"Reagan no podr¨¢ hacer el milagro de multiplicar los cubanos en Granada"
El vicepresidente cubano, Carlos Rafael Rodr¨ªguez, de 70 a?os, desmiente los datos presentados por el presidente norteamericano, Ronald Reagan, sobre la presencia cubana en Granada. "Cristo hizo el milagro de multiplicar los panes y los peces, pero Reagan no podr¨¢ hacer el milagro de multiplicar los cubanos en Granada". Carlos Rafael Rodr¨ªguez concedi¨® ayer una entrevista a EL PA?S en una breve escala en Madrid procedente de Estocolmo.
Pregunta. ?Cu¨¢l es la posici¨®n cubana ante los argumentos utilizados por Reagan para justificar la invasi¨®n de Granada?Respuesta. Lo m¨¢s singular de la situaci¨®n es que el presidente Reagan ha ido cambiando los motivos que, supuestamente, legitimar¨ªan la intervenci¨®n norteamericana. Primero habl¨® de salvar las vidas de los ciudadanos norteamericanos. Ha quedado demostrado que ¨¦stos nunca estuvieron en peligro. En segundo lugar, habl¨® de salvar vidas humanas no amenazadas, y para ello ha sacrificado las vidas de decenas de granadinos, de algunas decenas, al parecer, de trabajadores cubanos y tambi¨¦n de algunas decenas de j¨®venes norteamericanos cuyas vidas no son menos preciosas que las dem¨¢s. De modo que Reagan, irresponsablemente, ha introducido el caos y el desorden, hablando de restablecer el orden contra el caos, ha enviado a la muerte a sus propios compatriotas, ha pisoteado el derecho internacional y ha prescindido del consejo de sus propios e ¨ªntimos aliados como la se?ora Thatcher.
P. Seg¨²n la ¨²ltima cifra dada por fuentes norteamericanas, el n¨²mero de cubanos en Granada es superior a 1.000, y a?aden que la mayor parte de ellos no son trabajadores, sino militares.
R. El Gobierno de Cuba no se oculta para afirmar que casi la totalidad de su poblaci¨®n adulta tiene la adecuada preparaci¨®n para la defensa. Pero, puedo asegurar que cuando ocurrieron los acontecimientos de Granada, y a partir de la muerte del primer ministro Bishop, los cooperantes cubanos recibieron instrucciones de congregarse en el lugar donde pernoctaban, que estaba cerca del centro de trabajo fundamental, que es el aeropuerto de Saint George (Punta Salinas). Cuando se produjo el desembar co norteamericano, nuestros trabajadores estaban all¨ª y ten¨ªan la instrucci¨®n clara y precisa de no disparar si no eran agredidos directamente.
P. Los jefes militares norteamericanos han denunciado la presencia de varios centenares de cubanos armados que dirigen desde las monta?as la resistencia contra la invasi¨®n.
'El n¨²mero total nunca alcanz¨® los 800'
R. No sabemos si se trata de una mentira o de una falsedad. Nos interesa mucho aclarar que no hay cientos de trabajadores cubanos, fuera de los que ya han resultado muertos, heridos o hechos prisioneros. Nuestras cifras son categ¨®ricas. El n¨²mero total de cubanos que hab¨ªa en Granada al producirse la invasi¨®n nunca alcanz¨® la cifra de 800. Adem¨¢s, 12 tripulantes de un avi¨®n que hab¨ªa llegado un d¨ªa antes de la invasi¨®n, y dos pasajeros de este avi¨®n, uno de los cuales, el coronel Tortolo, fue el que se hizo cargo de la direcci¨®n de la deflensa.de los compa?eros cubanos. De los 43 miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias,s¨®lo 22 eran oficiales que estaban all¨ª como asesores para la organizaci¨®n de las fuerzas armadas granadinas. Cristo hizo el milagro de multiplicar los panes y los peces pero Reagan no podr¨¢ hacer el milagro de multiplicar los cubanos en Granada. Tendr¨¢ que confesar ante la opini¨®n p¨²blica internacional que ha mentido o que ha sido enga?ado. Seg¨²n nuestras cuentas, es evidente que, si Estados Unidos ha dado ya cifras de los cubanos detenidos, lo que queda son, en estos momentos, 61 personas sin identificar. Si a estas 61 personas restamos los muertos, de los que tampoco Estados Unidos ha podido presentar una cifra oficial, (se ha estado hablando ¨²ltimamente de 45), quedar¨ªan por determinar donde est¨¢n una veintena de cubanos.P. Si no hay tantos cubanos como se dice, ?a que se debe el continuo refuerzo de las tropas norte americ anas y la dificultad para hacerse con el control total de la isla?
R. Podr¨ªa pensarse que se est¨¢ exagerando la naturaleza de la resistencia para justificar la permanencia de las tropas norteamericanas. Pero puede haber tambi¨¦n resistencia de los granadinos.
P. ?Se han establecido ya contactos para, la repatriaci¨®n de los prisioneros?
R. Se han establecido ya esas comunicaciones. Es prematuro hablar de la sustencia de las inismas, porque se est¨¢ todav¨ªa en negociaciones. El presidente Bentancur de Colombia y el presidente del Gobierno de Espa?a, Felipe Gonz¨¢lez han actuado conjuntamente para encontrar una manera de evacuar a los combatientes cubanos, pero el Gobierno norteamericano pone dificultades.
P. ?Los sucesos de Granada pueden dar pi¨¦ a pensar que tambi¨¦n es posible una intervenci¨®n norteamericana en Nicaragua?
R. Nosotros, en nuestros an¨¢lisis, cuando afirm¨¢bamos que hab¨ªa un eligro real de intervenci¨®n norteamericana en Centroam¨¦rica, se nos dec¨ªa que ser¨ªa absurdo que el presidente Reagan planeara una intervenci¨®n en Centroam¨¦rica puesto que ¨¦sta ser¨ªa repudiada por el conjunto de los pa¨ªses de Lat¨ªnoam¨¦rica, no tendr¨ªa el apoyo de sus aliados europeos y hasta encontrar¨ªa resistencia en los propios Estados Unidos. Y nosotros dec¨ªamos: Reagan es capaz de intervenir. Ahora se ha confirmado en Granada.
P. El Gobierno cubano ha dicho que, as¨ª como no ha acudido en ayuda de Granada, tampoco podr¨ªa ayudar a Nicaragua en caso de ataque exterior.
R. M¨¢s o menos as¨ª, aunque no son las palabras usadas por el presidente. Fidel Castro, con una visi¨®n muy realista, cuando le preguntaron sobre ¨¦sto dijo que Cuba no es una gran potencia. Si Estados Unidos interviene en Nicaragua tomar¨ªa tambi¨¦n medidas de bloqueo que har¨ªan pr¨¢cticamente imposible nuestra presencia en Nicaragua.
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