximo de un a?o, a contar desde ahora.