La Audiencia Nacional juzgar¨¢ el martes a Domingo Sol¨ªs, pero no dictar¨¢ sentencia
La Audiencia Nacional juzgar¨¢ el pr¨®ximo martes, d¨ªa 22, a los tres responsables del caso Uteco, Domingo Sol¨ªs Ruiz, su hijo Felipe y Ricardo Cruz Tu?¨®n, aunque no dictar¨¢ sentencia hasta que el Tribunal Constitucional se pronuncie sobre la constitucionalidad de la ley sobre R¨¦gimen Jur¨ªdico de Control de Cambios. Esta medida de dejar en suspenso el tr¨¢mite de dictar sentencia es aplicable a todos los juicios por delitos monetarios instruidos en la Audiencia Nacional.
Ante la solicitud de que los juicios por estos delitos sean suspendidos, la citada audiencia ha dictado una providencia en el sentido de que los juicios deben celebrarse, y que una vez concluido el procedimiento penal, y dentro del plazo para dictar sentencia, es cuando la posible inconstitucionalidad, de la ley causa efectos suspensivos.El fiscal de la Audiencia Nacional solicita para cada uno de los procesados penas de tres a?os y seis meses de prisi¨®n y multas que totalizan 709 millones de pesetas, como autores de dos delitos monetarios previstos en la ley de Control de Cambios y consistentes en adquirir en el extranjero, a t¨ªtulo oneroso, bienes de contenido patrimonial y no haber puesto a la venta las divisas obtenidas.
El fiscal se?ala que Domingo Sol¨ªs era el presidente de la Uteco (Uni¨®n Territorial de Cooperativas) de Ja¨¦n, en la que se produjo un almacenamiento excesivo de existencias de aceite-pendiente de comercializaci¨®n que alcanz¨® un volumen inusitado a lo largo de 1977 e hizo muy dif¨ªcil su venta en el mercado nacional.
Felipe Sol¨ªs y Ricardo Cruz, para resolver este problema, convinieron con la sociedad francesa Frahuil unos contratos denominados de cuenta social, que consist¨ªan en la exportaci¨®n de partidas de aceite por Uteco que ser¨ªan sufragadas por la sociedad francesa con cargo a la financiaci¨®n obtenida en el extranjero hasta el momento real de la venta y con reparto final al 50% del beneficio obtenido.
Reembolso de divisas
En el desarrollo de los contratos, siempre seg¨²n el fiscal, se suscribieron tres protocolos en 1977 y 1978, concernientes a 10.000, 25.000 y 36.000 toneladas de aceite de oliva, por un valor total de 7.022 millones de pesetas. Estas partidas fueron remitidas por Uteco a Frahuil, reintegr¨¢ndose a Espa?a las divisas correspondientes al contravalor en moneda nacional, pero sin haber. llegado a reembolsar las divisas de la parte del sobreprecio que hubiese obtenido Frahuil y del que correspond¨ªa a Uteco el 50%.El 2 de enero de 1978 Uteco obtuvo autorizaci¨®n para participar en la constituci¨®n de una sociedad francesa denominada Sofranes, correspondiendo a Domingo Sol¨ªs y Felipe Sol¨ªs los cargos de presidente del consejo de administraci¨®n y director general, respectivamente. Tambi¨¦n obtuvieron autorizaci¨®n para transferir a Francia la suma de 2.500.000 francos franceses (m¨¢s de 47 millones de pesetas, al cambio actual) como contravalor del 50% de la participaci¨®n espa?ola. La transferencia se realiz¨® el 24 de enero de 1979, pero la inversi¨®n no se formaliz¨® hasta el 23 de julio de 1981.
Durante este per¨ªodo, la suma estuvo depositada en el Bando Exterior de Espa?a, produciendo unos intereses de 525.000 francos franceses (cerca de 10 millones de pesetas de 1983). Esas divisas fueron desviadas por los procesados a la cuenta de Sofranes, en vez de ser repatriadas.
El fiscal relata la participaci¨®n de los procesados en la solicitud de pr¨¦stamos que les fueron concedidos, si bien para su consecuci¨®n no hab¨ªan obtenido las autorizaciones administrativas de la autoridad competente espa?ola, y que Uteco carec¨ªa de poderes suficientes.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.