La asamblea mundial de directores de cine acusa a la presi¨®n multinacional
Incluso por encima de los pron¨®sticos, las actas de Madeira, aprobadas por aclamaci¨®n entre 150 directores de cine provenientes de 48 pa¨ªses, han situado en primer lugar las conclusiones referentes a la situaci¨®n del cine dominado frente a la del cine dominante. Esta ponencia, no recogida en el programa inicial, fue incluida por iniciativa de los cineastas del Tercer Mundo.
Las actas de Madeira comienzan se?alando que "el cine mundial refleja una dominaci¨®n casi total de las empresas multinacionales, hegemon¨ªa que provoca una dependencia cultural, ideol¨®gica, econ¨®mica y tecnol¨®gica" y que "atrofia la identidad de todas las cinematograf¨ªas, incluidas las independientes en los pa¨ªses dominantes", que "pervierte los c¨®digos de comunicaci¨®n, trivializa el lenguaje, uniforma los productos y aliena al espectador".Los aspectos referidos al derecho de autor, la libertad de expresi¨®n y la absoluta responsabilidad del director en la terminaci¨®n de su pel¨ªcula son, entre otros, los aspectos destacables de las restantes ponencias. Fue anulada la que se form¨® para analizar la responsabilidad p¨²blica del director de cine: una sesi¨®n catastr¨®fica, ya que hasta los propios participantes de la comisi¨®n denunciaron las maniobras de algunos de ellos para imponer una vaga declaraci¨®n de defensa de los derechos humanos, probablemente inspirada por la UNESCO. Hasta Jack Lang, el ministro de Cultura, franc¨¦s que clausur¨® con un moroso discurso la reuni¨®n de Madeira, hizo referencia a lo sucedido. Pero fue el cineasta Joris Ivens quien mejor sintetiz¨® la protesta al sorprenderse de que, directores procedentes de lugares tan conflictivos pretendieran una declaraci¨®n de buenas intenciones y no se esforzaran ante todo en realizar pel¨ªculas que defiendan esos derechos humanos.
Lang, protestado
Lang se apropi¨® de la asamblea presumiendo en su larga intervenci¨®n de los avances conseguidos en la cinematograf¨ªa francesa bajo su gesti¨®n ministerial. El acontecimiento fue protestado al d¨ªa siguiente por algunos cineastas portugueses, que se sorprend¨ªan de que no fuera su ministro quien hubiera clausurado la hist¨®rica asamblea. Naturalmente, el ministro franc¨¦s apoy¨® tambi¨¦n las declaraciones fundamentales de la asamblea.No se ha creado un comit¨¦ que prolongue a niveles oficiales las conclusiones de los cineastas. Es probable que sea la FERA (Federaci¨®n Europea de Realizadores de lo Audiovisual) quien tenga que encargarse de la custodia de las actas.
De otra forma, la asamblea de Madeira s¨®lo habr¨ªa servido para sintetizar, en un esfuerzo com¨²n, las eternas y justas quejas de los autores de los filmes que consumimos diariamente..., si nos dejan las multinacionales.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.