Las fuerzas norteamericanas encuentran al sur de la isla de Granada una fosa com¨²n con m¨¢s de 100 cad¨¢veres

El cuerpo de Maurice Bishop, el derrocado jefe de Gobierno de Granada, se encuentra, aparentemente, entre el m¨¢s de un centenar de cad¨¢veres descubiertos en un campo de entrenamiento del Ej¨¦rcito granadino al sur de la isla, seg¨²n inform¨® The New York Times citando a varios funcionarios estadounidenses en Saint George. El macabro descubrimiento fue confirmado anoche por el portavoz del Departamento de Estado, John Hughes, quien, sin embargo, no pudo asegurar que el cad¨¢ver de Bishop se encontrase entre los hallados.

Seg¨²n The New York Times, los cad¨¢veres pertenecen a las v¨ªctimas de los enfrentamientos ocurridos en la plaza del Mercado de Saint George el pasado 19 de octubre, una semana despu¨¦s del golpe de Estado militar que de rroc¨® a Bishop y que, finalmente le cost¨® la vida en unas circunstancias confusas.Los principales dirigentes del golpe de Estado, el general Hud son Austin y el viceprimer minis tro Bernard Coard, est¨¢n ya en la prisi¨®n granadina de Richinorid Hill. Esposados y con los ojos vendados, en forma que contraviene la Convenci¨®n de Ginebr sobre prisioneros de guerra Austin y Coard fueron traslada dos el domingo desde el buqu estadounidense donde se encon traban retenidos. Se desconoce cu¨¢l ser¨¢ el futuro de ambos, pero se cree que ser¨¢n juzgados en Granada.

Comunicaciones restablecidas

Sobre el tel¨®n de fondo de la presencia norteamericana, Granada restablec¨ªa ayer la comunicaci¨®n telef¨®nica, a¨¦rea y por t¨¦lex con el resto del mundo. Por primera vez desde el inicio de la invasi¨®n, el aeropuerto de Pearls se abri¨® ayer oficialmente. Los granadinos desean que el aeropuerto de Punta Salinas, en cuya construcci¨®n participaban trabajadores cubanos, llegue a terminarse, seg¨²n informaciones recogidas por Reuter. Distintos medios relacionados con las obras, incluida la compa?¨ªa brit¨¢nica encargada de suministrar el radar y la torre de control, niegan la existencia de pruebas sobre el supuesto uso militar del aeropuerto, una de las razones alegadas para la invasi¨®n.