Areilza y Carrillo coinciden en se?alar que Espa?a vive a¨²n la transici¨®n pol¨ªtica
La transici¨®n hacia la plena democracia en Espa?a no ha concluido a¨²n. As¨ª lo afirmaron ayer, por separado, Jos¨¦ Mar¨ªa de Areilza y Santiago Carrillo, en los actos de presentaci¨®n de sus respectivos libros sobre los a?os posteriores a la muerte de Franco.Ambos trabajos inauguran lo que previsiblemente constituir¨¢ una constante editorial en este oto?o, ya que, seg¨²n diversos medios consultados por EL PAIS, se espera el inminente lanzamiento de al menos otras 10 obras sobre esta ¨¦poca.
Francisco Umbral, en el acto de presentaci¨®n del libro de Carrillo -al que no asistieron ni el secretario general del PCE, Gerardo Iglesias, ni ninguno de sus seguidores-, compar¨® las marginaciones pol¨ªticas de Carrillo en la izquierda y la de Areilza en la derecha. "Santiago Carrillo es la estatua y el mendigo del PCE. Es una causa perdida". M¨¢s tarde, Carrillo rechazar¨ªa t¨¢citamente este pase a la historia proponiendo una "opci¨®n revolucionaria de amplio alcance".
El ex secretario general del PCE neg¨® que la iniciativa privada sea capaz de dar los pasos necesarios para modernizar el pa¨ªs, lo que significa que la transici¨®n no ha concluido. "Afirmar que la transici¨®n ha terminado es una ligereza porque, desde mi ¨®ptica, no puede darse de verdad por terminada mientras el Rey siga siendo la bisagra que mantiene un cierto equilibrio entre el sistema parlamentario y lo que pudi¨¦ramos llamar los aparatos coercitivos del Estado".
En su libro, Memoria de la transici¨®n, Carrillo denuncia un pacto entre el PSOE y la derecha, "entre Felipe y Fraga, que ven¨ªa cuajado desde las legislaturas anteriores, desde las batallas contra Su¨¢rez". El pacto, seg¨²n Carrillo, tratar¨ªa de instalar un sistema parlamentario bipartidista.
El ex dirigente del PCE, hablando ante dos centenares de personas, entre los que se encontraban algunos de sus seguidores en los comit¨¦s ejecutivo y central, como Jaime Ballesteros, Juli¨¢n Ariza o Adolfo Pi?edo, atac¨® a la Administraci¨®n Reagan consider¨¢ndola tambi¨¦n culpable por el derribo del avi¨®n surcoreano. Contando con la presencia de representantes de la embajada sovi¨¦tica, aunque no del m¨¢ximo nivel, no rechaz¨® expresamente las acusaciones que le presentan como actual defensor de la pol¨ªtica externa del presidente sovi¨¦tico Andropov, sino que aleg¨® que tambi¨¦n varios partidos socialdem¨®cratas europeos se muestran favorables a esta pol¨ªtica.
Por su parte, Jos¨¦ Mar¨ªa de Areilza, que tambi¨¦n ayer present¨® su libro Cuadernos de la transici¨®n, dijo que no cree que la transici¨®n propiamente dicha haya terminado, "porque no est¨¢ plenamente consolidado el proceso democr¨¢tico". El conde de Motrico admiti¨® que se equivoc¨® al valorar la duraci¨®n de Adolfo Su¨¢rez en el poder, pero no en el planteamiento de lo err¨®neo de la pol¨ªtica del ex presidente del Gobierno de UCD al crear un partido desde el poder.
Sin embargo, en ninguna de las dos presentaciones se destac¨® la figura de Adolfo Su¨¢rez, quien, pese a ello, sigue constituyendo el principal objetivo de los cazadores de memorias de todas las editoriales.
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