De armas y de ni?os
Un defecto lateral de la carrera armamentista es la inoperancia pr¨¢ctica de casi todo lo que se dice y se escribe. La diplom¨¢tica sueca Alva Myrdal (nacida en 1902) fue reiteradamente la delegada de su pa¨ªs ante sucesivas conferencias internacionales del desarme, entre otros distinguidos cargos, pero termin¨® por se?alar su escepticismo personal, sobre esas reuniones, a las que Estados Unidos y la Uni¨®n Sovi¨¦tica concurren por mera f¨®rmula.Fue la se?ora Myrdal quien se?al¨® que cada vez que ella concurre a una de esas conferencias, el armamento mundial se ha multiplicado por 10. En 1976, y en un libro que deber¨ªa estar mejor difundido (El juego del desarme), se?al¨® que los costes de la carrera armamentista son ruinosos para la econom¨ªa mundial y que podr¨ªan estar mucho mejor aplicados a la educaci¨®n, la salud, la vivienda y otras necesidades sociales. Pero lo ¨²nico valioso que consigui¨® Alva Myrdal, con esas y otras manifestaciones, fue que le dieran en 1982 el Premio Nobel de la Paz (compartido con el mexicano Alfonso Garc¨ªa Robles). No consigui¨® la menor reducci¨®n en armas, que tambi¨¦n aumentan despu¨¦s de cada Premio Nobel.
Otra frustraci¨®n parecida afect¨® a James Reston, muy prestigioso columnista norteamericano, que, por escribir en el New York Times, sabe muy bien que sus p¨¢rrafos le son extractados a Reagan cada ma?ana. En un art¨ªculo de especial violencia (luego reproducido en EL PA?S, noviembre, 1982) marc¨® que la mitad de la familia humana se va a la cama con hambre, mientras el mundo gasta 800.000 millones de d¨®lares anuales en armas. Tambi¨¦n apunt¨® su escepticismo sobre otros Gobiernos, no s¨®lo en extremos conservadores, ultra capitalistas y agresivos (Reino Unido, Jap¨®n, el Israel de Beguin), sino tambi¨¦n en las te¨®ricas posiciones socialistas de Mitterrand en Francia. "Una cantidad de bellas teor¨ªas est¨¢n siendo liquidadas por una sucesi¨®n de hechos brutales", escribi¨® Reston, en los mismos d¨ªas en que Felipe Gonz¨¢lez deb¨ªa decidir si Espa?a compraba 96 aviones FACA o s¨®lo 84 aviones FACA, o quiz¨¢ apenas 72 aviones FACA.
Otro inconveniente de la carrera armamentista es la rapidez con que hace perder la noci¨®n de la realidad. En el Libro del A?o de la Enciclopedia Brit¨¢nica (para 1982) se dedicaron 11 p¨¢ginas muy documentadas a un tema que all¨ª se llama ostentosamente defensa, por la reiterada astucia de evitar la palabra ataque. Esas y otras estad¨ªsticas de los hechos, igual que las del SIPRI en Suecia, son valiosos elementos para una discusi¨®n que ning¨²n gobernante quiere emprender. Tambi¨¦n son desv¨ªos de la simple realidad. Como las cifras norteamericanas son equ¨ªvocas y como las cifras sovi¨¦ticas son misteriosas, los expertos pueden discrepar en si el arsenal at¨®mico equivale a poder destruir el mundo 472 veces o s¨®lo 63, o unas ¨ªnfimas cinco veces. Pero todos esos c¨¢lculos est¨¢n hechos desde la Luna. Con que el mundo pueda ser destruido una sola vez, ya habr¨ªa motivo para alarmarse. Aunque las bombas no exploten, lo indicado y realista es comparar la carrera armamentista con los otros elementos de la sociedad. Eso fue hecho en un notable discurso pronunciado en la Academia Milton (de Boston, Massachusetts) en junio pasado. En la ceremonia de graduaci¨®n de las estudiantes femeninas, las palabras oficiales y tradicionales fueron pronunciadas por Marian Wright Edelman, quien preside el Fondo de Defensa de los Ni?os, con sede en Washington, y es tambi¨¦n una prominente activista en la cuesti¨®n de los dere-Pasa a la p¨¢gina 10
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chos civiles (ella misma es negra). Se?al¨® a las estudiantes que el mundo al que emergen est¨¢ al borde de la bancarrota moral y econ¨®mica, y que el presidente y el Congreso de Estados Unidos convierten los arados en espadas y dan buenas noticias a los ricos, a expensas de los pobres. Sus datos:
1. La Unicef (Fondo Internacional de las Naciones Unidas para la Infancia) dice que en cada d¨ªa de 1982 murieron 40.000 ni?os por desnutrici¨®n y enfermedades conexas. Mueren tres ni?os pobres por cada ni?o de familia rica. La pobreza es causa directa de 11.000 ni?os muertos en el a?o. En cinco a?os murieron m¨¢s ni?os que todas las bajas norteamericanas en Vietnam.
2. Diez ni?os mueren en el mundo, a cada minuto, por enfermedades infecciosas que pudieron ser prevenidas a tiempo. S¨®lo un 10% de los 80 millones que nacen cada a?o es vacunado contra esas enfermedades. Un 40% de la poblaci¨®n negra, urgana e infantil, entre los 5 y los 9 a?os de edad, no recibe vacunaci¨®n alguna, aunque eso s¨®lo costar¨ªa tres d¨®lares por persona. "?Qu¨¦ clase de mundo puede permitirse fa muerte innecesaria de 40.000 ni?os por d¨ªa?", pregunt¨®.
3. El Gobierno Reagan propuso recortar en 11 billones de d¨®lares los programas de apoyo a familias pobres.. El Congreso replic¨® haciendo cortes por s¨®lo nueve billones. Entonces, Reagan propuso para 1983 otros cortes por tres billones y medio.
4. Al tiempo que recortaba los fondos de bienestar social, Reagan y el Congreso redujeron impuestos a grandes empresas y a los respectivos empresarios por 750 billones de d¨®lares.
5. Reagan propuso que el Pent¨¢gono recibiera dos trillones de d¨®lares (es decir, dos millones de millones) para construir en siete a?os el mayor armamento de la historia.
6. Cuando Reagan lleg¨® a la presidencia (1980), el gasto en armamentos llegaba a 18 millones de d¨®lares por hora. En 1983, ese gasto subi¨® a 24 millones por hora. Con las propuestas de Ronald Reagan, subir¨¢ en el futuro hasta 28 millones por hora. "Los jefes del Partido Dem¨®crata quieren que el Gobierno s¨®lo gaste 27 millones por hora, y por eso son acusados de mostrarse blandos en problemas de la defensa nacional", agreg¨® Mrs. Edelman.
7. Una hora del aumento propuesto por Reagan para gastos militares servir¨ªa para dar almuerzo escolar gratuito a 19.000 escolares por a?o. Un d¨ªa de gastos militares pagana esa comida a casi medio mill¨®n de ni?os por a?o.
8. Mrs. Edelman sugiri¨® a las estudiantes una opci¨®n que ellas no pod¨ªan decidir. O se construye un centenar de bombarderos B-1, a 250 millones de d¨®lares cada uno, o se construyen s¨®lo 91 bombarderos y con la diferencia se da ayuda m¨¦dica a mujeres pobres y sus ni?os durante un a?o completo. Mrs. Edelman fue tan realista como para sugerir a las nuevas graduadas que se armaran con hechos al emprender su papel de l¨ªderes para una nueva generaci¨®n. Sus palabras fueron recogidas por el semanario New Yorker (27 de junio de 1983) y no hay constancia de que hayan sido le¨ªdas por los se?ores Reagan o Weinberger, por ejemplo. Pero en Espa?a hay que comunicarlas con urgencia a la Asociaci¨®n Pro-Vida, dado el anuncio de que el pa¨ªs mejorar¨¢ la cantidad y calidad de su armamento en el futuro inmediato.
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