Pantallas electr¨®nicas en clase: de las matem¨¢ticas al videojuego
Helena Murano, 17 a?os, espa?ola de clase media alta, no ha puesto ning¨²n nombre todav¨ªa al ordenador que utiliza en clase para estudiar Matem¨¢ticas y F¨ªsica desde el a?o pasado en el King's College de Madrid. Tanto ella como su compa?ero de mesa, el brit¨¢nico Corrado Anderson, consideran que la inform¨¢tica es algo muy serio; por eso, probablemente no han personalizado todav¨ªa los instrumentos que les proporcionan en color los gr¨¢ficos y simulaciones de conjuntos matem¨¢ticos.
Ellos y otros 30 chicos y chicas de este colegio, son de los pocos alumnos privilegiados que existen en Espa?a que tienen acceso desde el a?o pasado en su colegio de Ense?anza General B¨¢sica -en este caso, un colegio privado de car¨¢cter mixto, ya que est¨¢ unido a las instituciones educativas brit¨¢nicas- a la ense?anza de la inform¨¢tica y a la utilizaci¨®n de ordenadores en clase para estudiar determinadas asignaturas.
Tambi¨¦n hay en Espa?a otras experiencias de la ense?anza de la inform¨¢tica en los primeros a?os de la educaci¨®n. Por ejemplo, en el ¨¢mbito de la ense?anza p¨²blica estatal existe un centro de experimentaci¨®n en el Instituto madrile?o Cardenal Herrera Oria y otros intentos de profesores del instituto de Ciencias de la Educaci¨®n en Murcia, Santiago de Compostela y San Sebasti¨¢n. En Barcelona se celebr¨® el pasado mes de marzo el primer cursillo de inform¨¢tica b¨¢sica para ni?os. Su entidad patrocinadora, el Equipo de Inform¨¢tica Escolar Aplicada (EINA), contin¨²a avanzando en estas experiencias.
Ordenador frente a proferor
Para el director del King's College, Peter Stokes, el estudio de la inform¨¢tica en la ense?anza b¨¢sica es imprescindible. "De momento, nuestras cuatro horas semanales de clase de inform¨¢tica son opcionales, pero desear¨ªamos que todos los alumnos tuvieran un conocimiento general de qu¨¦ es un ordenador y c¨®mo se puede utilizar. Un segundo objetivo ser¨ªa la aplicaci¨®n del ordenador no s¨®lo a las Matem¨¢ticas sino tambi¨¦n a todas las materias de la educaci¨®n. Pero en ning¨²n caso pensamos que el ordenador vaya a sustituir a la relaci¨®n interpersonal con el profesor".Algunos alumnos del King's College y de otros centros educativos de Madrid practican sus clases de inform¨¢tica en otro centro, el King's Computer Centre, que imparte, clases pr¨¢cticas por primera vez desde el pasado mes de septiembre para alumnos de 8 a 18 a?os. El director del centro, Francisco S¨¢ez, est¨¢ ultimando un proyecto de introducci¨®n de ordenadores en las guarder¨ªas infantiles.
En el King's Computer Centre, el ni?o comienza a familiarizarse con el ordenador y con las capacidades que ¨¦ste tiene de construir programas. Los alumnos hacen operaciones matem¨¢ticas, gr¨¢ficos, videojuegos e incluso componen m¨²sica. Uno de los ¨²ltimos programas que ha construido una ni?a de nueve a?os fue una pieza de Bach que "cant¨® el ordenador" sobre la base de los datos de una partitura.
En las jornadas sobre Inform¨¢tica y evoluci¨®n de la sociedad, celebradas recientemente en Bilbao, los especialistas se mostraron de acuerdo en la necesidad de que se introduzca definitivamente el ordenador en la escuela, "porque los ni?os ya se han familiarizado con los microprocesadores en sus casas o en los lugares de juego y de recreo. El sentido com¨²n nos dice que los ni?os pasan la mayor parte de su tiempo con ordenadores personales, por eso hay que ayudarles a saber utilizarlos, pero tambi¨¦n a no dejarse dominar por la magia de los mismos".
Algunos expertos, como Andr¨¦ Danzin, fueron todav¨ªa m¨¢s lejos cuando dijeron que ya no tiene sentido ense?ar cosas sobre Cervantes o Racine a unos chicos que viven en la calle una vida de ficci¨®n cient¨ªfica.
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